BERTIMEO EL CIEGO TESALONICA

Al llegar a la conclusión de San Marcos 10, debemos notar que contiene algunas preguntas muy importantes.  En San Marcos 10:17 el joven rico le preguntó a Jesús: "¿Qué debo hacer para heredar la vida eterna?" Esa es una pregunta que todos deberíamos hacernos. En San Marcos 10:26 los discípulos le preguntaron a Jesús: "¿Quién, pues, podrá salvarse?" Y en nuestro pasaje de hoy, en San Marcos 10:51 Jesús le pregunta a un ciego: "¿Qué quieres que haga por ti?" Esa es una pregunta que todavía nos hace a cada uno de nosotros. ¿Tienes una respuesta?

Abre los ojos de mi corazón Señor

San Marcos 10: 46-52

Jesús y sus discípulos llegan a Jericó de camino a Jerusalén, donde Jesús será arrestado, torturado y crucificado, y luego, tres días después, Dios lo resucitará de entre los muertos.

He estado en Jericó muchas veces. Es una de las ciudades habitadas más antiguas del mundo. Se encuentra cerca de donde el río Jordán desemboca en el Mar Muerto. Es un oasis en el desierto. El camino de Jericó a Jerusalén tiene aproximadamente 15 millas de largo, pero es cuesta arriba y la elevación cambia 3.400 pies en esa distancia.

El encuentro de Jesús con un mendigo ciego se describe en San Marcos 10: 46-52. “Luego llegaron a Jericó. Cuando Jesús y sus discípulos, junto con una gran multitud, salían de la ciudad, un ciego, Bartimeo (es decir, el hijo de Timeo), estaba sentado junto al camino mendigando. Cuando oyó que era Jesús de Nazaret, comenzó a gritar: "¡Jesús, ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!" Muchos lo reprendieron y le dijeron que se callara, pero él gritó aún más: '¡Hijo de David, ten misericordia de mí!' Jesús se detuvo y dijo: 'Llámalo'. Entonces llamaron al ciego: '¡Anímate! ¡ PONTE En tus pies! Te está llamando. Arrojando su capa a un lado, se puso de pie de un salto y se acercó a Jesús. '¿Qué quieres que haga por ti?' Jesús le preguntó. El ciego dijo: 'Rabino, quiero ver'. 'Ve', dijo Jesús, 'tu fe te ha sanado'. Inmediatamente recuperó la vista y siguió a Jesús por el camino”.

Jesús nunca tocó a Bartimeo; Simplemente pronunció la palabra y Bartimeo le creyó. Jesús dijo: "Tu fe te ha sanado". Bartimeo es un gran ejemplo de cómo ejercer la fe. Todos debemos tener fe. La Biblia dice: “Sin fe es imposible agradar a Dios; porque todo el que viene a Dios debe creer que Él existe y que recompensa a los que lo buscan con diligencia ”. (Hebreos 11: 6 NKJV)

Observemos tres verdades sobre la fe y luego aprendamos sobre la ceguera espiritual.

1. LA FE CREE INCLUSO CUANDO NO PUEDES VER

Bart no pudo ver a Jesús, pero escuchó acerca de Jesús. La Biblia dice: “Cuando oyó que era Jesús de Nazaret, comenzó a gritar: '¡Jesús, ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!'” (San Marcos 10:47)

Bartimeo no solo era ciego; era un mendigo. Todos los días Bartimeo se sentaba al lado de la carretera extendiendo su mano y pidiendo dinero. El ciego Bartiemo no podía ver, pero como muchas personas ciegas, probablemente tenía un agudo sentido del oído. El día descrito en nuestro texto, pudo decir por los sonidos de la multitud que estaba sucediendo algo inusual. Se volvió y le preguntó a alguien: "¿Qué está pasando?" Por encima del murmullo de la multitud, escuchó: "Jesús de Nazaret está pasando". Sin duda, Bartimeo había oído hablar de Jesús. Quizás escuchó acerca de cómo Jesús sanó a la gente, ¡incluso le devolvió la vista a los ciegos! Aunque Bartimeo no podía ver a Jesús, basado en lo que había escuchado, en ese momento, él creyó. No solo creía que Jesús estaba en su ciudad: creía que Jesús tenía el poder de cambiar su vida.

Creyó antes de ver ninguna prueba. Algunas personas quieren una prueba visual de que Dios existe. ¿Y si pudiera PROBARTE que Dios existe? Les voy a dar una prueba visual de que Dios existe. “Dios, quiero que todos vean con sus ojos que eres real, así que ahora mismo, levanta el techo de este enorme edificio y gíralo tres veces y luego colócalo suavemente en la parte superior del edificio como si nunca se hubiera movido. Está bien, por favor Dios, ¡hazlo ahora! "

Imagínese por un momento que Dios lo hizo. Sospecho que todos los escépticos aquí se convertirían a Cristo. No pudimos contener a la multitud que se presentaría la próxima semana. A medida que se corriera la voz por la región, ¿se imagina cuántas personas se amontonarían en este edificio el próximo domingo? ¡Habla de problemas de estacionamiento!

Abre los ojos de mi corazón Señor

Pero creer en Dios porque viste algo así no es fe, es simplemente vista. La Biblia dice: "Por fe andamos, no por vista". (2 Corintios 5: 7 KJV)

Como Bartimeo, ninguno de nosotros ha visto a Jesús con nuestros ojos físicos. Pero he oído hablar de Jesús y creo en él. La fe no es solo creer hechos acerca de Jesús; es confiarle su vida. No solo creo que nació en Belén y murió en una cruz 33 años después. No solo creo en el hecho de la resurrección, ¡creo que Jesús está vivo y viviendo en mí! Que está sentado a la diestra del Dios padre intercediendo por mi!!!

2. LA FE RESISTE CUALQUIER BARRERA que se interponga A CRISTO

La Biblia dice: "Muchos lo reprendieron y le dijeron que se callara, pero él GRITÓ [krazen] aún más". (San Marcos 10:48)

Cuando Bartimeo le gritó a Jesús, las personas que lo rodeaban no dijeron: “¡Bien por ti, Bartimeo! Jesús puede ayudarte. Grita más fuerte ". En lugar de ayudarlo, lo reprendieron y le dijeron que se callara. Descubrirás que cuando seas lo suficientemente valiente para clamar a Jesús, no todos estarán emocionados por ti. De hecho, habrá algunas personas que lo reprenderán y desanimarán.

Cuando estas personas intenten obstaculizarte, haz lo que hizo Bartimeo: resistirlos. No dejes que te intimiden y te callen. Cuando le dijeron al ciego Bartimeo que se callara, no lo silenciarían. En el versículo 48, la palabra traducida “gritó aún más” es krazen. Sacamos nuestra palabra loco de eso.

Cuando la multitud le dijo que se callara, le gritó al Señor. “¡Aaaaagh! ¡Jesús, Hijo de David, ten piedad de mí! " Gritó tan fuerte que todos se quedaron en silencio. 

La Biblia dice en Salmo 98: 4 "Aclamad con júbilo al Señor, toda la tierra". Salmo 100 dice: "Aclamad con júbilo al Señor, toda la tierra". De hecho, en la Biblia se nos dice que gritemos al Señor no menos de 20 veces. 

 3. LA FE ADMITE LA NECESIDAD DE SER CAMBIADO

La Biblia dice: "¿Qué quieres que haga por ti?" Jesús le preguntó. El ciego dijo: "Rabí, quiero ver". (San Marcos 10:51) Cuando leí esto por primera vez, me sorprendió la pregunta. Al principio pensé: “Qué pregunta más divertida. ¡Jesús SABE que Bartimeo es ciego! " Pero luego recordé que Jesús le hizo una pregunta similar al hombre paralítico que yacía todos los días en el estanque de Betesda. Jesús le preguntó: "¿Quieres ponerte bien?" (Juan 5: 6) Bartimeo tuvo una vida bastante simple. Se había acostumbrado a sentarse junto a la carretera y aceptar limosnas. Después de todo, a algunas personas les gusta la atención que reciben de su sufrimiento.

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