EL ENSAYO DEBE SER INSPIRADO, NO FORZADO

NO TENGO ENSAYOS PARA COMPARTIR Y ES PREFERIBLE LA HONESTIDAD.´

QUIZÁS SU INTENCIÓN NO ES OBTENER MÁS BENEFICIO QUE LA PRODUCCIÓN ENSAYÍSTICA DE DIFERENTES TEMAS PARA PODER HACER ALGO CON ELLOS; PERO UN ENSAYO SE ESCRIBE POR LA ACUMULACIÓN Y ANÁLISIS DEL CONOCIMIENTO, DEL DEBATE, DE LA EXPERIENCIA QUE LLEVA LA VIDA Y ME PARECE ABSOLUTAMENTE EGOÍSTA NO ABRIR EL ARCHIVO PARA PODER COMPARTIRLO.

SERÍA PREFERIBLE DECIR QUE PUEDE COMPRARSE O "PAGARSE" CON OTRO ENSAYO, PERO NO MEDIANTE UNA IMPOSICIÓN LITERARIA QUE DEJA MUCHO QUE DESEAR AL INTENTAR FORZAR UNA PRODUCCIÓN TAN BELLA COMO ES EL ENSAYO Y SU INTENCIÓN DE OFRECER UNA OPINIÓN CRÍTICA INFORMADA DE UN TEMA EN ESPECIAL.

DEFINITIVAMENTE UN TEXTO DEBE SER INSPIRADO, NO FORZADO Y ME PARECE DE MUY MAL GUSTO SU FORMA DE ENTRAR AL SITIO PARA SOLICITAR UN TRABAJO QUE USTEDES RIGEN Y YA HA SIDO PUBLICADO.

En la Historia de la música y la musicología, se llama “música clásica” a la música del clasicismo entre 1750 y 1820; pero en sentido popular y de mucha aceptación en los medios escritos como lo recoge la Real Academia Española, la música de tradición culta; da sus primeras apariciones en Europa que se sitúa aproximadamente en 1450.

Existe una expresión que abarca casi todos los períodos para definir su época de mayor esplendor: “Período de la práctica común”. Hacia 1950 la composición culta, con cierta complejidad en notación e instrumentación, comienza a situarse generalmente fuera de la tradición anterior, mediante la composición radicalmente atonal y disonante y otras tendencias opuestas.

Los orígenes

Tiene elementos de otras tradiciones musicales como lo son las occidentales, tanto litúrgicas como seculares, como ejemplo la música de la Antigua Grecia o la de la Antigua Roma; pero lo que en realidad definió su rumbo fue el descubrimiento de la polifonía, así como el desarrollo de la armonía y la evolución de la notación musical.

Periodos históricos

Música renacentista: entre 1450-1600, hallamos un mayor número de instrumentos, múltiples líneas melódicas, y el uso de los primeros instrumentos graves o bajos.

Música barroca, entre 1600 y 1750, surge el uso de tonalidades más complejas, en lugar de la modalidad y el contrapunto. Se popularizan los instrumentos de teclado.

Música clásica, entre 1730-1820, fue una era impactante que estableció normas de composición y estructura. Está marcado por la desaparición del clavicémbalo a favor del nuevo piano.

Desarrollo de la Música

Los siglos XVII y XVIII fueron el periodo formativo de la música clásica y vieron nacer la opera y el oratorio, la sonata, el concierto y la sinfonía. Los italianos fueron los primeros en desarrollar estos géneros, pero les siguieron pronto los alemanes, austriacos e ingleses.

Como en los siglos anteriores, muchos músicos dependían de un mecenas: algún príncipe, algún eclesiástico bien provisto de fondos, o un aristócrata. Los numerosos príncipes, arzobispos y obispos cada uno con su propia corte, proporcionaron los patrocinios que hicieron de Italia y Alemania los adelantados musicales de Europa.

Muchas técnicas del estilo musical barroco, que dominaron Europa entre 1600 y 1750, fueron perfeccionadas por dos compositores, Bach y Haendel, quienes brillaron como genios musicales.

Johann Sebastian Bach (1685-1750)

Provenía de una familia de músicos; ocupó el puesto de organista y director musical en gran número de pequeñas cortes germanas, antes de convertirse en el maestro de capilla de la iglesia de Santo Tomás en Leipzig, en 1723. Allí compuso la Misa en si menor, la Pasión según San Mateo y las cantatas y motetes que fijaron su reputación como uno de los más grandes compositores de todos los tiempos.

Bach podía transitar con facilidad de lo religioso a lo secular. De hecho, su música profana refleja un espíritu turbulento, para Bach no representaba problema alguno añadir textos religiosos a la música secular que había compuesto en las cortes principescas para convertirla en música sacra.

Para él toda la música era un medio para adorar a Dios; en sus propias palabras, su tarea en la vida era hacer “música bien ordenada en honor de Dios”.

G Frederick Haendel (1685-1759)

Nació, como Bach, en Sajonia, Alemania, y en el mismo año. En contraste con la tranquila vida provincial de Bach, Haendel experimentó una agitada carrera internacional y fue profundamente secular por temperamento. Tras estudiar en Italia, donde comenzó su carrera escribiendo ópera la manera italiana, en 1712 se mudó a Inglaterra, donde dedica mayor parte de su vida a tratar de dirigir una compañía de ópera.

Aunque lo patrocinaba la corte real inglesa, Haendel compuso música para auditorios más amplios y no tenía inconveniente en escribir piezas colosales de sonido inusitado.

Si bien escribió más de cuarenta óperas y mucha música secular, es irónico que el mundano Haendel probablemente sea conocido más por su música religiosa. Su Mesías ha sido llamado “a una de esas extrañas obras que atraen de inmediato a cualquiera y que, sin embargo, es indiscutiblemente una obra maestra del más elevado orden”.

Aunque Bach y Haendel compusieron muchas suites instrumentales y conciertos, la música orquestal se situó en primer hasta la segunda mitad del siglo XVIII, al aparecer nuevos instrumentos, como el piano. Una nueva era musical, surgió en el periodo entre 1750 y 1830, representada por dos grandiosos innovadores, Haydn y Mozart.

Joseph Haydn (1732-1809)

Pasó la mayor parte de su vida adulta trabajando como director musical para los acaudalados príncipes húngaros, los hermanos Esterhazy. Haydn fue un creador increíblemente prolífico; compuso ciento cuatro sinfonías, además de cuerdas, conciertos, canciones, oratorios y misas. Sus visitas a Inglaterra en 1790 y 1794 lo introdujeron en otro mundo de músicos que escribían conciertos para el público, más que para principescos.

Esta “libertad’ como él la llamó, lo animó a escribir dos de sus más importantes oratorios, La creación y Las estaciones dedicados ambos a la gente común.2

El concierto, la sinfonía y la ópera atestiguaron el clímax en las obras de Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791).

Fue un niño prodigio que dio su primer concierto de clavicordio a los seis años de edad y escribió su primera ópera a los doce. También él buscó un mecenas, pero su descontento con las desmedidas exigencias del arzobispo

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