EL PROGRESO DE LA BARBARIE

EL PROGRESO DE LA BARBARIE

“El progreso de la técnica y la ciencia significa en la sociedad capitalista el progreso en el arte de estrujar a las personas” LENIN

Las líneas venideras serán un ejercicio sobre la idea de progreso, aunándolo con una síntesis personal direccionada por la necesariedad de establecer ciertos limites a tal postulado. Intentare ser lo mas sintético posible, reconociendo que mi forma de escritura se asemeja mas al mundo novelístico que al científico. Una vez que he manifestado que este escrito esta bajo la dermis de la reflexividad desde una perspectiva sociológica, me parece totalmente pertinente en primer lugar realizar un breve acercamiento a como se trata la idea de progreso.

El concepto de progreso se fue construyendo, basado en el alejamiento de la naturaleza, de espaldas a sus límites y dinámicas. El desarrollo tecnológico fue considerado como el motor del progreso, al servicio de una idea simplificadora que asociaba consumo con bienestar, sobre todo en las ultimas décadas, en las que la sociedad de consumo se ha autoproclamado como la solución para todos los problemas humanos. La ocultación de los deterioros sociales y ambientales que acompañaban a la extracción de materiales y generación de residuos, hicieron que se desease aumentar indefinidamente la producción industrial, creando el mito del crecimiento continúo.

La palabra progreso dota de un sentido moral a la evolución sociocultural. Se considera que todas las sociedades de una forma lineal, evolucionaban de unos estadios de mayor atraso (caza y recolección) hacia etapas más racionales (civilización industrial hasta la actualidad: economía de mercado). Siendo esta idea una forma de concebir la historia de los pueblos como un hilo secuencial que viaja del salvajismo a la barbarie para llegar a la civilización, la convicción europea etnocéntrica de constituir la civilización por antonomasia, en la que expoliaron los recursos de todos aquellos territorios colonizados, con el fin de poder alimentar en base a las conquistas sus sistemas económicos basados en el crecimiento, sometiendo mediante la violencia y el dominio cultural a los pueblos colonizados, que se les encasilla como salvajes y en un estadio muy cercano a la naturaleza.

En la actualidad nos encontramos en el mundo de la técnica en mayúsculas, si bien nos ha hecho progresar pero también retroceder, en tanto que nos ha condenado a ese mundo platónico de las sombras.

“Es preciso basar el concepto de progreso sobre la idea de catástrofe. Cuando las cosas siguen como antes, he aquí la catástrofe. No reside en que algo vaya a suceder, sino de que algo ya esta dado en cada situación. ¿Acaso no escribe Strindber en “El camino de Damasco” que el infierno no es algo que nos espera mas allá, sino la vida que soportamos aquí? (Frase atribuida a Walter Benjamin, obtenida de Kaos en la Red)

Nos ubicamos en ese mundo de lo superfluo de la mera apariencia, y el vago conocimiento. “Represéntate hombres en una morada subterránea en forma de caverna, que tiene la entrada abierta, en toda su extensión, a la luz. En ella están desde niños con las piernas y el cuello encadenados… las cadenas les impiden girar en derredor la cabeza…extraños son esos prisioneros. Pero son como nosotros” (Platón)

Todas estas supuestas comodidades y facilidades que el desarrollo científico y tecnológico nos ha dotado no han hecho mas que conformar a un ser humano caprichoso, un niño mimado como se dice vulgarmente hablando. El hombre moderno es un individuo que lo quiere todo aquí y ahora, es un ser consumista, producto de esta sociedad y cultura de masas, en que la capacidad reflexiva y critica brillan por su ausencia, siendo los medios de comunicación o mass media los que piensan, reflexionan por los individuos, incluso les dotan de una identidad, a que mundo hemos llegado y todo por y para la humanidad, irónico resulta todo esto. Los medios de comunicación obnubilan al hombre, en la que muchas veces las imágenes de los acontecimientos que nos ofrecen y también la realidad aparece sesgada, manipulada o tergiversada. “El terror que infundio Stalin acabo con el” (Articulo del ABC del 5 de marzo de 2013).

A juicio de Marcuse:

“La mera supresión de todo tipo de anuncios y de todos los medios adoctrinadores de información y diversión sumergiría al individuo en un vacío traumático en el que tendría la oportunidad de sorprenderse y de pensar, de conocerse a si mismo y a su sociedad “(Marcuse, H)

Los medios de comunicación invaden todo el espectro societal. La radio, la televisión actúan como mecanismo para la estandarización cultural en el mundo, es decir se ha producido una mediocrizacion de la cultura. Los poderes facticos, económicos y políticos saben que haciéndose con los medios de comunicación les posibilita maximizar sus intereses ya sean económicos o políticos, en tanto que manipulan a la población para su propio interés. Entiendo que esto se trata de una dictadura que fabrica la opinión pública según los intereses dados. Los medios de comunicación están impregnados bajo ese desarrollo científico-tecnológico. La tecnología rodea al ser humano de bienes y servicios baratos, metro, vestimenta, aparatos eléctricos que tocando un botón se encienden, este nuevo ser humano no tiene la preocupación de que no haya luz solar o aire que respirar.

Pensando, muchas veces me incluyo en esta terna, que el agua, la luz deben estar porque si, por siempre, ya que al ser humano moderno no se le pasa por la cabeza que eso pueda faltar, entiendo que se piensa que esto es por obra y gracia de la naturaleza de forma espontánea, cuando en realidad no es así, vemos como la idea de progreso ha calado tan hondo que es muy complicado abstraerse de dicha dinámica. Como bien ya explicite en líneas pretéritas, en la civilización actual lo que triunfa es el ser humano vulgar, al que solo le interesan las comodidades, las facilidades y riquezas que la vida les puede otorgar, huyendo del esfuerzo, de la disciplina, del sacrificio como si de algo malo se tratase, se ha producido una adjetivación metafórica en la que la enfermedad se ha extrapolado a diversos ámbitos, siendo este ultimo mentado clasificado como enfermo.

Con la técnica y la tecnología ha surgido un estilo de vida y una manera de percibir el mundo y los objetos, esto es debido a que el desarrollo tecnológico impregna nuestra existencia. Las maquinas nos afectan a todas horas, su precisión, su velocidad, su eficacia dan lugar a un nuevo tipo de humano. Los rasgos básicos de este nuevo ser humano se caracterizan por un ansia de poder, en cuanto solo pulsando unos botones consigue comunicarse con otros lugares. El ser humano de la era informacional, tecnológica es cierto que posee confianza en si mismo, pero no menos cierto que tiene un vacío interior potente, predominando la incertidumbre.

Vivimos en un mundo dominado por la cultura del conocimiento, esto gracias al desarrollo tecnológico y científico, donde entiendo que los individuos deben de ser capaces de diferenciar y seleccionar la comunicación que les llega en forma de mensajes superficiales, así como desarrollar su pensamiento critico. Concibo esto como el paso mas necesario para llegar a otro modelo societal, mas justo, mas humano, donde imperen la cooperación y la solidaridad.

El ser humano actual, quiero remarcar que lo atribuyo al ser humano occidental, solo tiene perspectivas para valorar lo inmediato. El tiempo y el espacio se han acortado teniendo solo valor el presente, el pasado no es, y el futuro no existe. Una de las máximas que reflejan perfectamente esta nueva dinámica en la que nos hemos insertado es la de Carpe Diem, es decir vive el momento. Yo concibo la vida teniendo en consideración al pasado ya que en realidad es lo que nos determina y nos posibilita en cierta forma el tener un cuaderno de bitácora , aun no siendo esto lo predominante , por que la vida es pasado, presente, pero sobre todo esta orientada hacia el futuro, siempre tenemos en mente, bueno, por lo menos yo, que será de mi vida cuando me licencie, encontrare trabajo de lo que he estudiado, estas suposiciones en cierta forma lo que vienen a corroborar es una importancia vital de que la vida debemos concebirla como un guión en el que continuamente debemos de estar innovando, reflexionando, sobre que será lo adecuado en esta breve película que es la vida, no podemos detenernos en las escenas y perpetuarlas, por que de esta forma no estaremos siendo coherentes con nuestro proyecto vital.

El ser humano actual, al ser hedonista solo quiere disfrutar de las cosas y al instante. El consumismo se convierte en una de las caras más oscuras. El sentido de la vida queda polarizado en torno a la posesión de cosas, es decir se ha producido un salto, del ser al tener, pues casi todo se mide en función de la capacidad adquisitiva, cuan de triste es este nuevo mundo avistado y potenciado por esta idea de progreso.

Lo que la gente busca es distinción, adquiriéndose cosas de marca, bastardos!, ya que esto son signos de posición económica, es decir, de status. Todos estos productos son artificiales, hemos pasado como dije en líneas previas, de una lógica del ser a otra del tener, valorando más el continente que el contenido. No reniego que en cierta forma el progreso lo que nos ha dotado es de muchos avances, pero lo mas importante es que parece que hemos vendido nuestra alma al diablo, la desazón que emana de todas las dinámicas preexistentes no hacen mas que mantenerme en la idea de que todo esto que se ha conformado es una patraña, en la que se ha producido una alienación del ser humano mas que palpable,

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