EL GRAN CASO MAQUEDA VS ARGENTINA

CASO MAQUEDA VS ARGENTINA

Del análisis del extracto del asunto proporcionado, se observa la condena hecha en contra de Guillermo José Maqueda de diez años de prisión, por supuestos actos de violencia que tienen por fin atentar contra el orden constitucional y la vida democrática, en términos de la ley de Argentina, sin embargo el imputado alegó no haber participado de los mismos, y que solo acudió como miembro de un movimiento democrático sin que ello sea un delito, y que no había sido sujeto activo de dicho delito.

La parte que considero relevante es la exposición que hace la Comisión Interamericana a la propia Corte en el sentido de que declarara al gobierno Argentino como culpable de violaciones al tratado, las que consistían en que se había violado en perjuicio deL señor Maqueda, su derecho a ser oído por un tribunal imparcial (artículo 8.1); el derecho a la presunción de inocencia (artículo 8.2); y el derecho de recurrir del fallo ante juez o tribunal superior (artículo 8.2.h), juntamente con las garantías judiciales del artículo 25, todos ellos en relación con la obligación genérica de respetar los derechos y libertades reconocidos en la Convención y garantizar su libre y pleno ejercicio de conformidad con el artículo 1.1 de la misma. Asimismo, que declarara que el Estado Argentino ha violado el artículo 2 de la Convención, al no adoptar disposiciones de derecho interno tendientes a hacer efectivo el derecho consagrado en el artículo 8.2.h.

Adicional, la Comisión solicito pronunciamiento respecto de que el gobierno Argentino decretará la libertad inmediata del culpable, y la obligación del estado de indemnizar adecuadamente a Guillermo Maqueda por el grave daño —material así como moral— sufrido a consecuencia de la violación de sus derechos protegidos en la Convención.

Sin embargo el último punto de la petición de la Comisión Interamericana de derechos Humanos es la que me parece más trascendente, es decir el hecho de que se obligara al Estado Argentino a establecer un mecanismo ordinario que garantice la doble instancia en el procedimiento establecido por la ley, ya que al no permitir ser recurrido si hay una violación grave de derechos fundamentales.

Al final, derivado del acuerdo entre el Estado y el señor Maqueda, este es puesto en libertad y se solicita el desistimiento de la petición de la Comisión de resolver el asunto por la Corte Interamericana, resolviendo esta sobreseer el juicio y reservándose reabrirlo si así lo estima.

De esto encuentro interesante observar el peso de la Comisión y el temor de un Estado a una resolución de la Corte que lo condenara a indemnizar, quizá ante una evaluación de que el caso no era defendible, lo que implicaría que fue un acto arbitrario, ya que parece (aun con la poca información

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