Origenes De La Filosofia

FILOSOFÍA: MÉTODOS Y APLICACIONES

Alumna: Adriana Deyanira Vázquez Bravo

Profesora: Raquel Ladrón de Guevara

Mayo de 2013

ORÍGENES DE LA FILOSOFÍA

Se suele indicar que la filosofía surge como "paso del mito al logos", esto centra nuestra atención en este tema, pero también nos permitirá plantearnos, si realmente, y como parece indicar, la anterior expresión "paso del mito al logos" supone una superioridad de la filosofía frente al mito como forma explicativa. No podemos olvidar que la orientación de ésta tema es el origen, por lo que no podemos perder de vista las circunstancias sociales de la época en la que acontece.

Filosofar es una actividad que muchos realizamos en nuestra vida. Principalmente en la infancia, cuando no conocemos nada y todo lo que nos rodea tiene un halo de misterio y maravilla. Vamos creciendo y vamos adquiriendo todo ese conocimiento que ya existe, todo lo que ya se sabe, todo lo que ya se da por sentado… pero no siempre se ha sabido lo que hoy se sabe. Hoy cualquier persona acepta que la tierra es redonda y que gravita alrededor del sol a la par que otros planetas y que juntos formamos un sistema solar y que nuestro sol es sólo uno de miles de millones que hay en el espacio. ¿Qué pasaba antes? ¿Cómo se explicaban los primeros hombres su mundo sin tener todo este conocimiento? Es realmente muy difícil imaginar estar frente al mar y no tener certeza de hasta dónde llega lo que vemos o que puede haber al final. O cómo podía ser que en medio de un hermoso y soleado día, de pronto el cielo se llenara de nubes negras y comenzara a caer agua a raudales acompañada de grandes estruendos. La explicación que esos primeros hombres dieron fue atribuirlo todo a seres supremos, a dioses que además contaban con los mismos defectos y virtudes que ellos mismos así que sus acciones siempre eran caprichosas. Así, la vida de los hombres se fue llenando de deidades que manejaban todo, desde las lluvias o sequías hasta el mismo destino de las personas. En este contexto se vivía, en medio de mitos y dioses, al momento del nacimiento de la filosofía.

La cuna de la filosofía está en la Grecia antigua, donde para algunos estas explicaciones divinas dejaron de ser satisfactorias y suficientes así que pensadores como Tales, Anaximandro y Anaxímenes de Mileto (considerados los primeros filósofos) se dieron a la tarea de buscar el origen no divino de todas las cosas. “…el cosmos tiene su propia lógica de desarrollo y no fue creado por un acto de Dios…” (Garvey & Stangroom, 2012: p. 50) Esta forma de pensar fue el denominador común de estos filósofos referidos ahora como presocráticos. Los griegos tuvieron una gran ventaja, eran vecinos de los egipcios y los babilonios de quienes aprendieron la geometría y las matemáticas (Garvey & Stangroom, 2012) y eso sumado al papel protagónico que le dieron a la capacidad de asombro los empezó a mover en la búsqueda no solo de los “cómos”, sino de los “porqués”. El gran avance de los griegos en el conocimiento fue dar conclusiones razonadas a sus preguntas. (Garvey & Stangroom, 2012).

Así, éstos primeros filósofos intentaron dar con el origen de todo valiéndose de aquello que se encontraba a su alrededor, con los elementos que tenían a la mano y que por tanto podía ver y tocar. Así, por ejemplo, para Tales de Mileto era el agua lo que formaba todas las cosas, para después dar paso a ideas un poco más completas tal vez, como las de Anaxímenes o Anaximandro para quienes era el aire o “lo ilimitado” (ápeiron, una materia no materia) respectivamente. Cada nueva idea trataba de llenar los huecos dejados por las anteriores y buscaba explicaciones más racionales.

Así fueron brincando de elemento en elemento de respuesta en respuesta y así hubo más pensadores con ideas nuevas y diferentes. Hablamos de Heráclito de Éfeso, Parménides, Pitágoras, Zenón, Empédocles, Anaxágoras o Demócrito. Todos ellos tomando y aprendiendo de sus predecesores y agregando cosas o bien refutando ideas, pero siempre en la búsqueda de la verdad. La llegada del período clásico se da con el cambio en el objeto de interés de la filosofía y, aunque no deja de lado la physis sí se enfoca mucho más a los problemas relativos al hombre, por lo que también es llamado periodo antropológico. (Chávez Calderón, 2008).

Para Sócrates, considerado el más importante e influyente pensador del mundo antiguo y todavía referente indudable de nuestros tiempos, la principal preocupación de siempre fue la moral y ética. Él vivió en una constante e incansable búsqueda de la virtud y el conocimiento. Era famoso en Atenas aunque no siempre muy bien recibido ya que siempre enfrascaba a su interlocutor en una incesante retahíla de preguntas de las que, además, nunca quedaba satisfecho con la respuesta obtenida por lo que llevaba a la mayoría a una intensa frustración. Sócrates vivió y murió fiel a sus ideales, para él vivir de acuerdo al conocimiento adquirido era lo que debía ser así que cuando

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