PSICOLOGIA

2. DIANA RESTREPO

El presente análisis tiene como fin la integración teórica y práctica que demuestre la comprensión del tema en análisis, en este caso de la depresión, un trastorno psicológico de gran incidencia en la población y que se presenta de múltiples formas que van desde lo “aceptado socialmente” como triste o decaído como estado de ánimo que cambia hasta episodios depresivos mayores incapacitantes de la persona que persisten en al menos dos semanas. Entre los síntomas que el DSM IV enumera como criterios diagnósticos y que describen un poco la conducta están: estado de ánimo depresivo, pérdida de interés o placer, fluctuaciones en el peso corporal, hábitos de sueño, fatiga o pérdida de la energía, pensamientos de minusvalía o culpa excesivos, déficit en la concentración, pensamientos o ideaciones suicidas (Nezu, Maguth y Lombardo, 2006)

Las aproximaciones conductuales siguiendo a Lewinsohn, Gotlib y Hautzinger (2002) consideran a la depresión como una consecuencia de la falta de reforzamiento, ya sea en términos de una baja densidad de reforzamiento positivo (Ferster, 1966) o de tasas bajas de reforzamiento positivo contingente a las respuestas (Hoberson& Lewinsohn, 1974, 1975). También se ha conceptualizado la depresión en términos del control aversivo (Ferster, 1973; Grosscup & Lewinsohn, 1980) o en términos de pérdida de contingencias debido al castigo (Seligman, 1981l). El trabajo investigativo avanzó hacia una posición conductual que veía la depresión de forma más operante, en donde las tasas bajas de refuerzos positivos contingentes era causal del sentimiento disfórico, las contingencias ambientales alejadas del interés, la simpatía y la preocupación por el otro podrían mantener las conductas depresivas y los déficit en habilidades sociales son parte de los antecedentes de las bajas tasas

3. Luz Stella Pedraza

ANALISIS PSICOLOGICO

Realizando un análisis de la película, podemos visualizar un vínculo de dependencia emocional entre un hombre y una mujer, ambos esperando que el otro comprenda, o acepte en su singularidad, lo sostenga en sus deseos e inseguridades.

Analizando la conducta agresiva de Antonio, en el desarrollo de la película “Te doy mis ojos”, podemos determinar que presenta una disfunsión psicológica, anterior a su matrimonio con Pilar. A pesar que no hay detalles sobre la niñez, ni la adolescencia de Antonio, podemos deducir que su comportamiento no es normal y que tiene bases anteriores, los podemos constatar cuando es humillado de forma burlesca por parte de su hermano.

Así mismo podemos ver que Pilar, también presenta una disfunsión similar, ésta la podemos percibir cuando su madre le dice que ella también vivió lo mismo y lo asume como algo normal. Podemos suponer que Pilar, también fue víctima presencial en su niñez de este tipo de violencia.

Antonio y Pilar están unidos por un aspecto común en el que se identifican, se sienten víctimas de sus propias familias de origen. Es un resentimiento profundo que comparten, se sienten unidos por el maltrato del entorno familiar.

Más sin embargo vemos que el “yo” de Pilar, empieza a evolucionar, ya no acepta ser el pilar de la autoestima de Antonio, ella busca una salida al encierro en el que se encuentra, a la dependencia obligada, a la sumisión. Esto lo podemos ver cuando Pilar, decide pedirle ayuda a la hermana, acepta un trabajo, comienza a relacionarse con otras mujeres, escucha otros relatos. Antonio ya no es todo su mundo relacional. Pilar está saliendo de las cuatro paredes doméstico carcelarias en que encontraba, está desprendiéndose de una relación fusional, y es lo que descompensa emocionalmente a Antonio, no está emocionalmente dispuesto ni preparado para enfrentarse a una Pilar distinta.

Antonio, no se siente culpabilidad por

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