Silvia Olmedo

LAS MOTIVACIONES DEL TRABAJADOR MEXICANO

Lo primero que podríamos hacer es revisar algunas expresiones del mexicano acerca de los tópicos del trabajo. Estas expresiones no son particularmente optimistas en cuanto se refiere a que el mexicano se sienta grandemente motivado a trabajar. Si esto es cierto el mexicano llega a trabajar y no se le comprende en sus motivaciones, es fácil que se sienta naturalmente molesto, desesperanzado, quizá humillado y que entonces naturalmente no tenga mucho que ofrecer en su trabajo. La hipótesis las expresiones contra el trabajo no se refieren al trabajo en sí mismo sino a las condiciones del trabajo.

La psicología reciente cobra cada vez más conciencia de la realización de que la motivación de la conducta humana múltiple y no solo depende de una única y excluyente necesidad. Así esto de la motivación humana se refiere a las fuerzas, motivos, necesidades, deseos, instintos e impulsos. Que conciernen a las acciones de los seres humanos con lo que hacen con lo que dejan de hacer y con lo que prefieren hacer. Maslow nos dice que no solo son varias las necesidades que explican la conducta humana, sino que hay ciertas relaciones entre ellas, cierta organización o integración. Menciona principios fundamentales que rigen tal organización de impulso: a) hay un ordenamiento jerárquico en relación con la intensidad de las necesidades, las más intensas son las fisiológicas. b) cuando un grupo de necesidades se satisfacen, no cuenta ya en la motivación de la conducta. c) cuando varios grupos básicos de necesidades humanas se cumplen aparecen necesidades de mayor sutiliza y se desarrollan en todo su esplendor.

Una de las necesidades principales de los mexicanos es el de relacionarse, tener amigos es desmesuradamente intensa en el mexicano, nos encanta la charla, la fiesta, etcétera. Otra necesidad importante es la del mantenimiento o preservación de la propia estima, es decir considerarse a sí mismo como valioso, una persona con propia estima suficiente mente satisfecha sentirá y gozara la capacidad de ser independiente y tendrá la sensación de que venga lo que venga y solo o acompañado podrá con lo que le imponga la realidad. Tal persona tendrá un alto sentido de dignidad humana y amara la libertad. Ahora bien la satisfacción adecuando de las necesidades de la propia estima provoca sensación de confianza en sí mismo sensación de valor personal de capacidad de seguridad en sí mismo y aun la satisfactoria sensación de sentirse muy bien. Todos los seres humanos llevamos una serie de potencialidades, muchas reprimidas. En nuestro medio de desarrollo estas necesidades pro el grado de frustración de otras solo rara vez llegan a tener completa expresión, desarrollo y realización. Estas necesidades que aprendemos a tener son múltiples y de diversas naturalezas. Estas necesidades que aprendemos son los aspectos socioculturales

...