Variados
joseph1301Biografía2 de Octubre de 2015
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2. POSMODERNIDAD Y EDUCACIÓN CRISTIANA
La educación cristiana neutral no existe, ya esta se halla condicionada por el contexto, el contenido de la enseñanza y el que enseña. No se desarrolla en el espacio sino en un contexto histórico particular, en la que es influida y a la vez influye.
Toda acción educativa se da en un espacio- tiempo-histórico, por lo que se debe tomar en cuenta el contexto cultural del pueblo en donde se desarrollará esta tarea. También el uso de algunos elementos culturales que sirvan como instrumentos pedagógicos, que ayuden a la comprensión y asimilación de la enseñanza.
El objetivo de esta primera parte no es describir todo el escenario mundial del momento histórico, sino poner de relieve algunas interrogantes que interpelen profundamente a la Iglesia en su desarrollo y expansión misionera. La globalización como tal no implica una connotación negativa, por el contrario ofrece posibilidades para el desarrollo en todas las áreas de la convivencia humana, pero cuando no se respetan los valores fundamentales de la persona humana, resulta perjudicial.
2.1. Globalización y Neoliberalismo
En esta primera parte se describe el contexto histórico del presente milenio, sirve de marco referencial al trabajo educativo que viene llevando a cabo las Iglesias evangélicas en las diferentes latitudes del mundo.
Según la cosmovisión de estudiosos, pensadores y científicos sociales estamos viviendo una nueva y sorprendente civilización, designada como posmodernidad y a la vez dos fuerzas históricas como la globalización y el neoliberalismo, cuya presencia y alcance así como su énfasis totalizador y omnipresente que ambas realidades promueven es abrumador, en un mundo que parece no poder escapar a su influencia.
La globalización ha acortado las distancias entre los países, hoy no existe fronteras, distancias ni barreras geográficas. Todos son afectados por acontecimientos distantes y esto se ve en especial en el campo de la economía y las comunicaciones.
A su vez el neoliberalismo que reclama el mercado el derecho de ser la fuente de la verdad y convertida en un dogma de fe por intelectuales, financistas, economistas y gobernantes prosigue su galopante marcha, dejando tras sus pasos más pobreza, desesperanza y muertes prematuras.
La humanidad está viviendo un momento histórico cualitativo nuevo y de impredecible consecuencias, que afectan la agricultura, la geografía, la economía y por sobre todo, trastoca la vida de las personas en todas partes del mundo. Tal es el impacto de esta nueva era que los científicos sociales, intelectuales y escritores lo designan el fin de la historia, la mutación histórica, el fin de las ideologías, “La tercera ola”.
El impacto de esta nueva realidad histórica está obligando a los países a agruparse en grandes bloques económicos en salvaguardar no solo de su estabilidad social, política y económica sino en función de su supervivencia, junto con esas tendencias mundiales al interior de los propios países, empiezan a surgir fuertes impulsos descentralizadores.
Esta nueva tendencia ideológica está dando lugar al resurgimiento de nuevos movimientos de protesta social que empiezan a valorar lo regional más que lo nacional. El problema socio-político está afectando la economía der los países emergentes. Las revueltas sociales afectan la gobernabilidad poniendo en riesgo la estabilidad democrática.
En el ámbito social los derechos humanos empiezan a cobrar vigencia y se va generando una creciente concientización del sentido de la libertad y dignidad personal. L as ideas para llevar a cabo una revolución humanista y el cambio de las estructuras injustas están en franco receso. Al mismo tiempo, la alta especialización hace que disminuyan grandemente las fuentes de trabajo.
En el campo de las ciencias humanas , existe una creciente preocupación debido a la manipulación genética que no puede llevar a la deshumanización total con la consiguiente pérdida de valores y el sentido de la familia, una nueva sociedad tecnológica, pero vacía de valores.
El conocimiento se está constituyendo en la nueva forma de poder. El poder que dominará el futuro, será el imperio de la inteligencia. Otra fuerza son los medios de comunicación social, cada vez más rápidas y más influyentes se deja sentir en todo el quehacer humano, Las nuevas tecnologías están modelando la cultura y los valores humanos.
Alvin Toffler en su libro “la tercera ola”, divide la historia de la humanidad en tres etapas, designándolas metafóricamente de “Olas”. Nos dice que estos acontecimientos socio-culturales conmocionan y crean graves tensiones, tanto en el plano internacional, nacional, así como en cada familia e incluso en cada persona.
Tito paredes analizando la realidad de América Latina lo interpreta así. Estas diversas realidades socioculturales que hemos descrito en términos de olas, y de las sociedades pre modernas, modernas y posmodernas, a menudo viven existencias paralelas, ignorándose mutuamente, en otras situaciones conviven y se acomodad mutuamente y a veces se dan choques y conflictos entre ellas.
Para nuestra región el efecto de esta nueva era ha sido demoledor, porque América Latina recién comenzaba a vivir la Modernidad cuando súbitamente se vio sacudida por el impacto de los cambios que trae la posmodernidad y empezó a sentir la influencia de esta nueva cultura global, a diferencia de las naciones desarrolladas que si habían vivido la Modernidad. A decir de Elvin y Heidi Toffler, es ni más ni menos que una revolución global, un salto de enorme magnitud, para América Latina.
2.2 Modernidad y Posmodernidad
La cultura que todavía predomina en las sociedades occidentales suele designarse con el nombre de Modernidad, Fue Hegel quien desarrolló este concepto para referirse a una época. Las expresiones época moderna, moderna times o tiempos modernos sirven para designar a un determinado tiempo histórico en las principales lenguas del mundo.
Los siguientes ejemplos pueden servir como ilustración. Para algunos la modernidad se inició con el Renacimiento S XIV-XV, mientras que para otros el periodo de ILUSTRACIÓN O DE LAS Luces S XVIII es el punto de3 partida de la modernidad. En cambio para Antonio Cruz, la modernidad se habría iniciado ´alrededor de 1500, en torno a tres acontecimientos capitales para la humanidad el descubrimiento de América, el Renacimiento y la Reforma protestante, se trataba de una frontera cronológica entre la Edad Media y la Edad Moderna´.
Urdanibia a su vez señalaba dos tiempos para la modernidad el periodo que abarca desde el Renacimiento hasta la Ilustración, y el segundo tiempo desde el Romanticismo hasta el Marxismo. Como se ve, no existe precisión histórica de cuando se inicio la era moderna, cual es su alcance cronológico ni cuando ha concluido.
En lo que a la posmodernidad se refiere , para el sociólogo español, José María María Mardones esta nueva realidad cultural más que un tiempo es un talante, es decir, es un modo o estilo de vida.
Para Mc Grath, dar una definición completa de posmodernidad es casi imposible ´una sensibilidad cultural sin absolutos. Sin base fija se deleita en el pluralismo y la divergencia y que tiene como meta pensar a través de la situacionalidad radical de todo pensamiento humano. En cada uno de estos aspectos se considera como reacción consciente y deliberada contra la totalización del siglo de las Luces. Según J. F Lyotard, el posmodernismo sería el estado de la cultura después de la transformación que han afectado a las reglas de la ciencia, literatura y de las artes a partir del siglo XIX ´.
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