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Proceso del emprendedor

El “proceso emprendedor” no es una evolución lineal armoniosa; en general, las transiciones entre cada una de estas fases implican crisis de confianza, ansiedades ante la incertidumbre y reformulaciones —a veces giros radicales— en los conceptos y los objetivos originales del negocio. Muchas “iniciativas emprendedoras” logran llegar a una etapa avanzada y regresan a una o varias fases anteriores que se ponen en evidencia como débiles o equivocadas; a veces, se saltan pasos que serán completados más adelante.

El proceso emprendedor involucra todas las funciones, actividades y acciones asociadas a la percepción de oportunidades y creación de empresas que permitan aprovechar tal condición favorable en el mercado.

Identificación de la oportunidad

Vivimos en un mundo lleno de problemas y necesidades. Estas necesidades y estos problemas son la materia prima de donde surge el proceso emprendedor:

– una comunidad sin suficientes cadenas comerciales,

– una ciudad sin un eficiente sistema de transporte público,

– una población con violencia,

– un país con altos índices de muerte por problemas de salud,

son solo algunos ejemplos de las oportunidades que son visualizadas por los emprendedores.

Mientras que una persona promedio observaría en tales situaciones anteriores solo problemas e inclusive se pudiera sentir abrumada por los mismos, por el contrario el emprendedor identifica una oportunidad, contempla la posibilidad de crear valor en su comunidad, resolviendo dichos problemas a cambio de un beneficio. Un emprendedor es positivo y lleva la consigna del “Ganar-Ganar”.

En esta etapa, el emprendedor cierra sus ojos y proyecta en su pensamiento un futuro donde su comunidad recibe los beneficios de su “buena idea” ya materializada. Es aquí donde también identifica los pasos necesarios que debe dar para lograrlo y los recursos que requerirá para ello.

Financiamiento

Una vez identificada la oportunidad de crear valor, la siguiente fase es que obtener los recursos materiales para la realización de su idea genial. Algunas de las formas en las que los emprendedores se hacen de estos recursos son:

– Auto financiamiento: obtiene pos si sólo estos recursos mediante ahorro.

– Préstamo de instituciones de crédito.

– Apoyos o préstamos de programas gubernamentales.

– Préstamos de familiares

– Inversionista ángel: son grupos de personas con potencial financiero y de experiencia con la disposición de identificar y apoyar oportunidades atractivas de inversión con un beneficio a cambio.

Sin recursos las buenas ideas no pueden materializarse y solo aspiran a permanecer en el mundo de la especulación y los buenos deseos. En esta etapa si no se cuenta con los recursos para poner en marcha el proyecto, es muy probable que se tenga que recurrir a alguien más que si los pueda proporcionar. De ser así, será inevitable desarrollar un Plan de Negocio (o Business Plan por sus términos en inglés) de tal forma que se pueda mostrar a las personas o instituciones que financiaran el proyecto que éste es factible.

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