LO PRIMERO, PRIMERO

LO PRIMERO, PRIMERO

Mateo 6: 25-34

INTRODUCCIÓN

1. Saludo: Es para mí un privilegio dirigirme a este grupo tan heterogéneo compuesto por estudiantes, colegas, vecinos de Libertador y visitas que nos acompañan. Sean todos bienvenidos a la casa de Dios.

1. Frase alusiva: El título del mensaje de hoy es: Lo primero, primero. Decidí este tema y el texto bíblico correspondiente, debido a una situación subliminal,  algo que está por debajo del umbral de la conciencia, pero que, sigilosa e imperceptiblemente va afectando la ética cristiana.

1. Disparador: Hace tiempo leí acerca de una extraña actitud de un grupo de muchachos. Una noche, ingresaron clandestinamente a una ferretería. La intención del grupo no era hurtar, sino para realizar una travesura. Ingresaron al local y rápidamente cambiaron los códigos de los productos exhibidos. Por ejemplo: a una máquina de cortar césped colocaron la etiqueta de $10,00. Un matamoscas de plástico, $890,00. Una bicicleta $5,00. Clavos por kilogramo $500,00… y así, sucesivamente. Podemos imaginar la sorpresa y el disgusto del comerciante cuando descubrió la irregularidad y tuvo que reordenar los códigos de los precios.

1. Pareciera también, que hace tiempo, alguien ingresó al planeta Tierra y cambió los códigos. En realidad, la Biblia nos advierte sobre el particular: “¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!”

1. Según un sociólogo contemporáneo, Sygmund Baumm, somos parte de una sociedad desnaturalizada. Influenciados por una modernidad líquida, donde los valores se diluyen y ceden ante una cultura consumista, que impone necesidades insaciables, en la búsqueda de productos para ser alguien. Donde se valora a la persona, no por lo que la persona es, sino por lo que tiene. Donde las relaciones interpersonales cara a cara se canjearon por conexiones que se habilitan y se borran con la velocidad de un click. Vivimos en un mundo donde las redes dejan de ser sociales y pasan a ser comerciales. Donde sus integrantes dejan de ser personas que se comunican y se parecen cada vez más a productos que se venden.

1. Texto: El texto del mensaje de hoy es Mateo 6:25-34, 19-21 Leamos los versículos de la perícopa.

a. Estas palabras pronunció Jesús no solamente ante sus discípulos, si no ante una multitud que se había acercado para escucharlo Mt 5:1.

b. El sermón de la montaña resume la moral cristiana y, de modo especial, el comportamiento de aquellos que desean ingresar en el reino.

c. Pero no presenta la moral como un código legal de deberes y obligaciones, sino como una afable invitación. Una invitación a ser como es el Padre.

d. En los versículos anteriores, después de sembrar la duda sobre el peligro de quienes confían en sus posesiones, Jesús considera la tendencia, igualmente peligrosa, de quienes no tienen posesiones: ¡la preocupación! No os afanéis (Gr. merimnao) significa: no “estén ansiosos” o “No se preocupen” aparece 6 veces en la perícopa (vrs. 25, 27, 28, 31 y 34).

1. Si observamos cómo inicia Jesucristo el sermón del monte, identificaremos una palabra que se repite varias veces: Bienaventurados. Es decir, ¡Felices! Este, es el contexto, en el cual aparece la perícopa que nos ocupará durante los próximos minutos.

1. Hace años leí una definición de la palabra FELICIDAD que quedó grabada en mi mente: La felicidad es una actitud del espíritu profundamente arraigada en la carne. No depende de las cosas que se poseen, sino de la actitud hacia las cosas, las ideas y las personas.

1. Proposición: La felicidad no se encuentra cuando buscamos la felicidad, sino cuando buscamos a Dios.

1. Pregunta de transición: ¿Cómo comprobaremos esta afirmación? ¿Cómo comprobaremos que la felicidad auténtica se logran cuando buscamos a Dios?

1. Frase de transición: Para comprobar esta afirmación, analizaremos dos consejos vertidos por el Maestro de Galilea.

I.   NO SE PREOCUPEN POR LOS BIENES MATERIALES

1. Lección: No se preocupen por los bienes materiales, confíen en Dios.

2.   Texto prueba: Los versículos 25 y 31 presentan tres ilustraciones que nos dejan esta enseñanza. Leamos  los dos versículos. El verbo utilizado en el texto original es (Gr. merimnao) significa: no se preocupen, “no estén ansiosos”.                              

Los ricos son tentados a confiar en sus posesiones; los pobres, a dudar de las provisiones de Dios. Los ricos, a confiar en la falsa seguridad de sus riquezas; los pobres, a preocuparse por la falsa inseguridad de su pobreza.

1. Por la comida. V. 26 “Miren los pájaros del cielo”. Observar las aves del cielo y reflexionar en el Dios sustentador, aumentará nuestra fe en Él. Vemos que las aves trabajan con tesón pero sin preocupación, y cada día encuentran el alimento que necesitan.

Piensa en la pregunta del Maestro (26 b): ¿No valen acaso ustedes más que ellos?

1. Por el crecimiento. V. 27. Quién de vosotros podrá añadir a su estatura un codo. La palabra “Estatura”: aquí probablemente significa “lapso de vida”, o “edad”. Entonces “Codo”: significa “período de tiempo”, no “distancia”.  

Algunos opinan que se refiere al hacho de añadir años a la vida. Lo que Jesús quiere enseñarnos es que la ansiedad, en vez  de prolongar la vida, suele acortarla.

     c.  Por la ropa. V. 28  La expresión: Y por el vestido, ¿por qué se

inquietan?  

         3. Ilustración: Proverbio chino: “¿El problema que enfrentas tiene solución?, entonces por qué te preocupas. ¿El problema que enfrentas no tiene solución?, entonces por qué te preocupas.”

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