Psicologia

1- La escuela un lugar de pasaje.

La escuela es una institución fundamental en la vida de los niños que da a cuenta el pasaje del mundo de lo privado al de lo publico, en el cual se ponen en juegos aspecto de la constitución psíquica del niño y la continuidad de lo social.

Para que este pasaje sea facilitado, la escuela no debe ubicarse como reproducción de lo que los niños traen, ni como algo totalmente ajeno a lo que hasta ese momento es su bagaje. La escuela debe cumplir una de sus funciones especificas, asegurando el transito de un mundo endogamico1 a un mundo exogamico.2

2- mirada de pinel e Itard.

Al tratarlo a víctor, pinel opina que es imposible educarlo, por que creció en un lugar solo y sin cultura; sin un mundo de significación que le permita interpretar a la vida en sociedad. Su colega Itard opinaba lo contrario; la razón por que lo hizo, es porque se posicionó desde su trabajo que era una “misión” en la vida de educar a víctor. Esto llevo a no ser objetivo en su profesión, por que descubrió la falta de construcción subjetiva de víctor, por haberse criado en un mundo sin palabras y sin sentidos. Itard rechazaba el diagnostico de idiotez, creía en la posibilidad de reeducar. A pesar de su empeño en la reeducacion, su tratamiento “medico-pedagógico” víctor no llego adquirir el lenguaje del habla.

3- la función simbólica

nos permite representar algo (un “significado” cualquiera: objeto, acontecimiento, esquema conceptual, etc.) por medio de un significante diferido y que solo sirve para la representación.

Se distinguen 5 comportamientos, que surgen el el curso del segundo año de vida, y que implica la construcción o el uso de significantes diferenciados.

La imitación diferida, la imitación que el niño realiza en ausencia del modelo.

El juego simbólico o juego de ficción. El niño juega con una caja “como si” fuera un coche.

El dibujo o imagen gráfica.

La imagen mental o imitación interiorizada.

El lenguaje o empleo de los signos de la lengua que se está aprendiendo.

La escuela ocupa un lugar privilegiado en la vida de los niños para el despliegue de esta función, en la medica en que oferta símbolos socialmente consensuados que permiten relacionarlos con acciones, pensamientos o afectos que los niños tienen, de tal modo que puedan representarlos para si mismo y para los demás.

Un docente también debe hacer un ofrecimiento de sentido, que no está dado por las cantidad de palabras sino por su capacidad de otorgarles significación a está y permitir que los niños construyan sus propias significaciones.

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