ENSAYO SIDDAHARTA

En su cara se dibujaba la serenidad que da la sabiduría, a la que ya no se opone ninguna voluntad, la que conoce toda la perfección…

El saber es comunicable, pero la sabiduría no.

Uno de los escritores más representativos de Europa, precursor del romanticismo Alemán es Hermman Hesse quien en 1922 escribiría una de las novelas que pronto se convertiría en una de las banderas del pacifismo a nivel mundial “Siddharta”. Una historia en la que el tema central es la inquietud del hombre en busca de su destino exponiendo las cualidades místicas de la experiencia humana. Esta novela es una combinación perfecta entre una fuerte espiritualidad oriental y una interminable búsqueda de la felicidad que es más propia de los que nos encontramos en el occidente

Siddharta es un joven que crece en un entorno en el que a pesar de su prematura existencia, es sabio por encima de sabios, contemplativo y meditativo por encima de Brahmanes (sacerdotes). Su padre estaba orgulloso y feliz de tener un hijo como Siddharta, inteligente y ansioso de saber. Era prácticamente imposible no amar a Siddharta, hombres y mujeres lo hacían; sin embargo su amigo (no menos joven), era quien más lo amaba. Govinda es el nombre del compañero, quien había prometido a si mismo seguir a Siddharta a donde fuese

Hastío de una vida perfecta, Siddharta decide emprender un nuevo camino, puesto que jamás disfrutó, ni compartió la misma alegría y regocijo de sí mismo, con el resto de las personas. Motivado por un grupo de Samanas (forasteros que vivían de limosnas en el bosque donde dedicaban todo su día a meditar en el Om; primer estado de meditación y alcanzar el Nirvana; es el todo) que visitaba su ciudad le declaro a su padre la inquietud que tenia de emprender esa búsqueda de aquello que desconocía y aunque en un primer momento su padre le negó la oportunidad terminó cediendo el permiso, tras una larga insistencia por parte de su hijo. Como buena compañía, Govinda lo siguió y ambos formaron parte de ese grupo de Samanas.

Ya estando con ellos, durante largos años de su vida, en los que aparentemente pueden ser improductivos para el resto de las personas, para

Siddharta eran de gran ilustración, aprendió a controlar su mente sobrellevando las necesidades del cuerpo, como lo es el agua, el alimento o el sueño, aprendió la capacidad para controlar con la mirada a todo aquel que le contemplara a los ojos. Aprendió a elevar el alma (atman) sin el cuerpo.

Y aun así no era suficiente para Siddharta.

El creía firmemente en que las doctrinas jamás podrían enseñar la sabiduría, por tanto nunca se aprendería por completo, lo que causaba que Govinda se sorprendiera abruptamente con los pensamientos de su amigo, al grado de tildearlo de hereje, sin embargo eso no le impedía conservar su amistad.

A pesar de que Siddharta tenía la habilidad para aprender rápidamente y con ello lograra acumular grandes conocimientos, lejos estaba de encontrar realmente lo que buscaba.

Necio por proliferar que ninguna doctrina contribuía a alcanzar el nirvana, se topo con aquel al que llaman Buda por el hecho de encarnarse, aquel hombre era Gotama. En cuanto Siddharta lo vio, reconoció en él la perfección, la exaltación de la sabiduría y la paz interna, sin embargo no cambio de opinión y lo manifestó al propio Gotama, quien de manera muy tranquila le respondió que era libre de seguirlo o ignorarlo y adoptar el método que más le fuese conveniente.

Es así como Siddharta decide separase de los Samanas y de su amigo Govinda quien decide recorrer el camino del buda. Es entonces en medio del bosque donde supuestamente Siddharta despierta, pero lo hace hacia una vida mundana (aunque en ese momento el no lo supiera) ahora deseoso de aprender de la cotidianidad de los humanos.

Dentro del bosque se topa con una mujer llamada Kamala, a la que él considera la más bella de entre todas. Es ella quien lo incluye al mundo de las banalidades, inmiscuyéndolo en con el resto de las personas. Con ellos aprende a ser: humano, comerciante, superficial, e inclusive se ilustra de lo que él llama el “arte de amar” que no es más que un coito desenfrenado con Kamala. Aunque en

un principio tiende a seguir con las viejas prácticas de las que él asegura

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