ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Denuncia Al Racismo


Enviado por   •  26 de Septiembre de 2013  •  1.071 Palabras (5 Páginas)  •  230 Visitas

Página 1 de 5

Al fin me voy dando cuenta, quizás sea tarde, no lo sé, pero voy viendo diferencias, y cada vez más grandes, entre el mundo blanco y el mundo negro, todas injustas por supuesto. Hoy estoy aquí dispuesto a denunciarlas.

Mi denuncia empezó a rondarme la cabeza en las Navidades pasadas, entre el 26 de Diciembre y el 4 de Enero. Estaba realizando un cursillo de danza, concretamente de hip hop-house… con un profesor estadounidense de caracteres muy peculiares, tan peculiares eran éstos que un día dijo que no se iba a bailar nada de lo previsto, que ese día tendríamos que hacer teatro, teatro bailado obviamente. Fue entonces cuando comenzó mi denuncia a escribirse por sí sola…

Nos enseñaría una pequeña coreografía que tendríamos que bailar (o actuar, ya digo que era un poco de teatro bailado) al compás de la canción "Sierra Leone" de "Ferry Callier". La coreografía guardaba una clara relación con la canción, que criticaba las injusticias del mundo negro, concretamente en Sierra Leona, por poner un ejemplo. Comienza la coreografía…. Y comienza mi denuncia:

"Empezábamos alzando un brazo con la mano en puño simbolizando la revolución, pero esos 'seres superiores', esos blancos con cascos y armados hasta los dientes nos cogen el brazo y nos lo retuercen hasta dejarlo junto a nuestra propia espalda. Me estremezco y mis piernas sufren lo mismo que yo. Tras esto alzo mi otro brazo libre para librarme de la propina que estaba a punto de recibir, pero no tengo fuerzas, la mano del monstruo blanco me vence y caigo hacia el árido suelo tras un duro bofetón. No conformándose con esto, ya en el suelo, me sigue abofeteando hasta que finalmente acabo muy débil yaciendo sobre mis piernas.

No estoy dispuesto a rendirme, por eso me levanto, a duras penas, retorciéndome por todos lados, encontrando apoyo en mi propio hombro… pero finalmente me levanto para poder patear al monstruo con las pocas fuerzas que me quedan. Tras esto elevo mis manos hacia mi pueblo. "¡Queremos la paz!". Nuevamente soy retenido por aquel monstruo, pero consigo liberarme fácilmente, y vago débilmente dándole la espalda… pero no puedo más, caigo rendido al suelo…

"Mis únicos tesoros son el agua, esa agua preciosa que jamás te ha interesado y ahora me la quieres quitar por el simple hecho de, según tu criterio, ser inferior a ti. Mis diamantes son las piedras, esas que pisas sin importancia alguna, maldito monstruo blanco, lárgate de aquí, no eres bien recibido y encima abusas de nosotros". Por vigésima vez soy golpeado y finalmente al girar un par de veces buscando salida encuentro un camino libre para mi destino… y así acaba mi historia, vagando por un camino solitario… pero que quede claro que no me rindo, mi pueblo está ahí, y no pienso fallarle, "si tú eres el monstruo blanco, yo soy el monstruo negro y aquí mis guerras las gano yo".

En resumidas cuentas, esa fue la coreografía de aquel día (personalizándola mínimamente para que se entendiera). Recuerdo que estuve pensando toda la noche en esa fantástica coreografía, y al día siguiente amanecí con moratones por todo el cuerpo, más en concreto en las rodillas de tantas caídas que teníamos que interpretar y en los hombros del apoyo que teníamos que coger al levantarnos. Ahora es cuando yo denuncio.

¿Qué decir de la famosa frase "No soy racista pero.."?

- nunca adoptaría a un niño negro

-

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (6.5 Kb)  
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com