EMPEZAR BIEN EL DIA

omo te quedaste dormido porque te desvelaste la noche anterior y luego sonó el despertador y utilizaste el típico "otro ratito", en la hora límite te paraste de un brinco de la cama, te bañaste como si estuvieras en competencia de velocidad y saliste de tu casa al tráfico matutino rumiando hambre y sueño.

Al llegar a tu trabajo, tu primera acción del día es lógica: Necesitas café para poder funcionar.

¡Perfecto! Lograste empezar tu día de la peor manera. Abriste la caja de Pandora y te espera una jornada llena de bostezos, mal humor, estrés y, obvio, bajo rendimiento laboral.

¿Cómo hacerle para dejar esa serie de eventos matutinos desafortunados en el pasado?

Los 10 tips que debes seguir para lograr que a media tarde tu cuerpo y tu cabeza no te respondan por sueño y cansancio. Ojo: seguirlos paso a paso no debe tomarte más de una hora.

1. EMPIEZA CON LA CENA

Si crees que para tener un buen día debes comenzar en la mañana, error. Para mantenerte alerta durante tus actividades del día, debes dormir bien y para conseguirlo debes procurar ingerir una cena ligera que tu organismo pueda procesar fácilmente.

Un sandwich, una ensalada, fruta o yogur son algunas opciones recomendadas para cenar, pero, ¡ojo!, debes hacerlo unas dos horas antes de ir a la cama, para así dejar que el organismo haga digestión y evitar la pesadez durante el sueño.

Por otro lado, quedarte sin cenar no es bueno pues de hacerlo el estómago se queda sin actividad por un periodo largo de tiempo.

2. ESTABLECE UNA RUTINA

Para que tu cuerpo descanse de verdad es importante que establezcas un horario lo más fijo posible para dormir y despertar.

Hay que ser rutinario, no cambiar horarios. Dormirse a la misma hora y levantarse siempre igual es muy bueno para el organismo porque éste se acostumbra a estar ciertas horas en reposo.

Además, cuando por alguna razón no se durmieron todas las horas de costumbre es necesario que se recuperen con una siesta.

Los adultos en promedio duermen 8 horas y los adolescentes hasta 9 y media, pero depende de cada persona encontrar su horario.

3. DESPIERTA CON MúSICA

La alarma de tu despertador no sólo interrumpe tu sueño sino que te espanta y hasta te hace despertar segundos antes sólo para apagarla y no tener que escuchar su sonido del espanto... Arregla eso cambiándola por una música de tu agrado. Así tendrás un despertar más tranquilo y reparador.

Aunque no está comprobado que el sonido que se usa para despertar tiene efecto en el rendimiento de la persona, es más agradable y suave despertar con música. Sin embargo, si descansaste bien, no debes tener necesidad de usar una, pues tu cuerpo ya sabe biológicamente a qué hora despertar.

Es bueno que no te levantes de inmediato. Así que no dudes en poner pausa a la alarma, pero no hagas más de tres veces ese gustito.

4. ESTíRATE COMO GATO

Para empezar bien el día no hay nada mejor que estirarse.

Estírate como si fueras un gato que acaba de despertar por la mañana. Imagina que puedes alcanzar el techo o cualquier cosa muy lejana, pues es la única forma en la que tus músculos despierten y se relajen.

Cuando dormimos, aunque nos movemos, permanecemos mucho sin actividad física y hay que activar el cuerpo. Es como hacerlo antes de ejercitarse; además el estiramiento también se debe repetir en cualquier momento del día, especialmente después de estar mucho tiempo sentado, para relajar los músculos.

5. NO ABANDONES LA CAMA DE UN BRINCO

Si eres de los que pegan un brinco para salir de la cama al sonar el despertador, malas noticias,

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