PERSONALIDAD PSICOPÁTICA

PERSONALIDAD PSICOPÁTICA.

“Algo no va bien en nuestro tiempo cuando seguimos inmersos en discusiones bizantinas. Personas normales, desde luego, no lo son: entienden la diferencia entre el bien y el mal, pero disfrutan haciendo el mal, viven para hacer el mal, y eso no es muy normal que digamos. Algo tendremos que hacer también desde el punto de vista legal, ¿no les parece?” (Tomado de: José Sanmartin, Prólogo al libro de J.M. Pozuelo: Psicópatas integrados).

Birnbaum define los caracteres psicopáticos como: “Naturalezas anormalmente predispuestas por la tara hereditaria, que muestran ligeras desviaciones, especialmente en el campo de la personalidad; es decir, sobre todo (aunque no exclusivamente), en la esfera de los sentimientos, de la voluntad y de los instintos”.

El 13 de septiembre de 1848, Phineas P. Gage sufrió un horrible accidente cuando una barra metálica le atravesó el cráneo, lo que le produjo lesiones en el cerebro y cambió su vida después de una sorprendente recuperación. A partir de ahí, Gage cambió su personalidad: de ser una persona responsable y adaptada a la sociedad, se convirtió en un individuo inestable, impulsivo, indiferente ante los demás e incapaz de planificar el futuro, es decir, mostró conductas contrarias a una adecuada integración social. Gage marcó el origen de las investigaciones en torno a la relación entre el lóbulo frontal y los comportamientos psicopáticos.

La relación entre daño en el lóbulo frontal y criminalidad es particularmente intrigante y compleja. El daño en los lóbulos frontales provoca el deterioro de la intuición del control del impulse y de la prevision que a menudo conducen a un comportamiento socialmente inaceptable. Los pacientes se caracterizan por su demanda de gratificación instantánea y no se ven limitados por costumbres sociales o miedo al castigo.

Como muestran las técnicas de neuroimagen , el sustrato anatómico subyacente al comportamiento psicopático se refleja en diferencias estructurales o funcionales vinculadas al lóbulo frontal y a la corteza ventromedial, que se vinculan a la autorregulación, la reversión del aprendizaje y la toma de decisiones. En éste sentido, los psicópatas sufren un déficit en la integración del mundo emocional con el razonamiento y la conducta].

Concepto de psicopatía.

La psicopatía es un trastorno de la estructura de personalidad, fruto de una confirmación anómala de rasgos temperamentales y caracteriales que pueden expresarse con desajustes comportamentales diversos.

Los psicópatas no tienen una pérdida de contacto con la realidad, ni experimentan los síntomas característicos de la psicosis, como alucinaciones, ilusiones o profundo malestar subjetivo y desorientación. A diferencia de los psicóticos, los psicópatas son plenamente racionales y conscientes de lo que hacen y porqué lo hacen.

Su conducta es el resultado de su elección, libremente realizada, convirtiéndose en el más perfecto depredador de su propia especie. A partir de los planteamientos de Cleckley y a partir de los desarrollos conceptuales y metodológicos de Robert Hare, la psicopatía se ha ido perfilando como una constelación de rasgos de naturaleza afectiva, interpersonal y conductual altamente significativa en el estudio del comportamiento antisocial adulto.

La psicopatía se compone de dos tipos de constelaciones de rasgos: área emocional o interpersonal y estilo de vida antisocial. Hare ha construido un instrumento para la detección de los psicópatas, la Psychopathy Checklist (PCL), que está constituida por dos factores:

1. Muestra impulsividad, comportamiento antisocial y un estilo de vida inestable, comportamientos criminales y manifestaciones de comportamiento antisocial.

2. Refleja características afectivas e interpersonales, como el egocentrismo, la ausencia de remordimientos, etc.

La falta fundamental de los psicópatas primarios (verdaderos) reside en el escaso miedo que sienten. Se podría considerar a los psicópatas como individuos depredadores que están especialmente adaptados para sobrevivir en lugares donde los recursos son escasos y la tendencia a la aproximación debe prevalecer a menos que el peligro sea inminente. Los principales inhibidores de la violencia y la conducta antisocial son inexistentes o muy deficientes en los psicópatas.

La psicopatía abordada desde una perspectiva psicopatológica, agrupa distintos desajustes dependiendo de la esfera de la personalidad afectada: cognición, afectividad, actividad interpersonal y estilo de vida.

Esfera cognitiva: hace referencia a los esquemas mentales, área de la personalidad que se va formando a lo largo del proceso de socialización (carácter).

a) Visión egocéntrica del mundo que se plasmará principalmente en una búsqueda activa de la propia satisfacción. Esta característica predispone al psicópata a la violación de los derechos y libertades de sus congéneres.

b) Sensación grandiosa de autovalía con planteamientos de metas ilimitadas de éxito. Éste rasgo de personalidad predispone a estos sujetos a realizar un erróneo análisis de la realidad lo que aumenta la probabilidad de fracaso conductual.

c) Percepción hostil y amenazante del medio. El psicópata suele presentar un patrón de desconfianza y suspicacia hacia los demás, realizando interpretaciones

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