La idea principal del libro "Me he llevado tu queso"

En este libro, el periodista Darrel Bristow-Bovey ha resumido las lecciones de cientos de manuales de autoayuda. Si antes sospechabas que eran una sarta de tonterías, ahora no te cabrá la menor duda.

“Yo me he llevado tu queso" es una respuesta al libro original de Spencer Jonson "¿Quien se ha llevado mi queso?". El libro de Johnson es un manual de autoayuda que enseña los pasos para la felicidad, mientras que "Yo me he llevado tu queso" es un “antimanual”. El subtítulo del libro dice que es un manual de autoayuda para los que no quieren ayudarse, para los que no quieren ni levantarse del sofá.. Esta obra es una crítica a los libros de autoayuda, en donde el autor dice que si somos como él, esto significa que no nos gusta esforzarnos para convertirnos en mejores personas. Es un libro humorístico, ameno, fundamentalmente una sátira no sólo hacia los libros de autoayuda sino hacia las corrientes de moda y cómo a veces, por no quedarnos afuera, se asume todo como una "gran verdad o revelación". Tiene mucho de verdad, una verdad práctica, sencilla que muestra lo absurdo que podemos ser si aceptamos todo sin espíritu crítico.

Con su estilo sarcástico, este manual explicará cómo mejorar sin mover un dedo. Es más, ni siquiera es necesario leer el libro. Sólo con comprarlo y colocarlo en un sitio bien visible de la casa te sentirás más feliz, inteligente y deseable. Ello se debe a un revolucionario tratamiento que le han dado al papel, un compuesto químico bautizado con el nombre de “Osmósix” y perfectamente inhalable en posición horizontal. Al final de este libro te enterarás de quién se ha llevado el dichoso queso. Y, lo que es más importante, habrás aprendido unos cuantos trucos para que no se lleven también tu cerebro.

a nadie.

Esta historia que le fue contada a Darrel (Autor) por un anciano perteneciente a una de las culturas más antiguas del mundo (Bosquimano), refleja que cuando se quiere lograr un objetivo y no se vislumbra el camino a elegir, obviamente no se consigue. Pero que se debe trazar inmediatamente otro objetivo a cumplir, aprovechando cada oportunidad que se presente inclusive si se encuentra en el camino fallido al objetivo que no se concretó.

En la vida académica esta historia se puede relacionar con conductas personales (porque esta historia se presta para esto), por ejemplo, cuando un profesor X trae su huevo de avestruz y lo presenta a lo demás alumnos, de modo que el profesor X pretende hacer “fingir” que su huevo es algo importante y que todos deberían considerarlo así, para permitir que los alumnos rellenen ese huevo de lo que sea, al fin lo que le interesa es tener trabajo y que lo alumnos queden no inconformes, de modo que esto no se vea reflejado en la calificación negativa de los alumnos. Nota: El huevo puede ser un curso, taller

...