LOS RECURSOS AFECTIVOS DEL EDUCANDO

Aspectos como autoestima, motivación, autoconcepto influyen en el niño en su rendimiento escolar.

Autoestima, es la valoración positiva o negativa que el individuo hace de su autoconcepto, incluyendo las emociones que asocia a ellas y las actitudes que tiene de sí mismo.

Autoconcepto,es la imagen que tenemos de nosotros mismos, en las dimensiones cognitiva, perceptual y afectiva; se puede establecer el autoconcepto académico, que es la parte de sí mismo que se relaciona directamente con el rendimiento escolar y sirve para dirigir el comportamiento en la escuela.

El autoconcepto académico presenta cuatro dimensiones:

• Relaciones con otros, es el nivel de confianza del alumno con otras personas, manifestándose amistoso, espontáneo y tolerante a la frustración.

• Asertividad, son acciones donde el niño expresa sus propios sentimientos, derechos, afecto y amor.

• Compromiso, confianza en su propio potencial, cuando se tiene un alto compromiso, demuestra interés en la originalidad, creatividad y disposición al riesgo.

• Enfrentamiento de situaciones escolares, indica la confianza en las propias habilidades escolares, satisfacción con el trabajo propio y el cumplimiento de las metas escolares.

Existe una relativa independencia entre el autoconcepto en un área y el autoconcepto en otra.

Actualmente se ha visto una estrecha relación positiva entre la autoestima y el autoconcepto con el rendimiento escolar; aunque es posible que un buen desarrollo afectivo eleve el rendimiento escolar, un alumno con un buen rendimiento escolar tendrá más posibilidades de tener un autoconcepto elevado.

El enfoque de desarrollo de habilidades sostiene que los éxitos relacionados con el logro académico, influencian el autoconcepto a través de la evaluación, por parte de profesores y padres, de esta manera, el autoconcepto académico es fundamentalmente el resultado del rendimiento académico.

El modelo autopromoción, afirma que el logro académico, no depende solo del logro académico pasado, sino que el autoconcepto académico contribuye significativamente en su predicción.

La teoría de la autoeficacia, plantea que los esfuerzos que una persona haga para obtener un logro determinado, se relaciona con la percepción que tenga de que podrá realizar las actividades que la lleven al resultado deseado.

Se puede afirmar que mejorar la autoestima de los niños en la escuela puede ser un medio para elevar el rendimiento escolar.

En el modelo de Arancibia y Maltes, se encontró que las variables que mejor explicaban el rendimiento, eran las expectativas del profesor hacia sus alumnos, basándose en el autoconcepto del alumno y su rendimiento; se observó que en niveles socioeconómicos bajos, las expectativas del profesor se relacionan menos con el rendimiento real y más con las características conductuales.

En cuanto al contexto escolar y desarrollo de la autoestima, la experiencia escolar determinará el bienestar socioemocional del alumno y tendrá efectos significativos durante su vida adulta; por eso la importancia de evaluar cómo el contexto escolar afecta el desarrollo de la autoestima positiva o negativa en los niños y analizando si los sistemas escolares fomentan o no una autovaloración positiva en los niños.

Algunos autores señalan que el autoconcepto de sí mismo se desplaza durante la infancia, de lo físico a lo psicológico; durante los primeros años, el aspecto y las características físicas, son muy importantes en la evaluación que los niños hacen de sí mismos, muchas veces basándose en acciones que realiza cotidianamente, esto hasta antes de los 7 años; a partir de esta edad los niños se describen en relación a una comparación entre lo que hacen y lo que otros hacen.

Erickson señala que el ingreso a la escuela ´puede afectar la autopercepción del niño; en esta edad el niño tiene mayor amplitud de comparación con otros niños de su edad y puede tener un efecto determinante en su autoestima y un sentimiento de competencia para efectuar las tareas escolares o un sentimiento de inferioridad e incapacidad para salir victoriosos de la situación escolar, si es así se producirá una actitud deinercia, donde el niño pone menos interés en las tareas escolares, ya que ha perdido la confianza en que podrá realizarlas; esto se ve en niños con dificultades de aprendizajes.

Se ha afirmado que los alumnos con Trastornos de Aprendizaje presentan una autoestima baja, debido al fracaso constante. Hay evidencias de que un bajo autoconcepto puede llevar a atribuciones académicas desadaptadas: creencia que el éxito se debe a causas externas y los fracasos, debidos a la falta de habilidad.

Las descripciones de sí mismo van con la edad, desde aspectos conductuales, emocionales y situacionales, hacia características de la personalidad social como capacidad para hacer amigos o aceptación de las normas sociales.

Asimismo, se tiene el efecto producido por las actitudes de los profesores, el principio de sí mismo es en un principio determinado por las percepciones de otros acerca de sí mismo.

Una apreciación consistente de parte del profesor y otros, relativa a un podre desempeño, puede generar en un niño una percepción de sí mismo como poco capaz, la cual será difícilmente de modificar.

La problemática de la profecía autocumplida, es un ejemplo de lo que puede suceder con las concepciones que los maestros transmiten a sus alumnos respecto de lo que ellos son.

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