Hable Bien De Sí Mismo

Con frecuencia percibo, en personas que han perdido su empleo, que tienen dificultad para hablar bien de sí mismas; es decir, manifiestan cierto miedo, incomodidad, negación o simplemente no saben cómo enfatizar sus cualidades.

Estoy convencida de que las personas que experimentan un despido, cualesquiera que sean los motivos, pasan por un proceso de introspección que puede ser muy difícil, ya que solemos ser nuestros jueces más severos.

Todos los eventos en la vida activan procesos emocionales. El despido es uno de ellos. En este tipo de situaciones (que lamentablemente cada vez son más frecuentes), la gente inicia inesperadamente un proceso que comúnmente se denomina “duelo” y, va desde el shock (primer impacto que se sufre cuando nos percatamos de una pérdida), hasta la depresión, pasando por supuesto por la negación, enojo y a veces hasta ira hacia quienes consideramos son los causantes de la situación; esta agresión puede, incluso, ir en contra de nosotros mismos porque sin darnos cuenta muchas veces nos devaluamos sintiéndonos culpables de todo lo que sucede generando así una baja autoestima.

Derivado de lo anterior se experimenta lo que conocemos como crisis; etapas de incertidumbre, miedo, angustia, desolación, confusión, impotencia, desaliento e inseguridad, debido a que hemos dejado de “ser” lo que éramos antes, pero aún no sabemos lo que vamos a “ser” a futuro.

De pronto, es como si el mundo se detuviese, pero obviamente no es así. Sigue adelante y no sólo eso: es inminente darse a la tarea de buscar trabajo, aunque la sola idea de hacerlo quizá intensifique esas emociones de incertidumbre y angustia que experimentamos cuando estamos en crisis; más aún en el caso de aquellos que han permanecido por varios años en una empresa y han olvidado qué pasos dar para reintegrarse al mercado laboral.

Buscar empleo es en sí un trabajo y son muchas las cosas que hay que hacer para ser productivos en esa búsqueda. Si analizamos un poco el perfil de un buen buscador de empleo, necesariamente requiere de habilidades de comunicación, negociación, capacidad de análisis y asertividad en la toma de decisiones. Con respecto a características personales es muy útil ser creativo, intuitivo, con iniciativa, confianza y seguridad en sí mismo, así como asumir riesgos.

También se requiere conocer el mercado laboral, identificar las oportunidades que éste ofrece y detectar los posibles obstáculos; en fin, es necesario hacer una búsqueda sustentada en una metodología que nos facilité el proceso y nos oriente durante el mismo.

Por tanto, el punto de partida es que la persona en estas circunstancias tenga claro su objetivo profesional, es decir: qué tipo de trabajo desea, así como el tipo de empresa a la que le gustaría pertenecer.

Ya en el proceso de búsqueda, las entrevistas de trabajo representan el mejor

...