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El Octavo Hábito Encontrar la propia voz e inspirar a otros a encontrar la suya


Enviado por   •  28 de Julio de 2017  •  Ensayos  •  2.254 Palabras (10 Páginas)  •  310 Visitas

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El Octavo Hábito Encontrar la propia voz e inspirar a otros a encontrar la suya

De Stephen R. Covey

INTRODUCCIÓN

La obra de Stephen Covey, el octavo hábito consiste en encontrar su voz e inspirar a los demás para que encuentren la suya, uno de los aprendizajes más importantes en la vida del autor ha sido que si uno quiere hacer una nueva contribución, tiene entonces que hacer una preparación personal de una forma totalmente nueva.

El mundo ha cambiado y ha iniciado la Era de la Información y el Conocimiento dejando atrás pero aun como un paradigma establecido, a la Era Industrial. En esta última se sostenía que la gente no era más que un insumo, por lo tanto eran tratadas como cosas y no como individuos integrales dotados de corazón, mente, cuerpo y espíritu, eran como objetos que debían ser controlados y de los cuales se debía desconfiar.

Para entender el concepto de hábito y la nueva dimensión que el octavo hábito aplica a los siete de la gente altamente exitosa, es necesario que empecemos por una descripción de lo que puede ser el hábito y un breve resumen de los 7 hábitos que mejora el desempeño de cada individuo.

Yo soy tu más fiel compañero. Soy tu mayor apoyo o tu carga más pesada. Te empujaré hacia delante o te arrastraré al fracaso. Estoy totalmente a tus órdenes. La mitad de las cosas que haces podrías pasármelas a mí, y yo las haría rápida y correctamente. Se me puede manejar con facilidad: sólo tienes que ser firme conmigo. Enséñame exactamente cómo quieres que haga una cosa, y al cabo de unas pocas lecciones lo haré automáticamente. Soy el servidor de todos los triunfadores y, desgraciadamente, de todos los fracasados también. Con los que eran fracasados, he producido fracasos. No soy una máquina, aunque trabajo con toda la precisión de una máquina unida a la inteligencia de un ser humano. Puedes usarme para obtener beneficios o para arruinarte, a mí me da igual. Tómame, enséñame y sé firme conmigo y pondré el mundo a tus pies. Sé blando conmigo y te destruiré.

¿Quién soy? Yo soy el Hábito. (Anónimo)

Los 7 hábitos:

  1. Ser proactivo (responsabilidad, iniciativa). Las personas proactivas son agentes de cambio y eligen no ser víctimas, no ser reactivas y no echarle la culpa a los demás.
  2. Empezar con un fin en mente (visión, valores). No vivir el día a día sin tener un propósito claro.
  3. Establecer que primero lo primero: priorizar (integridad, ejecutividad). Vivir según los principios que uno valora, no presionado por la agenda ni por lo que es urgente.
  4. Pensar en Ganar/Ganar (respeto mutuo, beneficio). Pensar en términos de abundancia y oportunidad, más que en la escasez y la competencia de los adversarios. No ser egoísta ni mártir.
  5. Procura primero comprender  después ser comprendido (comprensión mutua). Balancear las dos facetas.
  6. La sinergia (cooperación creativa). Sinergia es la tercera opción, no mi manera, no tu manera, sino una tercera manera que es mejor para los dos. ES la clave para cualquier relación efectiva.
  7. Afilar la sierra (renovación). Renovar constantemente las cuatro áreas básicas de nuestra vida: física, social-emocional, mental y espiritual.

TESIS O PROPOSICIÓN

Los Líderes son por elección más no por posición y su autoridad es moral. En la Era de la Información y el Conocimiento ellos deben inspirar a la gente a encontrar su voz, su pasión y talento único en armonía con las necesidades humanas y la conciencia para que las fortalezas de algunas personas se vuelvan productivas y sus debilidades se vuelvan irrelevantes a través de las fortalezas de los demás conyugadas a los principios de las organizaciones.

DESARROLLO

Encontrar nuestra propia Voz

Covey explica que encontrar nuestra voz supone cumplir con nuestro potencial interior. Es decir: encontrar aquel trabajo que verdaderamente aproveche nuestro talento y alimente nuestra pasión. “Después de la vida misma, la facultad de elegir es nuestro mayor don”, somos el producto de lo que elegimos ser, es innegable que la genética, la cultura, el entorno influye, pero el ser humano tiene la capacidad, dispone del poder y la libertad de elegir.

La capacidad para entender nuestra libertad para elegir nos abre la puerta a cuatro inteligencias, haciendo referencia que las personas son personas completas: Cuerpo, mente, corazón y espíritu. Siendo así tenemos cuatro inteligencias: “Nuestro Cuerpo, nuestra Mente, nuestro Corazón y nuestro Espíritu” al igual que tenemos cuatro necesidades “Vivir, Amar, Aprender y Dejar un Legado”.

Conozcamos un poco de nuestras Inteligencias:

PQ La inteligencia Corporal: No tiene relación con la conciencia, pero responde constantemente al ambiente para mantenernos saludables, libres de infecciones, etc.

IQ La inteligencia mental: Conocida como la inteligencia por excelencia.

EQ La inteligencia emocional: Es el factor de mayor influencia en nuestro éxito. Para poder comunicarnos bien con los demás es preciso que seamos diligentes, sensibles y empáticos. Una persona con un EQ alto sabe qué decir y cuando hacerlo.

SQ La inteligencia espiritual: La inteligencia más importante por ser quien dirige las actividades de las otras tres.

Todas estas necesitan ser honradas, respetadas, integradas y colocadas en un todo sinérgico, al hacerlo el ser humano encontrara su propia voz y a su vez también puede inspirar a otros a encontrar su propia voz.

Covey menciona que los medios principales para expresar nuestra voz, son las capacidades humanas:

  • Para la mente “La Visión”. Es ver con los ojos de la mente lo que son capaces las personas, es ver su potencial.
  • Para el cuerpo “La Disciplina”. Es pagar el precio para lograr traer la visión a la realidad, es luchar para lograr lo que se quiere.
  • Para el corazón “La Pasión”. Es el deseo, el fuego, es la intensidad de querer algo, es la convicción, es el estar convencido, esta sostiene a la disciplina, para alcanzar la visión.
  • Para la espiritualidad “La Conciencia”. Es el sentido moral interior que nos guía y nos dicta que es bueno o malo, es lo que sirve de guía para dirigir la visión, la disciplina y la pasión.

“Cuando la conciencia gobierna las demás, el liderazgo permanece y cambia el mundo, el entorno y lo mejora. Donde los talentos y las necesidades del mundo se cruzan, ahí está nuestra vocación”. (Aristóteles)

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