Cómo caracterizar la educación

1. El educar busca la socialización, la incorporación a la cultura de la humanidad mediante el cambio de su conducta, a través del conocimiento crítico legitimado públicamente con los criterios de coherencia, racionalidad y razonabilidad, lo que proporciona los valores de justicia, igualdad, aceptación frente a la diversidad y libertad.

Pero el socializar no siempre trae un educar completo, pueden generarse sujetos que no sean autónomos, que el individuo pueda socializarse sin necesidad de comprender, reflexionar y/o criticar las pautas, los valores y los saberes. Por eso, según Freud, cuando uno no se cuestiona lo que realiza, piensa o percibe y solo obedece e incorpora el conocimiento otorgado se considera una represión. En cambio, la visión de Rousseau, es que la educación es adaptación y sustitución del principio de igualdad, dominante en el individuo por el principio de desigualdad regido por apropiaciones y dominios.

En la escuela se desarrollan los procesos educativos de producción, apropiación y circulación de los saberes, tanto la organización como la selección de métodos y contenidos está sujeto de la regulación social. La escuela está ligada a un suelo, a una cultura, y su función es enseñar los saberes socialmente legitimados y el criterio para esta autentificación es el carácter público del conocimiento, es decir que hay que enseñar de todo y para todos.

1. Gvirtz dice que la educación es un fenómeno social, siempre que haya socialización, hay influencia educativa. Refiere a la educación como un proceso en el que se desarrollan un conjunto de saberes que tienden a conservar y/o modificar la realidad o el orden establecido, además es una práctica social con un mecanismo de producción de estados culturales, y reproducción cultural. Desde su concepción el conocimiento dentro del proceso de educación, en el aula, es construcción; y en esta construcción se presenta la relación entre poder y educación, el poder es propio del educar, ya que éste determina el hacer de otro tiene la capacidad de incidir en los pensamientos y/o conductas para moldearlas.  En el marco de la producción de saberes, cada sujeto que participa del proceso educativo trata de presentar y conservar su espacio de poder para poder trabajar desde un plano horizontal.

A través de estas perspectivas podemos distinguir dos tipos de educación: una en sentido amplio, es decir, que todo fenómeno social es educativo, forma parte de la socialización y es susceptible de ser percibido; y otra en sentido estricto, que implica a un fenómeno educativo, como hecho concreto,  intencional y consciente.

Otra de las distinciones que se le puede hacer a la educación refiere a la formal, que se entiende como todos aquellos procesos educativos que tienen lugar en las instituciones escolares; informal, es residual y abarca todos aquellos procesos educacionales que no suceden en la escuela; de estas dos distinciones, sus acciones se clasifican en sistemática, ya que éstas son planificadas.También existen dos tipos más de educación: la asistemática que en ella no se planifican los procesos educativos; y la permanente que es una educación constante porque siempre hay nuevos saberes y cambios, que vienen a simplificarnos la vida.

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