Medicamentos OTC
dominiquepeters15 de Noviembre de 2011
7.546 Palabras (31 Páginas)1.807 Visitas
Medicamento de venta libre
El medicamento de venta libre, Over The Counter (OTC - por sus siglas en inglés) o medicamento de venta directa es aquel que no requiere una prescripción o receta médica para su adquisición. Se trata de una categoría de medicamentos producidos, distribuídos y vendidos a los consumidores/usuarios para ser utilizados por su propia iniciativa.
Los medicamentos de venta libre conforman un grupo de fármacos destinados al alivio, tratamiento o prevención de afecciones menores, con los que se posee una amplia experiencia de uso y han sido expresamente autorizados (por las Autoridades Sanitarias de cada país), como tales (Ver:Medicamento).
En el año 1990 la Organización Mundial de la Salud adoptó como definición de medicamento de venta libre u OTC, a los “medicamentos cuya entrega y administración no requieren de la autorización de un facultativo. Pudiendo existir diferentes categorías para estos medicamentos, de acuerdo con la legislación de cada país”.
Los medicamentos de venta libre generalmente cumplen con las siguientes características:
• sus beneficios son mayores que sus riesgos potenciales
• poseen bajo potencial de uso indebido y abuso
• los consumidores/usuarios pueden utilizarlos para afecciones que pueden auto-reconocer
• pueden ser adecuadamente etiquetados (poseen información del producto en sus estuches o en el interior a través del prospecto)
• no es necesaria la intervención de profesionales de la salud para su uso seguro y eficaz.
El lugar de adquisición de estos productos puede estar limitado exclusivamente a las farmacias o puede darse también en otros establecimientos comerciales, dependiendo de la regulación de cada país. Así mismo, existen países latinoamericanos que realizan campañas (por ejemplo en Colombia ), para difundir la diferencia entre medicamentos de venta libre y medicamentos que requieren de una prescripción o receta médica para ser adquiridos.
Conforman, tal lo manifestado por la Organización Mundial de la Salud, uno de los pilares del Autocuidado: ”lo que las personas hacen por si mismas para mantener su salud, prevenir y tratar la enfermedad”; dentro del marco de lo que se denomina Automedicación Responsable, en la que el consumidor/usuario trata sus enfermedades o síntomas con medicamentos que han sido aprobados, están disponibles para la venta sin prescripción o receta médica y que son seguros y eficaces cuando se usan en las condiciones establecidas. Es por lo tanto una actividad legal, pero requiere información calificada e independiente para poder tomar buenas decisiones.
A diferencia de la Autoprescripción, la que consiste en la adquisición de medicamentos que requieren de prescripción o receta médica sin contar con ella
Medicamentos Genéricos
Un medicamento genérico es fabricado con los mismos ingredientes activos, y está disponible con la misma potencia y dosificación que su equivalente de marca. Los medicamentos genéricos producen los mismos efectos en el cuerpo que medicamentos de marca, ya que ambos contienen el mismo principio activo.
Según la OMS, un medicamento genérico es aquel vendido bajo la denominación del principio activo que incorpora, siendo bioequivalente a la marca original, es decir, igual en composición y forma farmacéutica y con la misma biodisponibilidad que la misma. Puede reconocerse porque en el envase del medicamento en lugar de un nombre comercial, figura el nombre de la sustancia de la que está hecho (llamado principio activo en la nomenclatura DCI) seguido del nombre del laboratorio fabricante. En México y otros países, se agregan las siglas GI (Genérico Intercambiable), en España se agrega EFG (Equivalente Farmacéutico Genérico).
Un medicamento genérico puede ser elaborado una vez vencida la patente del medicamento de marca siempre que reúna todas las condiciones de calidad y bioequivalencia (OMS-OPS). También debe ofrecer la misma seguridad que cualquier otro medicamento. Todos los fármacos aprobados por un Ministerio de Salud o autoridad sanitaria que tenga dicha tarea, han de pasar por los mismos controles de calidad, seguridad y eficacia.
Ventajas
La principal ventaja de un medicamento genérico frente a un medicamento de marca es el menor coste, ya que el genérico no requiere inversión en investigación, desarrollo y promoción. Además de la ventaja del precio, estos medicamentos cumplen con los mismos registros sanitarios que los medicamentos de marcas y tienen la misma eficacia sobre el organismo. En España existe el precio de referencia, que obliga a bajar las marcas a precio de generico. Por lo tanto en España no hay diferencia de precios, no hay ventajas de un medicamento generico. En España vale lo mismo un generico que su respectiva marca.
De todas formas, en los años que llevan funcionando los genéricos los organismos internacionales de vigilancia de fármacos (Programa Tarjeta Amarilla de la OMS, en el que hay incluidos cerca de 100 países), han recogido un número insignificante de comunicaciones de casos de este tipo.
Medicamentos comerciales
Medicamento con patente: aquellos medicamentos de investigación propia del laboratorio que los comercializa, sujetos a la protección comercial que brindan las agencias internacionales de patentes.
La patente no se limita a la molécula, sino también a la formulación, mecanismo de producción, o asociación con otras moléculas. Mediante sucesión de patentes las casas farmacéuticas consiguen prolongar el periodo de exclusividad de sus presentaciones comerciales, aun cuando presentaciones anteriores de la misma molécula hayan quedado libres.
Los nombres de los medicamentos comerciales pueden hacer referencia al fármaco o fármacos en asociación que componen el producto comercial, la presentación del mismo (crema, champú, tabletas, etc.), su acción terapéutica (antibiótico, analgésico, antihelmíntico), el padecimiento que combate (alergia, artritis, hongos), el laboratorio que lo produce o, incluso, al destinatario del producto (madre, niño, adulto).
Franquicias
El sector farmacéutico, en específico el de oficinas de farmacia, ha venido atravesando en Venezuela a lo largo de la última década una transformación sin precedentes. Nuevas formas organizacionales y empresariales han irrumpido para cambiar la morfología del mercado, el nivel de concentración propietario de los establecimientos comerciales y la forma de competir.
Las relativamente nuevas cadenas de comercialización de medicamentos, con la figura de franquicias, y otra tipo cooperativas, han transformado definitivamente la estructura propietaria y el nivel de repartición y concentración del mercado de comercialización de medicamentos.
Sin embargo, estas “nuevas” formas organizacionales, las franquicias y grandes cadenas, no se manifiestan exclusivamente en el sector de oficinas de farmacia, sino que igualmente han sido replicadas en un gran número de sectores de comercialización en general. El aprovechamiento de ciertas economías de escala y poderes de negociación, así como las ventajas de uniformidad en ciertos estándares de comercialización que reducen costos transaccionales, han tornado tremendamente competitivas a estas nuevas formas de establecimientos comerciales.
La ventaja competitiva con la que cuentan las grandes cadenas de franquicias radica en que pueden explotar economías de escala y de alcance, permitiéndoles en muchas ocasiones reducir sus costos fijos medios y aumentar su margen unitario o confiriéndoles mayor nivel de maniobrabilidad ante la competencia. Por otro lado, mientras mayor sea el nivel de concentración aguas debajo de la industria, en la comercialización de medicamentos, mayor será la capacidad de negociación de las cadenas comercializadoras ante la industria farmacéutica. Así las cosas, podría haber una transferencia de rentas desde la industria hacia los comercializadores, pero en el caso extremo de doble-marginalización, ante una concentración aguas abajo muy elevada, se estaría lesionando a la sociedad (salvo que la competencia efectiva sea alta o exista contestabilidad de mercado). Este punto posiblemente sea uno de los más controversiales e interesantes sobre la industria farmacéutica. Una estructura atomizada aguas abajo podría evitar los problemas de doble-marginalización, permitiendo un menor nivel de precios, ante un escenario de precios libres (medicamentos con prescripción que escapen a los controles de precios y los over-the-counter).
Adicionalmente, existen países como España, en los que se discute la valoración social hacia aquellas empresas que invierten a riesgo en investigación y desarrollo para la invención e introducción de de nuevos medicamentos y aquellos establecimientos comerciales que simplemente venden al por menor (los establecimientos de farmacia). La polémica entre entendidos y no en la materia, se origina en las participaciones sobre los precios regulados de los medicamentos bajo un esquema de cost-plus. En ocasiones la participación sobre el precio del monto correspondiente a las oficinas de farmacia asciende a 22% o a montos equivalentes a los que les correspondería a la industria, responsable de asumir los riesgos y las inversiones en investigación y desarrollo.
En ningún momento se pretende desvalorar el servicio de calidad que debe ser prestado por las oficinas de farmacia, ni se cuestiona el valor agregado del servicio prestado, sin embargo, el riesgo al regular los precios de los medicamentos, y como en ocasiones ocurre con algunos medicamentos en España, proviene del peso relativo del rendimiento garantizado a las farmacias,
...