Contrastación De La Realidad Del Docente Del área Científica Y Su Papel En El Desarrollo De Las Ferias Científicas.

Contrastación de la realidad del docente del área científica y su papel en el desarrollo de las ferias científicas.

Una de las preguntas más comunes e inquietantes en los procesos educativos es ¿cómo se relaciona la realidad del docente del área científica con su papel en el desarrollo de las ferias científicas?, pregunta que no pretende buscar fórmulas mágicas para solucionar problemas en lo referente al tema de las ferias científicas, sino promover discusiones que aporten sugerencias de cómo el docente puede sacar provecho de su propia realidad para cumplir de forma correcta con su papel en las diversas etapas del proceso antes mencionado y en donde se logre evidenciar relaciones necesarias y fundamentales entre estos dos aspectos: la realidad del profesor de ciencias y su papel en las ferias científicas.

Es indudable que en todo proceso de cambio o renovación de ferias científicas, los docentes del área científica son elementos valiosísimos, pues son ellos los que deben ser conscientes de que se necesita de su creación, innovación y de su actitud hacia el cambio, para responder no sólo a los propósitos y planteamientos que se disponen en el Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología, sino también, para saciar las exigencias que se derivan de los contextos que engloban a los estudiantes como sujetos sociales. Se asume que el docente no es un experto que se limita unicamente a transmitir instrucciones, se trata de sujetos que necesitan de conocimientos disciplinares, pedagógicos y didácticos que le permitan afectar la realidad educativa.

En el documento se ofrecen discusiones alrededor de la relación que en la actualidad se establece o no, en cuanto al papel del docente en los procesos de feria científica y su realidad educativa. A continuación se presentan puntos importantes en donde se evidencia el grado de relación entre ambos aspectos:

Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología

El Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología busca que el estudiante con la debida ayuda y orientación de los docentes, tutores profesionales, padres de familia, instituciones, etc., pueda desarrollar todo el potencial que posee y lo canalice para hallar soluciones a los problemas que aquejan a sus comunidades. Según Chacón et al. (2013), una de las funciones del docente del área científica es llevar a cabo el “cumplimiento de las disposiciones generales del Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología” (p. 202), dentro de esas disposiciones generales se contemplan aspectos relacionados con la premiación y organización de las ferias de ciencia y tecnología, modalidades de participación, juzgamiento, categorías de participación, presentación, calendarización de ferias, precalificación, áreas temáticas, descalificación, acreditación e inscripción. Es de suma importancia y de acatamiento obligatorio que la presentación de los proyectos de investigación estudiantiles en las Ferias de Ciencia y Tecnología se haga siguiendo las instrucciones que se incluyen en este documento.

Aunque la totalidad de los aspectos que deben cumplir los estudiantes para desarrollar su proyecto puede resultar abrumadora, es obligación del profesor de ciencias velar por el cabal cumplimiento de esas disposiciones. En la realidad de la educación pese a que el docente cuenta con miembros de la comunidad educativa que tienen el deber de auxiliarlo con la enorme tarea que representan las diversas etapas de la feria científica debe quedar claro que generalmente es el propio docente de ciencias (o docentes si son varios) de la institución quien recibe un sobrecargo de funciones lo cual lleva a que al final se cumpla parcialmente o no se cumplan con las disposiciones requeridas por el Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología con la posible descalificación por parte del Comité Científico de Revisión del proyecto de investigación en los niveles superiores al institucional.

La Comunidad

Chacón et al. (2013) señalan que otro de los roles del docente consiste en promover el “apoyo y la participación de toda la comunidad educativa en el proceso de feria” (p. 202), buscando con ello vincular a los alumnos y su comunidad con los procesos científicos a partir de las experiencias de aprendizaje estudiantiles, acompañados por tutores docentes y padres de familia. Sin embargo en la realidad educativa se observa que uno de los principales problemas a los que el docente se enfrenta es cómo regular y gestionar la ayuda de los padres que son además, los miembros de la comunidad que tienen una relación más cercana con los estudiantes y con esto sucede que por un lado tenemos padres que hacen tanto por sus hijos que terminan desarrollando el proyecto ellos mismos en el afán de que sus hijos sobresalgan y logren buenas calificaciones y por otro lado se tiene a aquellos padres distantes que no dan amparo a sus hijos y los dejan a su suerte frente al proyecto de feria todo ello en detrimento del alumno.

La Participación y el Respeto

Cómo establece el Manual del Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología (2013) los docentes deben fomentar el valor de la participación y el respeto. Las ferias de ciencia deben ser mucho más que ciencia pura, deben ser espacios abiertos donde los estudiantes deben aprender también acerca de la importancia de participar y compartir con respeto ideas y soluciones sobre los distintos problemas que nos preocupan a todos y cómo podemos enfrentarlos conjuntamente de la mejor manera, pero tal propósito es muchas veces olvidado o ni siquiera se toma en cuenta por las ansias de los miembros de la comunidad educativa (incluyendo a los propios docentes), por ganar a toda costa y en ese sentido las ferias de ciencia y tecnología se convierten en una fatigosa competición donde lo único que cuenta es ser el mejor y vencer al rival.

El Financiamiento

Otra función del educador es la de “apoyar la búsqueda de financiamiento”, puesto que las ferias de ciencia y tecnología requieren cuantiosos gastos en materiales impresos con distintas funciones, alimentación, premiación, capacitación, divulgación, medidas de seguridad, actividades especiales, alojamiento, transporte, actividades socioculturales, de servicios generales y montaje entre otros. Aunque en teoría se cuenta con varios comités para sacar adelante estas tareas, muchas veces nos vamos a encontrar con una situación que se repite cada día en las zonas rurales y que tiene que ver con la pobreza que domina en esos lugares por diversas razones, al respecto Ojeda y Núñez (s.f.) expresan “hay que entender que no tienen un plato de comida en la mesa, en ese sentido ¿privilegiar la educación?, a veces se privilegia sobrevivir” (p. 80), por ello en la práctica son los mismos docentes quienes se encargan de sufragar los gastos que implican las ferias científicas con el dinero de su bolsillo.

La importancia de la Investigación

En cuanto al valor de la investigación Chacón et al. (2013) considera que los profesores de ciencias necesitan “promover acciones para que la investigación se convierta en un hilo conductor en los programas de estudio de las disciplinas académicas del Sistema Educativo Costarricense” (p. 203), Por ende, se ha convertido en una necesidad de atención urgente, el que el profesor contribuya a que los alumnos conozcan su propia realidad. Para ello, necesitan de herramientas de investigación que les permita acercarse a su medio natural, a su mundo social y a su universo cultural para, a partir de ahí, conocerse a sí mismo, sus potencialidades, a conocer su realidad para poder interactuar verdaderamente con ella y ser agentes de la transformación de la misma construyendo un mejor futuro (Us Soc., 2009).

Pese a que en la actualidad, en las aulas, en las ferias científicas y por extensión en todo momento y lugar se espera encontrar una situación como la descrita en el párrafo anterior, ocurre que lo que se tiende a presenciar, por ejemplo, en el caso de las ferias científicas son estudiantes cansados que empezaron su proyecto la noche anterior al día que debían presentarlo y docentes decepcionados porque otra vez la feria científica está repleta de experimentos que se han visto una y otra vez, lo cual pareciera que no se le está dando la debida importancia a la investigación tanto por parte del alumno como del docente.

Revisión

La revisión y el establecimiento de las normas o disposiciones generales del proceso de ferias es otro de los roles del docente, de acuerdo con el Manual del Programa Nacional de Ferias de Ciencia y Tecnología (2013), al comité científico de revisión le corresponde “la administración de los procesos de inscripción y control de calidad de los proyectos” (p. 60), en las diferentes modalidades de feria (institucional, de circuito escolar, regional y nacional) con el fin de disminuir situaciones que puedan causar insatisfacción o que perjudique de alguna manera al estudiante. Si bien, se recomienda que el CCR esté integrado por un docente de ciencias, un profesor de español y uno de otra área de las ciencias sociales, además del Director de la institución educativa, en la realidad educativa tiende a percibirse que es el docente de ciencias quien termina revisando todos los proyectos lo que trae como consecuencia que muchos de los proyectos incumplan con los lineamientos y las disposiciones establecidas en el manual de feria científica.

Coordinación y Planificación

Es obligación del profesional en ciencias encargarse de la coordinación y planificación de actividades para que las diversas actividades relacionadas con la feria se cumplan sin contratiempos y de la mejor manera posible, pero también es importante

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