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El Papel De La Mujer En La Sociedad


Enviado por   •  16 de Febrero de 2012  •  3.634 Palabras (15 Páginas)  •  1.496 Visitas

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El papel de la mujer en la sociedad

Nuestra sociedad se ha construido a lo largo de la historia basándose demasiadas veces en formas injustas y desiguales de distribuir el poder. Color de piel y sexo han sido y son parámetros para clasificar a las personas. Ambas cuestiones sirven para justificar muchas formas de opresión y sometimiento. La mirada sobre un “otro” inferior a quien despreciar fue ampliamente sostenida desde teoría pseudo- científicas y creencias religiosas tristemente muy difundidas y aceptadas.

A lo largo de la historia, la mujer ha sido ignorada en su condición de ser pensante, y fue considerada un ser dependiente e inferior al hombre, negándole la posibilidad de participar en la política, el arte, la cultura y cada ámbito de la vida humana, y reduciéndola a la realización de las labores domésticas y la crianza de los hijos. Revisaremos los procesos que han llevado a la liberación de la mujer, que creemos, aun no es total.

Para querer un cambio debe haber una toma de conciencia. Para que el cambio exista debe haber una revolución, una modificación del orden establecido.

Para rastrear estas cuestiones planteadas realizaremos lecturas de algunos libros y ensayos que dan cuenta de estos temas, investigaremos en páginas de Internet que abren miles de posibilidades, casi infinitas de conocer movimientos y grupos de personas que luchan por un mundo más justo. Luego concluiremos en la reflexión sobre nuevas formas de opresión, que se difunden y profundizan desde los medios masivos de comunicación.

Las preguntas iniciales que guiarán nuestros pensamientos son ¿realmente la mujer se ha liberado, o es sólo un simulacro? ¿El machismo terminó o adquirió nuevas formas? Si aún continúa, ¿cómo lo hace? ¿Por qué no hemos logrado una real igualdad? Muchas leyes para favorecer a la mujer se han sancionado ¿cuáles son entonces los intereses que sostienen el sexismo, la misoginia, la violencia contra la mujer?

El histórico papel de la mujer en la sociedad.

Desde los comienzos de la historia la mujer ha sido, indefectiblemente, un objeto subordinado a la voluntad del hombre. Muchos argumentos se han esgrimido para sostener la supremacía de la condición masculina, por supuesto ninguno razonable.

Sin embargo, y aún a falta de verdades, el hecho de considerar a la mujer inferior, es algo que sucedió a lo largo de toda la historia.

En la sociedad siempre han existido formas de regular y controlar la sexualidad mediante normas y restricciones. Pero especialmente estas normas se han encargado de limitar la autonomía y la libertad de la mujer.

En la civilización occidental ha tenido un gran peso la herencia judeo-cristiana con el agregado de la herencia greco-romana. Increíblemente es posible rastrear testimonios escritos en antiguas leyes, en libros considerados sagrados, como la Biblia y en frases esgrimidas por grandes intelectuales que aunque ahora nos resulten chocantes, resumen la historia de la misoginia y al conocerlas se puede comprender por qué estas ideas están tan arraigadas en el imaginario de la gente aun hoy.

Por ejemplo dice en la Biblia, el Eclesiástico, Capítulo XXV:

“Ligera es toda maldad comparada con la maldad de la mujer/caiga sobre ella la suerte de los pecadores(…) Por la mujer tuvo principio el pecado/ y por ella morimos todos”

La culpa, siempre esa marca heredada de aquella lejanísima pero constante figura de Eva, la que comió del fruto prohibido. Se acusó durante siglos, se quemaron vivas millones de mujeres acusadas de brujería, se justificó la violencia sobre ellas. Pero por supuesto esta idea no se restringe a la Biblia judeo-cristiana. Dijo Confucio, filósofo chino:

“El marido tiene derecho a matar a su mujer. Cuando una mujer se queda viuda debe cometer suicidio como prueba de castidad…”.

La legislación sumeria aseguraba:

“La mujer que se niega al deber conyugal debe ser arrojada al río”

El filósofo griego Aristóteles, padre de varias ciencias, y autoridad intelectual respetada durante cientos de años, justificó “científicamente” la supuesta inferioridad femenina: aseguraba que la mujer era un ser defectuoso, producto de una equivocación de la naturaleza, ya que el cuerpo perfecto era el masculino.

“De la mujer puede decirse que es un hombre inferior”

“La naturaleza sólo hace mujeres cuando no puede hacer hombres”

Creía que durante el acto sexual la mujer era sólo un receptáculo, que la vida la transmitía el hombre y que lo “normal” era la producción de bebés varones.

"La hembra, ya que es deficiente en calor natural, es incapaz de preparar su fluido menstrual al punto del refinamiento, en el cual se convierte en semen (es decir, semilla). Por lo tanto, su única contribución al embrión es su materia, un campo en el cual pueda crecer. Su incapacidad para producir semen es su deficiencia". 2

Sólo nacían mujeres cuando se producía un problema en la concepción, “un exceso de calor”. Estas teorías sirvieron para justificar durante años la opresión sobre el llamado “sexo débil”. Se consideraba que el hombre tenía justificado su dominio porque la naturaleza le había dado una inteligencia superior. Sólo el hombre era un ser humano completo. Decía también Aristóteles:

"La relación entre el varón y la hembra es por naturaleza aquella en la que el hombre ostenta una posición superior, la mujer más baja; el hombre dirige y la mujer es dirigida".

Muchos años después otro libro sagrado, el Corán (siglo VII d.C) , llegaba para profundizar aún más la misoginia:

En la sociedad medieval el matrimonio era un trato entre familias, en el que el amor no era importante sino que intervenía el interés económico. Las jóvenes debían aceptar ser entregadas (podríamos decir vendidas) a otra familia, a cambio de una dote. La virginidad era el máximo valor para ellas, con el riesgo de ser repudiadas y devueltas si no cumplían con esta condición.

Su intimidad era vigilada para evitar algún “contrabando genético”. Lo importante era asegurar el apellido y la continuidad del linaje. De allí proviene el famoso cinturón de castidad que se colocaba a las esposas cuando el marido debía viajar. Lo increíble es que si uno busca en Internet información sobre el cinturón de castidad,

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