Logrando el amor en pareja. Opinión del libro de Bert Hellinger

El libro “lograr el amor en pareja” me pareció muy práctico y directo. Muchos temas del libro me hicieron ruido, fue como un despertar y reaprender. Un libro lleno de revelaciones. Me ayudó a terminar de sacar a la luz algunos problemas que había estado teniendo por heridas de pasado y entender el porqué me había estado poniendo en ciertas situaciones con ciertas parejas.

Ya todo lo sabemos y estamos justo en el lugar que debemos estar. Hay relaciones para ser felices y hay relaciones para aprender. Pueden ser ambas. Yo he vivido relaciones en las que sufrí mucho y es donde más he crecido, por eso experimentaba miedo de empezar una nueva pues ya más o menos sabia a que me iba enfrentar, y otra vez dolía, pero esta vez menos. En algunos casos, como el mío, a veces ya se sabe que va a pasar y aun así no se puede detener, aunque quiera, porque es necesario.

Hellinger habla que honrar a nuestras parejas pasadas, respetarlas y agradecerles las experiencias y enseñanzas que nos dejaron es necesario para lograr el éxito en la nueva relación.

Definitivamente las relaciones de pareja son crecimiento, nos llevan a conocernos, a explorarnos my adentro. Una vez desperdicie energía en “educar” a mi pareja, y eso era solo un reflejo de lo que yo quería cambiar en mi misma. Siempre debemos trabajan en nosotros mismos.

He notado en mis experiencias de vida, que después de en la familia, en donde más se aprende y crece es en pareja. Y cada pareja mía me ha enseñado algo a las buenas y a veces a las malas. Hace tiempo, cuando terminé mi primera relación, duré mucho tiempo con culpa y reprochándome el que no haya funcionado, con el tiempo entendí que asi tenía que ser esa relación, que la disfrute, aprendí mucho y que así es la vida. Aunque es algo que hace mucho ya había superado, aceptado y reconocido, y, aunque haya sido en mi adolescencia, este libro me hizo incorporarlo aun más y conscientemente a mi historia, es parte de mí y de lo que soy. También me di cuenta de que no estaba reconociendo a mi último ex novio, lo negaba y aunque no me daba cuenta eso me había estado perjudicando en mi relación actual, porque no estaba aceptando parte de mi misma, que yo se que al fijarme en el vi algo de mí.

Suelo ser una persona muy consciente, y mis mecanismos de defensa son conscientes, por eso se me hacia mas difícil aceptar mi pasado. Me estaba rechazando, no podía ser yo misma y empezaba a sentirme insegura.

El libro menciona jerarquías, estoy muy de acuerdo en que el amor es ordenado, se siente y así debe ser. Somos las personas las que desordenamos. Los hijos son más pequeños que los padres y solo son hijos. La pareja va primero. La historia de los padres va primero y no podemos hacer nada para cambiarla, además si quiero cambiarla estaría rechazando lo que soy.

Por ahí hay un dicho que dice: El que no conoce su historia, está condenado a repetirla… A veces las relaciones no funcionan porque estamos atrapados en lealtades inconscientes, siguiendo los mismos pasos que nuestros padres.

Cuando una relación anterior no termino bien, que me lastimó y no hecho el duelo, es muy difícil que comience un nuevo amor. Los problemas de relación tienen que ver con heridas que no se han podido curar del pasado principalmente porque no tenemos conciencia de que las tenemos.

También se explica la importancia de reconocer a los padres. Que como hijos somos 50% mamá y 50% papá y estamos conectados a ellos y a los que vinieron antes de ellos. Ellos hicieron posible que yo esté aquí. A donde yo vaya mis padres y mis antepasados viven en mí.

De ellos tomo la vida. Rechazar o negar a alguno de mis padres es rechazarme a mí misma. Y cuando reconozco a mis padres y su historia es cuando ya puedo estar en sintonía con la vida.

Los padres dan, los hijos toman. Y nosotros como hijos, lo mejor que podemos darles es honor, respeto y viviendo nuestra vida, haciendo algo productivo con ella y también dar vida. Amo a mis padres y los honro. Siempre he sentido y sabido que soy 50% mi madre y 50% mi padre. Antes creía que los honraba pero estaba confundida, en vez de honrarlos y seguir mi camino como yo creía que lo hacía, pedía consejos, pero no eran consejos, eran indicaciones pues no quería hacerme responsable de mis actos y eso me hacia inmadura.

En la relación entre el hombre y la mujer, ambos dan lo que tienen y toman lo que les falta, pero quien no toma a sus padres, no podrá pasar mucho a su pareja ya que permanece estancado en sí mismo, sigue siendo como un niño y no puede desarrollarse como adulto.

Ganamos libertad en la pareja cuando no hacemos depender nuestra felicidad de ella, sino que tomamos la responsabilidad de nuestra vida como adultos. Cuanto más alto sea el grado de obsesión y ceguera en el enamoramiento, más se aleja la persona de la realidad y no ve su potencial como pareja sino como la madre perfecta que siempre deseó tener. Es importante estar abierto a una relación de igual a igual.

También es importante ocupar el lugar que nos corresponde, con respecto a nuestro sistema familiar, ya que el amor sólo llena lo que el orden abarca. Por ejemplo, los hijos que hacen de padre o madre de sus propios padres, no ocupan el lugar de hijos que les corresponde y se castigarán fracasando en el amor o escogiendo a parejas que no han tomado a sus padres y estarán como "niños"

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