Estuviste enfermo y me visitaste

ESTUVE ENFERMO Y ME VISITASTE

Narrador. -  Cierto día 3 hermanos jugaban en el parque cercano a su casa, cuando paso por ese lugar Jaimito Pérez compañero de la escuela que iba caminando con su mama.

Los niños preguntaron

Niños.- Hola ¿a dónde van tan de prisa?

Niño: vamos a la clínica del ISSSTE

Niño 1.- ¿a la clínica?

Niño 2.- ¿que van hacer?

Mama.- vamos a visitar a mi hermano que se encuentra enfermo

Niño 3.- ¿podemos ir con ustedes?

Mama.- si pero antes tienen que pedir permiso a su mama

Niños.- Vamos

Narrador. - Los niños hicieron lo que la señora le indico.

Y la mama de los 3 niños no solo les dio permiso, sino que los acompaño.

Llegaron al hospital y salió a su encuentro un Doctor.

Doctor.- Buenos días, señora Pérez que bueno que vino pues su hermano ha estado muy triste y creo que al verles se  alegrara.

Narrador.- en efecto el hermano de la señora Pérez se puso muy feliz al verla.

Hermano.- que gusto verte

Sra. Pérez. - a mí también me da gusto verte y aparte te traigo una sorpresa.

Narrador.- Los niños entraron  a la habitación  y empezaron a platicar con el enfermo. Antes de retirarse a Jorge se le ocurrió una brillante idea.

Jorge.- Miren traigo mi rosario

Mama.- muy bien hagamos oración por todos los enfermos.

Narrador.- Los niños se tomaron de la mano y empezaron a rezar el rosario.  Terminada la visita regresaron a sus casas con el corazón lleno de alegría por esa experiencia que habían tenido.

A partir de ese día los niños se apuraban en hacer sus tareas y ayudaban en casa para terminar pronto e ir a visitar no solo al hermano de la señora Pérez sino a los otros enfermos que se encontraban en el hospital.

Les leían libros, araban con ellos y hasta los divertían.

Y así fueron creciendo los niños y ya siendo adultos formaban el grupo amigos.

Así los familiares que se quedaban a pasar la noche les regalaban fruta, sándwich y agua.

Y a este grupo fueron uniéndose más personas dedicadas a llevar un poco de alegría a los enfermos.

Visitar al enfermo no se trata de visitas sociales por cumplir, se trata de una verdadera atención tanto en cuidado físico como en compañía.

SEPULTAR A LOS MUERTOS

Narrador. - La iglesia nos ofrece la oportunidad de enterrar a los muertos en un cementerio o campo santo. Es un lugar apto para orar por aquella persona que nos ha precedido en el encuentro definitivo con el Señor.

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