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CASO PRÁCTICO MEDIACION FAMILIAR.

Mila y Membu son pareja de hecho y han estado conviviendo juntos dos años y medio. Del fruto de dicha convivencia ha nacido un hijo que tiene actualmente un año de edad. La relación se inició porque coincidieron en un trabajo de cooperación internacional y de ayuda a inmigrantes. Al mes y medio de conocerse decidieron convivir juntos, por lo que Mila abandonó la vivienda en régimen de alquiler que tenia arrendada y se trasladó a la vivienda que ocupaba Membu, igualmente en régimen de alquiler, donde este vivía con otros dos hijos de otras anteriores relaciones, en concreto una hija de trece años llamada Witi y un hijo de diez años de edad llamado Bulu.

Mila es de nacionalidad ucraniana y se trasladó a España hace cinco años y Membu es de nacionalidad guineana y lleva residiendo en España ocho años. La edad de Mila es de 28 años y la de Membu 31 años.

La relación de ambos desde el inicio fue muy intensa y por ello decidieron vivir juntos tan pronto. Cuando Mila se trasladó al domicilio de Membu a vivir al poco tiempo comenzaron las diferencias siempre motivadas por la relación con los dos hijos de Membu, fundamentalmente las peleas que se producían entre Mila y la hija Witi. Esta situación provocaba discusiones entre Mila y Membu porque Membu intentaba justificar siempre a Witi aún cuando delante de Witi hacia valer la figura de Mila pero entre ellos Membu reprochaba su actitud a Mila.

Para crear un clima de mayor tensión apareció en escena la madre de Mila, la cual, decidió quedarse a vivir con Mila y Membu. Desde el principio Membu y la madre de Mila no tuvieron ninguna afinidad y las discusiones de la pareja se dificultaron porque esta siempre intervenía.

En este clima de conflicto continuo Mila se queda embarazada y ella parece provocar una tragedia en la vida familiar ante la llegada de un nuevo miembro a la familia. Durante el tiempo del embarazo Mila y Membu tiene mayor afinidad e intimidad al no verse perturbada por el resto de los miembros de la familia.

Cuando nace el niño, la situación vuelve a cambiar. Witi se vuelve rebelde y se niega a colaborar en casa manteniendo una actitud de reto a Mila. La madre de Mila muestra un sentimiento de posesión desmesurado respecto a su hija, lo que provoca nuevamente discusiones constantes con Membu. Estas situaciones de conflicto se reproducen diariamente hasta que un día se produce una discusión entre Membu y la madre de Mila que termina con fuertes insultos y forcejeo entre ellos.

A partir de ese momento Mila se posiciona a favor de su madre y Membu se posiciona a favor de sus hijos. Hablan entre ellos sobre lo insostenible de la relación y Membu decide poner fin a la relación indicando a Mila que le va ayudar a buscar una vivienda de alquiler para que se traslade con el hijo de ambos lo antes posible, quedándose en la vivienda familiar hasta que la encuentren.

Una tarde de sábado mientras toda la familia se encuentra en casa se produce la llegada de la policía al domicilio, requiriendo a Membu para que acuda a la comisaría por una denuncia de malos tratos formulada por Mila.

Membu es trasladado a la comisaría donde permanece detenido 36 horas, quedando posteriormente en libertad. Se remiten las diligencias al juzgado de guardia donde se abre expediente citando inmediatamente a Mila y a Membu para la declaración del juicio con solicitud de orden de protección.

Ambos solicitaron abogados del turno de oficio y pocos minutos antes de entrar a la sala Mila se pone a llorar y le pide perdón a Membu por lo sucedido, le dice que va intentar retirar la denuncia y que ella ignoraba que pudiera ir a la cárcel. Los abogados le comentan que no debe de decir que la denuncia era falsa y lo que deciden es pactar con el Fiscal la pena mínima.

Tras el juicio, Mila pide Membu que lo vuelvan a intentar por el hijo que tienen en común. Membu expresa su deseo de continuar adelante con la separación, pues no puede perdonarle lo que le ha hecho sufrir con la denuncia de los malos tratos. Por ello, propone a Mila acudir a un mediador que les ayude a llegar a acuerdos respecto de la relación que han de mantener con su hijo. Entre tanto, el juzgado dicto resolución acordando orden de alejamiento y medidas civiles y resolución con pena de ocho meses. La orden no se esta cumpliendo pues ambos continúan residiendo en el mismo domicilio en compañía del resto de familiares.

Mila y Membu acuden a mediación a fin de intentar alcanzar un acuerdo.

Posición de Mila:

• Ella en el fondo no desea la separación.

• No admite la figura de Witi y su petición durante el tiempo de convivencia es que la niña regresará a Guinea con su madre.

• La figura de su madre es intocable y no acepta las recriminaciones de Membu respecto a ella.

• Esta arrepentida de haber formulado la denuncia por malos tratos y en varias ocasiones así lo manifiesta.

• Su solicitud fundamental es que Membu podrá estar con su hijo siempre y cuando no estén los otros dos hijos de Membu presentes. La condición que pone es que si Membu esta con sus hijos las visitas se realizarán en presencia de Mila.

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