Normas Y Relaciones Humanas

Introducción

La importancia del estudio de la conducta humana, se hace cada vez más evidente, dada la inmensa complejidad de la relación interpersonal y de grupo. La problemática de la relación del hombre con su semejante es tan apremiante y difícil, que podría afirmarse, que casi la totalidad de los hombres no tienen una clara conciencia de ella. Es el hecho que el hombre se ha preocupado, a través de la Historia, por extender y cimentar sus conocimientos acerca de la naturaleza, para dominarla y beneficiarse de ella. Indudablemente ha tenido un extraordinario éxito en este objetivo, como se deduce de los espectaculares avances de las ciencias como la medicina o la física.

Sin embargo, la ciencia del comportamiento humano, a pesar de los aportes de la psicología tradicional, el sicoanálisis y el análisis transaccional, se encuentra en ciernes y los problemas de relación de unos hombres con otros, son tan agudos como lo fueron veinticinco siglos atrás, en el comienzo de la filosofía. Richard Lázarus ha dicho para destacar la importancia de su estudio: “O el hombre aprende a conocer los móviles de la conducta de sí mismo y los demás; sus motivaciones, sus incentivos y sus frustraciones, o perece devorado por el hombre”.

Bástanos leer las noticias nacionales e internacionales u observar en nuestro alrededor para darnos cuenta de fenómeno multitudinario de ansiedad y frustración de una apreciable parte de la humanidad, a juzgar por los actos de violencia: asesinatos, suicidios, alcoholismo, drogadicción, violaciones, guerras, desadaptaciones personales al estudio o al trabajo, fracasos en los negocios, quiebra de la autoridad, crisis de la fe en las instituciones políticas y religiosas, matrimonios frustrados, inestabilidad en todas las manifestaciones de la vida social.

No obstante, dentro de cada sociedad existen una serie de normas de convivencia que responden a un deseo generalizado de orden y estabilidad social. Son convencionalismos que se han ido estableciendo y transformando a lo largo de la historia en concordancia con una serie de costumbres y tradiciones. Cuando las normas sociales dejan de ser útiles para la convivencia dentro de una sociedad determinada, e incluso se convierten en una traba para la misma, suelen ser sustituidas por otras nuevas que sean más apropiadas a los cambios sociales experimentados.

Esta tesis tiene como objetivo mostrar las bases sociales del comportamiento humano. Su finalidad es la de ayudar a comprender mejor el comportamiento individual como un aspecto de las relaciones interpersonales, de las relaciones que mantenemos con otras personas y de la sociedad en la que vivimos. La idea principal es que ni existe sociedad al margen de los individuos ni hay individuos sin sociedad. Así pues, la realidad social debe ser entendida como una construcción de los individuos y las relaciones que mantienen entre sí.

DESARROLLO

RELACIONES HUMANAS

El ser humano es un ser social, no puede vivir aislado porque dentro de sus necesidades está la de relacionarse con el mundo externo. Para lograr que esta convivencia sea lo más armoniosa posible, deberá aplicar ciertos principios de carácter general y revisar sus actitudes mostrando una constante disposición al cambio si es necesario. Algunos creen equivocadamente, que un buen ambiente de relaciones humanas, es aquel en que no hay discrepancias entre las personas y que todo marcha perfectamente. El que esté bien puede ser un "clima artificial".

Por el contrario, las auténticas relaciones humanas son aquellas en que a pesar de las divergencias lógicas entre las personas, hay un esfuerzo por lograr una atmósfera de comprensión y sincero interés en el bien común. En síntesis las relaciones humanas son la forma como tratamos a los demás y cómo los demás nos tratan a nosotros.

“Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo. Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del solo! que cuando cayere, no habrá segundo que lo levante. También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; más ¿cómo se calentará uno solo? Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto”. Eclesiastés 4.9-12.

La finalidad de las relaciones humanas es propiciar la buena convivencia de forma que logremos la comprensión de las demás personas. En otras palabras, se trata de destruir todo aquello que se oponga al correcto entendimiento entre las personas. Se conoce que las actitudes del ser humano obedecen a muchas causas, por lo que muchas veces sus actuaciones no responden a su personalidad sino a situaciones que le afectan en ese momento. De ahí la necesidad de ponernos en el lugar del otro y adoptar una actitud de humildad y comprensión.

Las relaciones humanas examinan la interacción entre individuos. El motivo fundamental de su estudio es aprender a interactuar más eficazmente con la gente, a fin de convertirse en un miembro más valioso para las organizaciones y la sociedad en general. Todos los puestos y papeles requieren algunas de esas destrezas.

La necesidad de mejorarlas en el lugar de trabajo se puso en evidencia una vez que los trabajadores pasaron de la granja a la fábrica. La psicología, la sociología y la antropología contribuyeron a entenderlas más a fondo, especialmente en lo tocante al deseo de incrementar la productividad. Tres escuelas de la administración surgieron entonces: la clásica, la conductual y la científica. Hoy la necesidad de dominar las relaciones humanas es todavía mayor, pues nos encontramos en plena era de la información con sus organizaciones grandes y complejas, con empleados mejor informados, con economías globales y con el énfasis en la rapidez.

Algunos factores (metas, cultura organizacional, función de los puestos y fuerzas externas) pueden influir en las relaciones humanas dentro de las empresas. He aquí algunas fuerzas externas: economía, entorno legal-político, ambiente sociocultural, tecnología cambiante, desastres imprevistos, fusiones corporativas y ventas, cambios de la administración y economía global. Para enfrentarlos puede recurrirse a sólidas habilidades de las relaciones humanas.

Factores que intervienen en las relaciones humanas

El Respeto: aunque no se comparta un punto de vista, conviene considerar las creencias y sentimientos de los demás para así demostrar que nos importa lo que tienen que decir y que pensamos en un beneficio común, como en la libertad de expresión. Una persona depende de las demás por más que se niegue, por lo que se considera realmente

...