Código Deontológico

Introducción al código deontológico

Un código deontológico es un documento que recoge un conjunto más o menos amplio de criterios, apoyados en la deontología con normas y valores que formulan y asumen quienes llevan a cabo correctamente una actividad profesional. Los códigos deontológicos se ocupan de los aspectos éticos del ejercicio de la profesión que regulan. Estos códigos cada vez son más frecuentes en otras actividades.

Toda comunidad profesional trata de mantener determinados niveles de exigencia, de competencia y de calidad en el trabajo. Por ello, controla y supervisa, de alguna manera, la integración de nuevos miembros y el adecuado ejercicio de las tareas propias de su profesión.

En este caso, la carrera de Diseño, se requiere un código deontológico para asegurar de que exista un equilibrio de poder entre el diseñador y su cliente.

Debido a que la carrera sufre de graves prejuicios y en múltiples ocasiones no es tratada con la credibilidad y respeto que esta merece, se ha visto la necesidad de crear un código que regule las normas, tarifas y relaciones de trabajo.

Se realizará en base a los siguientes puntos:

- La responsabilidad del diseñador gráfico respecto a la comunidad.

- La responsabilidad del diseñador gráfico respecto a otros diseñadores.

- La responsabilidad del diseñador gráfico respecto a su cliente.

- Tarifas

- Publicidad

La Responsabilidad del Diseñador hacia la comunidad

“Pensar Global, Actuar Local”

Se refiere a estar conectados con el entorno actual y/o pasado con el objetivo de observar otros trabajos que se realizan y/o que fueron proyectos hechos con anterioridad, esto nos lleva a hacer un análisis de la situación y evitar problemas de plagio que acarrean el desarrollo de proyectos similares o iguales.

El mensaje gráfico: portador de valores

El diseñador deberá de hacer conciencia real de la situación de la sociedad ante su trabajo en desarrollo, debe de ser funcional, aplicable y beneficioso el proyecto que ejecutará sin trastornar los valores sociales que se rige la comunidad.

El diseñador debe de realizar el debido estudio de marketing que fundamente su trabajo y permita observar los diversos resultados que afectan al usuario e influyen en su comportamiento y obligarse a modificar u omitir aspectos negativos del proyecto y embarcarse a la búsqueda de nuevas propuestas para el desarrollo del trabajo a realizar.

Objetivos del Diseñador con relación a la sociedad

El Diseñador tendrá el derecho y libertad de escoger la empresa, instancia u organización extranjera o nacional para ejercer su profesión siempre y cuando no afecte de manera perjudicial el bienestar de la comunidad o del diseñador.

Ejercer la profesión con el fin de generar nuevas empresas, nuevas oportunidades de empleo, nuevos caminos que desarrollen y motiven el flujo económico, generar impuestos y servicios que beneficien a la sociedad.

Controlar y manipular los mensajes bajo estándares éticos y profesionales sin afectar a la integridad de una persona, cultura, grupo social o etnia.

Orientar el trabajo gráfico del diseñador en productos o servicios verídicos y beneficiosos a la sociedad.

Negarse totalmente a propuestas de proyectos negativos, dañinos, perjudiciales de la salud social, bienestar o aspectos de propaganda que causen disturbios en la sociedad.

Responsabilidad del diseñador grafico con otros diseñadores.

- El diseñador no puede robar u omitir el crédito de sus colaboradores diseñadores en proyectos.

- Tiene la responsabilidad de informar a los diseñadores que colaboran con el si el proyecto ha tenido cambios o de su cancelación.

- El diseñador no intentara suplantar a otro diseñador dañando así su reputación.

- El diseñador no hará crítica, denigrara o insultara el trabajo de otro diseñador.

- El diseñador repartirá equitativamente las ganancias con sus colaboradores diseñadores e informara de todas las fechas de pago.

- El diseñador jamás aceptara una orden de un cliente que tenga como fin plagio a otro diseñador.

- El diseñador respetara y tomara en cuenta las ideas de sus colaboradores y siempre pedirá una debida fundamentación de ellas.

- El diseñador no puede hacer modificaciones a un proyecto por su cuenta sin antes pedir consulta a sus colaboradores y ser autorizado por ellos.

- El diseñador debe promover el trabajo en equipo de manera equitativa y leal.

- El diseñador siempre debe ver por su equipo de trabajo y por qué este trabaje en óptimas condiciones.

- El diseñador no puede trabajar en un proyecto en el cual ya este trabajando otro diseñador.

- El diseñador hará críticas constructivas sobre el trabajo de sus colaboradores solo con el fin de buscar mejoras para el proyecto.

- El diseñador debe aportar ideas junto con sus colaboradores diseñadores y siempre fundamentarlas.

- El diseñador respetara el código deontológico de sus colaboradores diseñadores este o no en su país de origen.

- El diseñador no permitirá que su trabajo sea modificado o entregado a otro diseñador para terminarlo amenos que se firme como una mínima colaboración y sus créditos sean respetados.

- Ejercer la profesión dentro de organizaciones públicas o privadas, nacionales o extranjeras, siempre que los beneficios no vayan en contra de los intereses de la comunidad nacional.

- Ejercer la profesión con el fin de fomentar el desarrollo y creación de nuevas empresas que generen empleo e impuestos, que beneficien a los grupos más desprotegidos de la comunidad nacional.

- Debe evitar la práctica o trato no confiable.

- Debe hacer respetar su trabajo y siempre fundamentarlo correctamente.

- Debe proponer soluciones para el bien de la comunidad de diseñadores.

- Tiene la responsabilidad de establecer una sociedad confiable y leal en su área de trabajo con sus colaboradores diseñadores.

- Trabajar siempre en una tarifa adecuada a sus horas de trabajos o salario y no retener comisiones etc. Siempre trabajando sobre contrato.

- Trabajar sobre las leyes vigentes de su residencia o país independientemente de su nacionalidad.

- Evitar basar su consejo en el recibo de pagos, cuando se le encomiende la tarea de elegir uno o varios colaboradores para cualquier trabajo.

- Auto-promocionarse sobre bases ciertas de competencia, experiencia o capacidades profesionales de manera justa con clientes y colegas.

- Cobrar al cliente montos razonables de manejo y administración de proyectos, con el debido consentimiento de su parte, como porcentaje de todos los ítems a pagar que pasen por la cuenta del diseñador.

Responsabilidad del diseñador para con el cliente

El diseñador no solo debe de resolver los problemas de comunicación que el cliente le pida, sino que debe además de mantener una buena relación comunicativa con este, escuchar sus opiniones sobre lo que quiere y lo que puede no agradarle de nuestro trabajo.

El cliente, precisamente, es quien determina lo que quiere o como desea que algo funcione, y es el diseñador quien debe dar una “bajada” o forma a dicha solicitud.

Sin embargo, dicho requerimiento define las bases a partir de las cuales el diseñador debe crear, guiado por un objetivo igualmente determinado según las expectativas del cliente. Pero son estas exigencias las que obligatoriamente fijan un camino a seguir, otorgando una pauta sobre la cual actuar. Así, el diseñador contratado para un trabajo específico, jamás tiene libertad absoluta o posibilidades totalmente indeterminadas para comenzar a crear.

De esta manera, la creatividad puede verse restringida sobre todo si un cliente posee una idea muy clara de aquello que desea y que no necesariamente resulta ser, a juicio del diseñador, una idea de éxito seguro o de buen gusto.

Frente a esto, el diseñador se encontrará con un dilema bastante común: el deber de cumplir con las expectativas del cliente y la necesidad de ejecutar un buen trabajo, tanto en el sentido funcional como en el estético.

Lo que ambos –diseñador y cliente- deben intentar, es encontrar una respuesta integral.

Para eso, se requiere apertura por parte de ambos, pero principalmente se necesita de la creatividad del diseñador para cumplir con los requisitos mínimos solicitados y darles una forma estéticamente aceptable. Por último, puede resultar aconsejable realizar más de una propuesta. Aunque esto implique más horas de trabajo, al final resultará incluso un ahorro de tiempo, pues puede darse la posibilidad de que el cliente acepte más fácilmente una de dichas propuestas, antes que estar esperando cada cierto tiempo una nueva idea que tal vez rechazará.

En relación al tema del tiempo y del esfuerzo implicados en un trabajo, asoma también un segundo dilema, que pese a no ser exclusivo del Diseño, resulta ser bastante frecuente. En diversas ocasiones, ocurre que el cliente no tiene los conocimientos básicos relativos a la calidad del diseño, y precisamente por eso confía esta labor a un profesional en la materia. Y es por este mismo desconocimiento, que

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