El Bulling

La violencia, acoso escolar o mejor conocido como bullying, se refiere a cualquier acto mediante el cual una persona trata de controlar a otra empleando la fuerza física, psicológica, económica o sexual. Su objetivo es reafirmar el poder del agresor y ejercer control sobre la víctima.

Este fenómeno se trata del acoso escolar que puede darse por diferentes clases de maltrato: agresiones físicas, amenazas, burlas, insultos o aislamiento. Utilizando cualquier recurso con el objetivo de someter a alguien a una situación de inferioridad y humillación.

Con respecto a esto debemos cuestionarnos: ¿Qué ocurrirá en la vida de estos niños y jóvenes, hombres y mujeres, que en lugar de pasar su tiempo en la escuela jugando, se dedican a agredir a sus compañeros? ¿Qué está pasando con los padres de estos niños y con la sociedad en general? ¿Por qué este fenómeno se acrecienta cada vez más? ¿Por qué la violencia en edades tan tempranas?

Con respecto a esto me permito mencionarles que la mitad del daño que se hace en este mundo es obra de individuos que quieren sentirse importantes, personas que no les importa el daño, no les interesa, no lo ven o lo justifican porque están enfrascados en la interminable batalla de pensar bien de sí mismos.

El tema era absolutamente inadvertido en la escuela tradicional, y hoy en día aún sigue siendo ignorado. Por ello es importante difundir el tema así como las formas de actuar ante estos abusos. Ya que muchos niños y niñas inteligentes y responsables, son víctimas de acoso y llegan a desarrollar fobia escolar al grado de temer ir a la escuela.

Detrás del bullying hay gran parte de agresividad, envidia, necesidad de poder y autoestima baja de quienes agreden, sólo basta analizar los siguientes datos para darnos cuenta de la gravedad del problema, pues encuestas realizadas por el instituto de la juventud revelan que 1.6% de los niños y jóvenes sufren bullying de forma constante y un 5.7% lo vive de forma esporádica. Que el 16% de niños y jóvenes reconoce haber participado en burlas o agresiones psicológicas a otros compañeros. Y por otro lado el (IDEA), indica que un 49% de los estudiantes dice ser insultado o criticado en la escuela y que un 13.4% reconoce haber pegado a sus compañeros.

Ahora bien, las víctimas del bullying desarrollan rechazo, miedo al entorno donde sufren la violencia, perdida de autoestima, tristeza, disminución del rendimiento escolar y si el acoso es continuo; depresión, ansiedad y tristeza. Y por parte de los agresores se ve disminuida su capacidad de empatía, actúan sin ponerse en el lugar de la víctima a la que atacan. Se produce una conducta inadaptada violenta de agresión y rabia hacia otra persona.

Una buena familia es el primordial factor para que estas cosas dejen de ocurrir. Esta en los padres de cada niño agresivo hacer que las condiciones en las que se encuentran sus hijos cambien, ya que son la principal fuente de amor que tienen y el modelo a seguir.

Cada uno de nosotros debemos aprender a no ser parte de ello, pues agredir es la peor defensa de una persona y un hombre es lo que hace con lo que hicieron de él.

A partir de esto podremos construir una sociedad mejor, sin violencia, sin delitos y con mayor seguridad. Hoy es otro el acosado, mañana puedes ser tú. No olvidemos que el que guarda silencio no declara contra sí mismo. Y finalmente, los exhorto a recordar un lamentable hecho que sirva de reflexión, pues es acertadísimo que hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces; pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos."

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