Sigamos El Modelo De Cristo

Les voy a invitar primeramente a que leamos juntos de la biblia, el evangelio de Juan 13:15

Estas palabras son de nuestro Señor Jesucristo ¿A qué se refería, al decir que había puesto el modelo, a qué modelo se refería?

Para entenderlo mejor, leamos nuevamente de la biblia, el evangelio de Juan 13:12-14.

¿Si capto el punto? Nuestro Señor Jesucristo no estaba instituyendo un rito de lavar los pies unos a otros, no, más bien, estaba ayudando a los apóstoles a adoptar un nuevo modo de pensar: que fueran humildes y estuvieran dispuestos a rendir los servicios más humildes a favor de sus hermanos.

Así es, estaba hablando precisamente de la humildad y él dio el mejor ejemplo.

Usemos nuevamente nuestra copia de las escrituras para ver otro ejemplo de humildad de nuestro Señor Jesucristo, sin duda el mayor de todos, leamos Filipenses 2:5-8.

Que gran humildad, ¡Imagínese! La segunda persona más importante del universo estuvo dispuesta a hacerse inferior a los ángeles, nacer como un indefenso bebé, criarse al lado de padres imperfectos y obedecerlos, y por último, morir como un criminal.

¿Podremos nosotros imitar esta “actitud mental”? ¿Podremos cultivar semejante humildad? Sí, aunque no es fácil, pero Jehová nos dice mediante su palabra como podemos lograrlo, le amos nuevamente Filipenses 2:3,4.

Así es, no debemos pensar que somos tan importantes para que los demás siempre nos sirvan, ni aspirar a una posición de gran prestigio.

Debemos ser humildes como lo fue Cristo, la humildad es importante para predicar las buenas nuevas —sobre todo al enfrentar indiferencia u oposición—, también para aceptar consejos o para simplificar nuestra vida con el fin de aumentar nuestra participación en el ministerio.

Como vemos, el seguir el modelo de Cristo, implica estar dispuestos a rendir los servicios más humildes los unos por los otros.

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