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EL PODER DE LA ORATORIA


Enviado por   •  17 de Febrero de 2013  •  Informes  •  2.075 Palabras (9 Páginas)  •  520 Visitas

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EL PODER DE LA ORATORIA

Resumen

En principio, el texto “El Poder de la Oratoria” tiene como objetivo dar a conocer las pautas que se requieren para ser un buen orador, poco a poco, se especifica en sus capítulos la importancia de él buen hablar en público y de los beneficios que la misma presenta para cada persona, a la vez, nos explica que el humano en esencia es un ser social y por ellos necesita mantener una relación constante con uno o mas humanos para así expresar sus sentimientos y emociones, por eso, saber canalizar esos sentimientos y emociones en forma de palabras requiere de cierto conocimiento de las personas con la cual se valla a tratar, como por ejemplo: tener en cuenta su edad, cultura, ideología, su circunstancia, nivel económico, comodidad, significados, roles y tradiciones; todo esto para evitar malentendidos a la hora de establecer una conversación con esas persona, dentro de este orden de ideas, aportamos que para ser un buen orador se necesita confianza en si mismo, para así transmitir esa confianza al público y que el mismo no desconfíe de las palabras del orador, cabe considerar, que un buen orador cuida su imagen, dando importancia a su vestimenta, manera de hablar y otros aspectos que ayudan a portar una buena presencia en el escenario.

Oratoria - Relacionarse - Confianza.

Para comenzar, sabemos que el ser humano en esencia es un ser social, es por ello, que necesita confiar en si mismo y perder ese miedo de socializar, antes de hablar tiene que tener una comunicación intrapersonal; la misma se refiere a comunicarse consigo mismo en forma de pensamientos, después, transmite esa información que eligió como adecuada para darla a conocer a una o mas personas, la cual llamamos comunicación interpersonal.

Cabe destacar, que algunas personas no nacen con ese talento especial para comunicarse e influir en los demás, pero la persona que desee conocer y aprender el arte de hablar en público; llamado “Oratoria”, tiene que estar dispuesto a someterse a un entrenamiento inteligente y tenaz, desarrollando con ello habilidades nuevas que le ayudaran a asumir actitudes más favorable en lo personal.

Por ultimo, el poseer una oratoria eficaz trae como beneficio personal lo siguiente; aumenta la confianza en uno mismo, te da oportunidades de liderazgo, prestigio y estatus, oportunidades de relacionarse, y dinero; Siendo estos beneficios la clave para alcanzar el éxito en la vida y sentirse realizado en la misma.

Capítulo I: La Comunicación Humana.

Al empezar en el capítulo I se explica que el humano es en esencia un ser social y por ello es alguien que necesita mantener relaciones grupales para no sentirse solo, desde temprana edad el hombre cuando es niño, necesita aprender a expresar lo que siente y desea, para así poder lograr satisfacer sus necesidades.

También se nos explica que no siempre el hombre se ha comunicado mediante palabras, por esa razón, el hombre tubo que desarrollar órganos relacionados con el sonido de la voz, como lo son las cuerdas vocales, los huesos maxilares y los músculos que permitían el movimiento de las partes responsables del habla, para así tener la capacidad de expresarse mediante palabras y dejar atrás las expresiones por medio de señales.

Por otro lado, a parte de esa evolución para producir sonidos con la voz, el hombre evoluciono también su cerebro, poseyendo así la capacidad mental de designar objetos con ciertos sonidos, luego les dio nombres con los cuales los relacionaba, todo esto para evitar confundir objetos al producir un sonido mediante su voz.

Seguidamente, D. P. Gorki investigador de la evolución del lenguaje humano, señala que pasaron más de 800mil años para que el hombre tuviera la capacidad de decir palabras y pequeños grupos de palabras, que tendrían sentido en forma de oración; por eso, es increíble que un simple ¡Hola! Sea el producto de miles de años de transformación evolutiva.

Cabe considerar, por otra parte, que antes de decir algo primero lo pensamos, esto quiere decir, que lo comunicamos primero a nosotros mismos lo cual se llama comunicación intrapersonal; la misma se define como la comunicación de “A” con “A” y se denominan pensamientos, de los cuales posteriormente se tomará lo más conveniente para ser transmitido a una o más personas, y esa sería la comunicación interpersonal.

Para estos tipos de comunicación es importante tener en claro quiénes somos, que podemos ser, nuestro valor y lo que merecemos; y es por ello, que en la comunicación intrapersonal creamos una autoimagen para luego tener una comunicación interpersonal y abrirse al mundo en fórmulas diversas de interacción.

Desde este punto de vista, se puede decir que la comunicación interpersonal representa la mejor posibilidad de que los seres humanos agrupados en sociedad se influyan y se apoyen mutuamente, a fin de satisfacer sus deseos, intereses y necesidades. Posteriormente, encontramos los condicionantes de la comunicación y se refiere a todos los criterios que se tienen que tomar en cuenta a la hora de comunicarse con otras personas.

Debido a que cada cabeza es un mundo y que cada quien percibe la realidad a su manera se deben tomar en cuenta los siguientes criterios a la hora de comunicarse con otras personas para así evitar malentendidos, esos criterios son los siguientes: Edad, Cultura, Ideología, Circunstancias, nivel económico, comodidad, significados, roles y tradiciones.

Capítulo II: La Oratoria

Seguidamente, en su segundo capítulo llamado “La Oratoria” se define el significado de la palabra que es “El Arte del Buen Decir”, así como también, el fin de la misma; el cual es simplemente la forma de comunicación interpersonal a través del cual una persona (Orador), bajo un serie de actitudes, técnicas verbales y no verbales, influye sobre un determinado grupo de personas (Público), con la intención de que piensen, sientan y actúen de una manera previamente establecida por el orador.

La oratoria tiene con objetivo: Relacionarse, expresarse e influenciar. Cabe destacar, que un buen orador nace pero también se hace, es decir, que el arte de hablar adecuadamente en público, puede aprenderse, solo se requiere desearlo intensamente y someterse a un entrenamiento inteligente y tenaz, obteniendo

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