Hebreos Capitulo 11

HEBREOS CAPITULO 12

HEBREOS 12:1-3

CRISTO EL AUTOR Y CONSUMADOR DE LA FE

INTRODUCCION

 1.   Los versículos para considerar en esta oportunidad nos resumen el capítulo once.  Como en otras ocasiones en el libro de Hebreos,  Pablo destaca la grandeza de nuestro Señor Jesucristo.  En esta ocasión lo presenta como el autor y consumador de nuestra fe.

I-         CORRIENDO CON PERSEVERANCIA LA CARRERA (v. 1)

1.   “Por tanto, nosotros teniendo en derredor nuestro tan grande número de testigos”.  Esta es una referencia a los pasajes anteriores.  Es una invitación a contemplar y a meditar en la vida y en los eventos de aquellos que han corrido la carrera de la fe antes que nosotros.  Recordemos que lo escrito anteriormente es para nuestra “enseñanza”. 

2.   Estos testigos no sólo atestiguan con su vida lo que es correr la carrera, además nos dan ejemplos de cómo la vivieron.  Algunos derramaron su sangre en testimonio de lo que creyeron y vivieron.  Sin embargo no todo lo que hicieron fue perfecto.

3.   “Dejemos todo lo que nos estorba, y el pecado que fácilmente nos enreda”.  El capítulo doce de Hebreos está lleno de amonestaciones y consejos.  Pablo nos invita a dejar todo lo que nos estorba para correr.  “Dejemos todo”.  El apóstol no nos dice qué.  Parece que lo deja a la consciencia de cada uno.  Luego añade la palabra, “pecado”.  En el libro de Hebreos él menciona algunos.  Por ejemplo: el no escuchar la voz de Dios (Heb 12:25); incredulidad (3:19); desobediencia (4:6).

4.   “Corramos con perseverancia la carrera que nos es propuesta”.  La vida cristiana es una carrera de resistencia.  La perseverancia es clave para terminarla.  Pablo usa ésta ilustración en otro lugar.  Pablo también tenía una carrera que terminar (Hech 20:24), en este caso era su ministerio.  En 2Timoteo 4:7, él dice que la logró terminar.

5.  La carrera es algo muy personal.  Cada uno tiene una meta que alcanzar.  Desafíos, barreras, debilidades.  Nadie la puede correr por otro.

II-        FIJOS LOS OJOS EN JESUS (vv. 2-3)

1.   “Fijos los ojos en Jesús, autor y consumador de la fe”.  Aquí el apóstol nos da el secreto para correr nuestra carrera.  Jesús como los rayos del sol es nos da el vigor, la energía, el ánimo, la voluntad para seguir corriendo.  Nuestra mirada debe ser puesta en él, de lo contrario nos va a pasar como a Pedro que se hundió en el agua (Mt 14:28-32).  Satanás nos va a poner muchos obstáculos en el camino para que no podamos ver a Jesús.

2.   “Autor y consumador de la fe”.  Dos razones fundamentales.  Jesús es el autor.  El es el originador de este don.  El es Dios.  El no tiene fe, él es la fe.  El es la fuente de donde el cristiano bebe para alimentar su alma.  Juan 15:5  dice: “Yo soy la vid, y vosotros los pámpanos”.

3.   El es el “consumador”.  Es decir, en él se consumó la fe.  La fe llegó a su máxima expresión en su propia vida.  Jesús no es sólo el autor, él como ninguno otro la vivió.  Su vida es un testimonio que está por encima de todos los mencionados en el capítulo once.

4.  “Quien en vista del gozo que le esperaba, menospreció la vergüenza, y se sentó a la diestra del trono de Dios”.  Con estas palabras Pablo explica la manera en cómo Jesús es el consumador de la fe.  El se sometió a la vergüenza, al vituperio.  El decidió tomar la forma de siervo.  El decidió tomar el pecado del hombre.

5.   Jesús frente a su desafío corrió la carrera.  Su motivación fue la salvación de muchos.  Su resurrección le garantizó el éxito.  Su posición la volvió a recuperar.  Su carrera fue coronada con gloria.

6.   “Considerad, pues, a aquel que sufrió tal hostilidad de los pecadores contra sí mismo, para que no os fatiguéis en vuestro ánimo hasta desmayar”.  La manera más efectiva de correr nuestra carrera cristiana es contemplando a Jesús y meditando en cómo lo hizo.  Nadie ha sufrido como él.  Todo el odio y la hostilidad del hombre fue arrojado sobre.

7.   Al contemplar nuestra vida con la de él, nos daremos cuenta que él sufrió más. Su vida y su ministerio serán de inspiración para terminar nuestra carrera.

CONCLUSION

Todos tenemos una carrera que terminar.  Lo hermoso es que Jesús dejó su ejemplo para que lo sigamos.

HEBREOS CAPITULO 12

LECCION # 48

HEBREOS 12:4-13

LA DISCIPLINA DEL SEÑOR

INTRODUCCION

1.   Hoy vamos a hablar de un tópico muy interesante.  La disciplina divina.  Pablo nos dice que Dios disciplina.  La disciplina de Dios es diferente a la de los hombres.

I-         EL SEÑOR REPRENDE AL QUE AMA (vv. 4-6)

1.   “En vuestra lucha contra el pecado, aún no habéis resistido hasta verter sangre”.  Pablo amonesta a sus hermanos diciéndoles que algunos de ellos no han dado testimonio con su sangre.  Pablo como muchos otros que se mencionan en la lista del capítulo once lo han hecho.  Pareciera por el contexto que sigue, que a veces parte de la disciplina del Señor es verter sangre en favor de su causa.

2.   “Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, ni desmayes cuando eres reprendido por él”.  No es fácil hacer diferencia entre este tipo de disciplina y aquella que es ejercida por otros, o por las elecciones que hacemos.  Si aceptamos que todo lo que nos pasa viene del Señor, lo haríamos culpable de todo.  Será que en medio de nuestras propias elecciones Dios nos ayuda a sacar lecciones que de otra manera no aprenderíamos.

3.   No cabe duda que Satanás hará todo lo posible por destruirnos y desanimarnos.  Gente han matado y perseguido a los hijos de Dios.  Así que no podemos decir que Dios lo permite para disciplinarnos.  Sino más bien estas experiencias nos ayudan a madurar, y a contemplar el amor protectivo de Dios.

4.   “Porque el Señor, reprende al que ama, y azota a todo el que recibe por hijo”.  Debemos  cuidar de usar este pasaje para abusar físicamente a nuestros hijos.  Dios reprende a los que andan fuera de sus caminos.  Interviene para salvar y no para destruir.  En medio de los peligros y fracasos Dios

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