Ensayo El Arte De Amnar

Muchas personas han tratado de definir al amor como algo que simplemente existe en la naturaleza, como un objeto al cual se le puede describir de tal forma que deja de ser desconocido y pasa a ser parte del conocimiento del hombre pero, ¿qué es realmente amar?, ¿Por qué el hombre busca con tanto fervor éste sentimiento dentro de sí mismo en los otros?.

Creo que la respuesta más apropiada a ésta pregunta es que las personas buscamos la manera en la que podamos ser plenamente felices, y en ésta búsqueda hemos encontrado que el amor es una de las mejores maneras en las que se puede satisfacer ese deseo por alcanzar ésta felicidad.

Pero ¿qué es el amor? En nuestra actualidad hemos visto que las personas deformamos lo que creemos que es la máxima manifestación de amor con algunas banalidades y sin realmente ponernos a pensar, aunque sea por unos momentos a que nos referimos cuando decimos que amamos a alguien.

Muchos de nosotros teníamos le creencia de que debemos ser amados por los demás sin para un momento a recapacitar y darnos cuenta que realmente lo que necesitamos es nosotros amar a los demás, es común que creamos en aquello que el mundo capitalista nos ha inculcado, teniendo ideas en las cuales el rico, “guapo” y poderoso es aquel a quien se le facilita el poder amar sin darnos cuenta que el amar está sujeto al factor humano, en el cual todos y repito todos podemos ser tratados de la misma manera sin distinción de ningún tipo y tendemos a pensar que es más difícil encontrar a alguien que nos ame ya que, según nosotros, se nos es fácil amar. Tendemos a creer que enamorarse es alcanzar el amar, pero se nos olvida que el ser humano es en parte animal y el enamoramiento cumple con ésta parte de él en la que, con el paso del tiempo, tiende a desprenderse de él y volver a su estado anterior en el cual, la persona de al lado deja de ser tan atractiva y necesaria, lo cual crea desilusiones amorosas y con ello se llega al estado en donde podemos darnos cuenta que realmente no sabemos amar.

Erich froom nos menciona que existe una parte del ser humano la cual busca quitar un sentimiento al cual él llama separatidad, el cual no se puede expresar de otra forma que el miedo o necesidad de las personas de tener a alguien con quien poder sentirse cohesionado y dejar a tras sus sentimientos de soledad. Es apartado lo considero de gran reflexión ya que es cierto que desde antes de que llegáramos a éste mundo, propiamente dicho así, nos hemos encontrado en relación y necesidad de los demás para poder ser felices. En un principio el feto dentro de la madre necesita todo el tiempo de ella para poder crecer y desarrollarse de manera adecuada, sin ella simplemente no nacerá, en la siguiente etapa del desarrollo el niño depende de sus padres, aunque en un sentido mayor de su madre, para poder aprender del mundo en el que vive de manera adecuada y así poder desenvolverse. En esta manera nos podemos ir dando cuenta que desde el principio no sólo de la vida, sino también del ser humano, éste ha buscado ser uno con alguien ya sea una persona o hasta un ente como el hecho de la urgencia de tener un Dios dentro de su cultura al cual adorar y poder sentirse uno con él.

Fromm habla de la existencia de una manera banal de poder sentirse completado consigo mismo sin el real encuentro con otro. Él lo llama estado orgiástico, en el cual ya sea induciéndolo por medio del acto sexual, o por algún tipo de narcótico, el hombre podía por algún tiempo olvidar que tiene esa necesidad de paridad y ser completamente feliz. No considero que las personas que incurren a éste tipo de actos sean plenamente felices en ese momento, ya que tanto el orgasmo como las drogas son sólo la inclusión de químicos dentro del cerebro los cuales provocan ese “estado de felicidad”, pero como puedes comparar algo tan maravilloso como el poder amar a alguien como a ti mismo con un estado eufórico, tal vez en ese momento la persona pierde conciencia de sí misma, y para poder ser feliz plenamente se necesita estar consciente de ello, por eso no considero que las dos situaciones anteriores se puedan agregar a las formas de felicidad del ser humano.

Otra de las maneras en las que hemos incurrido, según Fromm, en la felicidad relativa, es en el momento en el que nos encontramos en un grupo y somos sumisos hacia éste y llegamos a la creencia de que realmente somos felices al ver que los demás también lo son. En este punto no se puede decir tampoco que somos felices y nos sentimos amados ya que el grupo simplemente sigue lo que dicta una mayoría o algún líder dentro de ella dejando de lado nuestra capacidad de elección libre sobre lo que realmente nos interesa y no nos damos cuenta de ello debido a que no

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