TEORÍA GENERAL DE LOS SISTEMAS Y SUS PROPIEDADES BÁSICAS

La teoría general de los sistemas fue concebida por Bertalanffy en 1940 con el fin de constituir un modelo práctico y un marco teórico unificador para las ciencias naturales y sociales, viendo al mundo como estructuras cada vez más grandes a diferencia del modelo mecanicista. Esta teoría aplicada a la psiquiatría venia a integrar los enfoques biológicos, dinámicos y sociales e intentaba dar un enfoque al diagnostico, a la psicopatología y a la terapéutica. Cannon introdujo el término homeostasis también conocido como morfostasis para explicar la constancia relativa de ciertas dimensiones fisiológicas, homeostasis quiere decir que el estado interno se encuentra en relativa constancia y habla de que un sistema se mantiene de esta manera por medio de mecanismos de autorregulación o de retroalimentación principalmente negativa. Ashby amplio este termino aplicándolo a los sistemas cibernéticos en general. Maruyama introdujo el término Morfogenesis el cual es el concepto opuesto de la morfostasis el cual describe describe fenómenos de cambio dentro de la estructura de un sistema principalmente mediante mecanismos de retroalimentación positiva, después en terapia se definió el concepto de morfogénesis como modificaciones y crecimiento con tendencia al cambio y al aumento de la diferenciación de los componentes de un sistema. Jackson fue el primero en aplicar este concepto a los sistemas familiares y uso el término homeostasis para describir sistemas familiares patológicos que se caracterizaban por una excesiva rigidez y un potencial limitado de desarrollo.

Hall y Fagen definieron el término de sistema como:

Conjunto de objetos con las relaciones entre los objetos y sus propiedades; por lo que al sistema se le considera como un conjunto de elementos en interacción dinámica en función de una finalidad.

Existen dos tipos de sistemas:

Sistemas abiertos: son sistemas con relación permanente con su medio.

Sistemas cerrados: Con poco intercambio de energía, matera con el medio.

Los sistemas además persiguen un objetivo y poseen una equifinalidad, el cual significa que comienzos idénticos pueden producir resultados distintos o que resultados diferentes pueden ser producidos por las mismas causas, aplicado este principio a la familia podemos decir que el funcionamiento de una familia como un todo, no depende tanto de saber que ocurrió tiempo atrás, ni de la personalidad individual de los miembros de la familia, si no de las reglas internas del sistema familiar, en el momento en que estamos observando.

El sistema tiene tres propiedades básicas:

Propiedad de organización

- Principio de totalidad: El sistema es más que la suma

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