Educacion Especial
Enviado por alvarezlo • 27 de Febrero de 2014 • 1.311 Palabras (6 Páginas) • 236 Visitas
La atención a los niños Preescolares con Necesidades Educativas Especiales desde hace varios años, se ha manifestado en nuestro estado a través de un servicio de apoyo del Programa Nacional de Fortalecimiento a la Educación Especial y de la Integración Educativa, mediante el Centro de Atención Psicopedagógica de Educación Preescolar (C.A.P.E.P.)
Su objetivo es promover la integración de los niños y las niñas con Necesidades Educativas Especiales con o sin discapacidad al sistema regular, brindando una enseñanza de calidad que corresponda a la diversidad de la población mediante apoyos en el contexto escolar, familiar y social. Este servicio se proporciona a los niños y niñas preescolares que asistan a los Centros de Desarrollo Infantil (CENDIS) o Jardines de Niños oficiales o particulares incorporados. .
En la actualidad, la mayoría de los CENDIS o Jardines de Niños cuentan con servicio de apoyo de C.A.P.E.P. Las educadoras juntamente con las especialistas realizan el diagnóstico de las necesidades de los niños observados y determinan que estrategias de atención van a emplear con cada niño y si la atención que requiere es directa o indirecta.
En los CENDIS o Jardines de Niños que funcionan en el turno vespertino, la mayoría de las educadoras no cuentan con el servicio de apoyo de C.A.P.E.P., por lo que deben envía a los niños con una solicitud de atención, una hoja de diagnóstico y una copia de la entrevista que realizaron con los padres y con el niño, así como una copia de la C.U.R.P., acta de nacimiento, cartilla de vacunación, carnet cuando cuentan con servicio médico y una copia del resultado de estudios complementarios médicos y/o psicológicos a los Centros de Atención que les Corresponda.
Debido al tipo y al ritmo de vida que la mayoría de las familias enfrentan actualmente, existen diversas situaciones que causan en los niños un desequilibrio emocional que se refleja en su conducta en la escuela, algunos presentan problemas por factores familiares, ya sea porque sus padres los consienten mucho o hay demasiado rigor paterno o, en algunos casos, sufren de falta de afecto en su hogar. Todo esto ha ocasionado que incontrolablemente el porcentaje de niños que presentan alguna necesidad educativa especial haya ido en aumento, haciendo insuficiente el número de especialistas destinados para apoyar en la educación preescolar.
Por lo general, los jardines de niños que tienen la fortuna de contar con el servicio de C.A.P.E.P. gozan de la visita de la especialista (si tienen suerte), 2 veces por semana y de la psicóloga 1 vez cada 15 días, ya que a cada psicóloga le corresponden 8 jardines de niños.
De antemano este es un panorama muy poco alentador, puesto que la detección y canalización de
los niños con algún tipo de N.E.E es un proceso un poco largo, y aunado a las pocas horas de las especialistas en cada centro de trabajo y al número de niños que deben atender, nos lleva hasta el mes de noviembre o diciembre para empezar a darle el seguimiento correspondiente a cada caso.
Pero esto no es todo; si en nuestro centro de trabajo existe alguna situación especial en donde el niño requiera un apoyo extra escolar, por lo general las especialistas, después de realizar las evaluaciones pertinentes lo canalizan a al CREE o directamente al CAPEP. para que reciba la atención adecuada. Esto sería el procedimiento normal., pero, ¿que deben hacer las maestras de educación especial, si después de tanta burocracia para canalizar a los niños y de traer a los padres de familia por aquí y por allá, las instituciones que deberían respaldarlas les niegan la atención alegando sobre cupo? ¿ Es justo que los padres de familia, que en la mayoría de las ocasiones son gente de escasos recursos gasten sus pocos centavos en ir de institución en institución como pelotas de ping pong y perdiendo día a día las esperanzas de que su hijo reciba la terapia que necesita?
Son muchísimas las familias que han pasado por esto, al igual que las y los especialistas, quienes se sienten frustrados por la labor que realizan con tanto profesionalismo y empeño la ven truncada en el punto final del camino.
Con ánimos
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