COMPETENCIAS Y FUNCIONES DIRECTIVAS EN EDUCACIÓN BÁSICA

UNIVERSIDAD RAFAEL URDANETA

VICERRECTORADO ACADÉMICO

DECANATO DE POSTGRADO E INVESTIGACIÓN

COMPETENCIAS Y FUNCIONES DIRECTIVAS EN EDUCACIÓN BÁSICA PRIMARIA DEL MUNICIPIO MARACAIBO, DEL ESTADO ZULIA

Trabajo de Grado presentado por:

Lcda. Gilexia Orozco

Maestría en Gerencia Educativa

Maracaibo, julio de 2014

COMPETENCIAS Y FUNCIONES DIRECTIVAS EN EDUCACIÓN BÁSICA PRIMARIA DEL MUNICIPIO MARACAIBO, DEL ESTADO ZULIA

Trabajo de Grado para optar al título de Magíster Scientiarum en Gerencia Educativa

Presentado por:

_____________________________________

Lcda. Gilexia Orozco

C.I. No. V-

ÍNDICE GENERAL

Pág.

TITULO…………………………………………………………………………… II

ÍNDICE GENERAL……………………………………………………………… III

CAPÍTULO I: FUNDAMENTACIÓN

Planteamiento y formulación del problema 1

Objetivos de la Investigación 8

Objetivo general 8

Objetivo específico 8

Justificación de la investigación 9

Delimitación de la investigación 10

CAPÍTULO II: MARCO TEÓRICO

Antecedentes de la investigación 12

Bases teórica de la investigación 20

Competencias Directivas 21

Competencias Gerenciales 26

Gerenciamiento de la motivación 28

Conducción de Grupos 31

Liderazgo 33

Comunicación Eficaz 35

Competencias Analíticas 38

Asimilación 40

Compresión 42

Socialización 44

Funciones Directivas 47

Funciones Administrativas 51

Planificación 54

Organización 55

Dirección 58

Control 61

Funciones Técnico-Académicas 63

Asesoramiento y Acompañamiento Docente 66

Evaluación de Desempeño 67

Reconocimiento 69

Mapa de variables 72

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 73

C A P Í T U L O I

F U N D A M E N T A C I Ó N

Planteamiento y Formulación del Problema

En el ámbito mundial, la calidad de la educación se ha convertido a pasos agigantados en un asunto de prioridad para todos aquellos actores o protagonistas que verdaderamente se ocupan de generar transformaciones en el proceso educativo, ya que muchas naciones están viviendo un mundo competitivo, avasallado por un contexto social, económico, político, cultural y educacional, donde todo se está viendo afectado y amerita por parte de los gerentes de las organizaciones escolares, la adquisición de nuevas herramientas, enfoques o perspectivas de acción o gestión, para llevar el timón de las instituciones educativas y su vez, respondan a las demandas sociales del contexto en el cual se encuentran inmersa.

Por tal razón, los directores de las instituciones educativas a nivel mundial, requiere el compromiso para la formación de gerentes que respondan a las necesidades de un nuevo siglo. De allí, que se debe asumir que ellos son parte importante del sector educativo y que tienen como lideres la gran responsabilidad de adoptar una serie de competencias, dándole adecuación a las funciones directivas que han de cumplir en cada centro educativo, poniendo en marcha nuevos enfoques gerenciales que han de ser insertado a la moderna gerencia.

Desde esa panorámica, en América Latina, la educación advierte un interés cada vez mayor en la gestión educativa, la cual ha sido uno de los principales focos de atención, aún cuando se han tomado diversas acciones que parecen insuficientes a las exigencias del sistema educativo latinoamericano. Es así, como al darle una formación en cuanto a la adquisición de una serie de competencias directivas va a facilitar el trabajo gerencial, ya que los gerentes sabrán qué hacer, cómo hacerlo, promoviendo entre todo un colectivo una corresponsabilidad y compromiso inherentes a sus cargos.

Por lo antes expuesto, el gerente debe estar formado y capacitado, siendo capaz de motivar, accionar, emprender tareas, asumir responsabilidades, establecer acuerdos, inspirar confianza y respeto, comunicarse de manera efectiva, promover la solidaridad y cooperación, brindar estabilidad, justicia, seguridad y soluciones a las necesidades sentidas por todo un colectivo, siendo éstos, elementos claves para influir positiva y proactivamente en los docentes, padres, madres, representantes, fuerzas vivas, consejos comunales, entre otros.

Del mismo modo, Venezuela persigue una orientación constante al nuevo enfoque gerencial, así como también en la búsqueda de diferentes elementos que deben predominar en esas coordinaciones de acciones y facetas que abarcan el hecho educativo, con el fin de propiciar el logro de objetivos institucionales y por ende, demostrar las competencias adquiridas o aprendidas para llevar a cabo un mejor desempeño de sus funciones directivas.

Desde esa perspectiva, el director debe estar en la capacidad de promover una visión compartida y reconozca el rol o funciones que le pertenecen como gerente, elevando de esta manera, el grado de satisfacción labora dentro de las instituciones educativas, con la puesta en práctica de la exteriorización de sus competencias. Sobre este particular, Cardona, P. y Miller, P. (2001), puntualiza que las competencias directivas “son aquellos comportamientos observables y habituales que posibilitan el éxito de una persona en su función directiva”. (p.82). De esto se infiere, que los gerentes deben exteriorizar sus cualidades y éstas tienen que ser vista en cada una de sus acciones o roles a cumplir dentro de la organización escolar.

Asimismo, Alles, M. (2009), plantea “que las competencias son las características de personalidad, devenidas en comportamientos, que generan un desempeño exitoso en un puesto de trabajo” (p.18). En tal sentido, los gerentes educativos requieren de suficientes competencias, por el hecho de ser necesarias para realizar cualquier tipo de trabajo institucional, pedagógico, administrativo y comunitario.

Cabe destacar, que el sistema educativo venezolano se encuentra inmerso en esta problemática, la cual se ve reflejada en la labor que están cumpliendo los gerentes educativos y por la cual, se evidencian situaciones conflictivas en estos centros escolares. Por tal motivo, se requiere de formaciones permanentes a estos líderes, donde asuman compromisos a través de la adquisición de nuevas competencias y funciones directivas que respondan a las necesidades de una sociedad actual, en el cual los directivos dejen su posición autoritaria y fiscalizadora, para convertirse en un gestor que motive, coopere, trabaje en equipo, sea experto en humanidad, mantenga excelentes relaciones interpersonales, promueva clima de confianza, respeto, tolerancia y participación.

Aunado a lo anterior, el director debe contar con suficientes competencias gerenciales para orientar a su personal en el logro de acciones que lo conduzcan a mejorar su desempeño a través de una serie de funciones directivas. En relación a esa problemática, Guerra, D. (2012), sostiene que la función directiva “significa coordinación de las actividades del personal de la institución, correspondiéndole al director ejercer esta función cuando actúe como organizador y ser el elemento clave”. (p.76). Al tomar en cuenta estos aspectos, al gerente le corresponde cumplir con unas funciones específicas y velar por el buen funcionamiento de la institución.

Asimismo, Pérez, E. y Oteo, L. (2006), sostienen que la función directiva “es una actividad de dirección y control de las conductas de otros y que, como tal, basa su eficacia en la adecuada gestión de recursos informativos, persuasivos, de autoridad y control” (p.133). Por tal motivo, los gerentes educativos tienen la responsabilidad de guiar y determinar cuál es la conducta profesional e interpersonal de cada uno de los miembros de la organización.

De igual forma, todo gerente está en la capacidad de poner en marcha en cada una de las acciones a emprender funciones analíticas que lo ayudarán a resolver problemas o cualquier tipo de situación conflictiva que se presente en las organizaciones educativas y en la cual necesitará del pensamiento crítico, reflexivo, procesos mentales de interiorización y exteriorización, con el fin de buscar la manera más exitosa y positiva para gestionar el conocimiento a los miembros de la institución.

Ante esa situación, es necesario enfocar la atención en la posibilidad que el director de las organizaciones educativas cumplan a cabalidad con las funciones administrativas, promoviendo una visión compartida, evitando malos comentarios al momento de realizarse procesos de control y que el fiel desempeño de estos roles o responsabilidades permita alcanzar los objetivos propuestos, elevando a su vez, el grado de satisfacción entre los miembros de la institución.

Asimismo, la intervención de los gerentes educativos en los centros escolares deben desarrollar acciones eficientes

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