La moral en la novedad del mensaje cristiano

La moral cristiana tiene algo nuevo para la moral, ya que le da el verdadero sentido a aquella persona que ha sido bautizada y que está llamada a ser coherente lo que ha recibido. La gracia recibida de Dios por medio del rito del bautismo, debe perfeccionar los actos del hombre, llevarlos a actos consciente, voluntarios, ejercidos en la bondad, ya que Cristo les da un giro total. [pic 1]

Es necesario que observemos y reflexionemos la distinción entre la ética natural y la moral que, tiene sus raíces en el evangelio. El hombre, como sabemos, observa su obrar y se da cuenta que sus actos deben ser regulados, para esto, crea y les da nombre a las virtudes, los valores y principios. Lo que se destaca aquí es, la importancia de la moral que acude a perfeccionar cada uno de estos valores, obteniendo su culmen en Cristo. El mensaje cristiano nos ayuda a cumplir en total libertad los mandamientos y preceptos originales, y no meramente leyes y normas establecidas por la sociedad para el cumplimiento estricto u obligatorio, sin encontrar una respuesta de perfeccionamiento que lleva a la plenitud.

Lo que aporta el padre Fuchs es muy bueno y estoy de acuerdo con lo que el menciona. Los cristianos que se esfuerzan por vivir una vida digna llevando a cabo una ética experiencial, están a un mismo nivel con todos los seres humanos. Lo que debemos denotar es que el cristiano recibe la fuerza, el impulso, la gracia de parte de Dios al estar dispuesto a realizar cada uno de sus actos en conciencia cristiana, ayudándolo a ser constante, y el que se aferra a sus propias fuerzas, tarde que temprano, termina cansándose.

La persona que lleva a cabo una moral cristiana echa de ver cambios, en el carácter, en su personalidad, temperamento, en sus iniciativas, en su forma de concebir todas las cosas, este cambio tiene un denominador demostrando que el acercamiento a la vida historia de Jesús ayuda a distinguir un estilo de vida concreto denotando que el conocimiento de los preceptos morales del Nuevo Testamento denota mayor exigencia y claridad.

Toda vivencia de valores debe ser desde la fe.

Los derechos y obligaciones erigidos por la Organización de Naciones Unidas son los mismos promulgados en la encíclica Pacem in Terris formulada por el papa Juan XXIII, también el Discurso a la Naciones Unidas de San Juan Pablo II.

La Iglesia Católica se preocupa por todo, siempre buscando la forma de aportar soluciones a las distintas realidades del ser humano con el fin de la salvación de todas las almas. Para esto realiza documentos, mensajes, exhortaciones, encíclicas. La sociedad necesita hacer caso a estos llamados para poder alinear la forma de vivir.

Para concluir, un buen por ciento depende del hombre, porque ha sido creado en libertad. Es él quien debe dar la respuesta, todo va a girar en torno a la concepción que tenga sobre la vida, el mundo y Dios. Quien se deja guiar por Cristo, su vida comenzará a cambiar, ya no será el mismo de antes, desde ese momento comenzará a ser hijo de Dios, transformado por la gracia, porque ya no es el quien vive, sino, Cristo que vive en él. Esa es la novedad del mensaje cristiano para la moral. En la realidad podemos darnos cuenta de esto, ya que es muy evidente. Existen personas que de un día a otro deciden dejar su pasado y entregarlo a Dios, cambiando y purificando su forma de ser, expresarse, accionar, relacionarse, esto es fruto de la gracia de Cristo, recibida por nosotros en libertad.

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