Malestar En La Cultura

El malestar no los genera infinidades de cosas. Bien sea, el propio cuerpo que requiere de muchos cuidados y ni siquiera puede eludir los displaceres producidos por el mismo; el mundo exterior, que es caótico, contingente y fuente de fuerzas destructoras omnipotentes, y las relaciones humanas, tal vez la mayor y más intensa fuente de sufrimiento. El yo es lo que nos diferencia de los otros, no nos parecemos a más nadie; hay un límite subjetivo que nos separa de los demás, cuando el otro es diferente a nosotros uno no lo tolera y lo aleja puesto que nos sentimos incómodos y buscamos llenarnos con personas parecidas a nosotros. La religión “sentimiento oceánico” es la fuente primordial de la religiosidad humana, los límites del yo desaparecen y me vuelvo parte del todo. El hombre se considera feliz por el simple hecho de haber eludido la desgracia. Freud realiza una clasificación de cómo se desliga el hombre del mundo exterior y las aplica el hombre en la búsqueda de su felicidad (lo utiliza como calmantes): aislamiento, narcisismo, ciencia y la intoxicación (sustancias embriagadoras, distracciones, satisfacciones sustitutivas); también incluyo la belleza y el amor, el que tenga amor es feliz, esta es la sensación más placentera, es lo mejor pero lo más terrible, jamás somos tan desamparadamente infelices como cuando ya no tenemos al ser amado.la cultura debe protegerse de la naturaleza y regular las relaciones humanas, las cosas que nos hacen cultura es: la tendencia a la belleza (simetría), la limpieza, tendencia a la sublimación (artes, ciencias) y la tendencia a regular las relaciones (familiares, amistosas y amorosas). Freud concluye que la felicidad es irrealizable, el “TODO” no es negado por naturaleza ya que “NO SE PUEDE TODO”, esta búsqueda posee un aspecto positivo y uno negativo; la religión es un delirio que entorpece la búsqueda de la felicidad.

Dice Freud que la construcción de la familia se debe a la necesidad de satisfacción sexual, la mujer pasó a ser un inquilino permanente en la casa, y a su vez, tuvo que quedarse para permanecer junto al hombre. Con el tiempo los hijos se dieron cuenta de que una asociación puede ser más poderosa que el individuo aislado, fue así como surgieron las alianzas fraternas, los hermanos tuvieron que ponerse restricciones, de esta forma la vida en comunidad adquirió sus fundamentos: la obligación del trabajo puesta por las necesidades exteriores; el amor, que impide al hombre serle infiel a la mujer. La cultura busca lazos amistosos, la cultura necesita de las masas, no está satisfecha con los vínculos amorosos entre dos seres, excluye las parejas y fomenta la amistad.

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