Eutanasia

1. AUTORA:

Sandra Ramírez Gonzales

2. DESTINATARIO:

Este texto va dirigido a las familias que algún día se encontraron en la disyuntiva de decidir sobre la vida de un ser querido o dejar cumplir la voluntad de Dios

3. TEMA CONTROVERSIAL:

La eutanasia: ¿A que llamamos muerte digna? Y ¿Quién decide sobre nuestras vidas?

4. PROPOSITO:

Concientizar a la humanidad sobre la vida y la relación de ésta con DIOS.

5. ESTRUCTURA:

5.1 INTRODUCCION:

Para el ser humano la idea de la muerte provoca inherentemente en su conciencia un sinónimo de dolor. Dolor físico, dolor espiritual y un dolor que lo inclina indefectiblemente a preferir la muerte. La pérdida inminente de la vida ,que trae consigo un desasosiego por la soledad , la perdida de las facultades mentales y físicas, la depresión ,el abandono de los familiares, y la continua desatención de una política en sanidad que busca aminorar los esfuerzos para el sostenimiento de la vida por simple economía fiscal , entre otros, son algunos de los factores determinantes para que el paciente terminal e incluso aquellos que aún no lo son boguen por su derecho a la disposición de la vida, en razón a su calidad de vida o de reclamación de morir con dignidad

5.2 POSICIONES

Entre los argumentos a favor de la eutanasia encontramos a la posición médica, ésta señala que la dignidad de un ser humano está delimitada por decidir cuando un paciente debe morir, tomando en cuenta el sufrimiento por cierta enfermedad así como la aprobación del enfermo en caso tuviese las facultades de manifestar su deseo o, de los familiares. El derecho a morir con dignidad es un derecho que asiste aciertos seres humanos muy desgraciados, que ya no quieren seguir viviendo porque su existencia esta degradada, no por el sufrimiento, sino por la decrepitud biológica, la invalidez dependiente, la demencia insensible, la soledad sin consuelo. No se trata ya de liberarse del dolor, sino de una vida que se juzga indigna

La muerte es un evento natural. Algunas veces Dios permite que una persona sufra mucho antes de que la muerte llegue; otras veces, el sufrimiento de la persona se acorta. Nadie disfruta del sufrimiento, pero esto no justifica el determinar que una persona está lista para morir. Con frecuencia, los propósitos de Dios son cumplidos a través del sufrimiento de una persona. “En el día del bien goza del bien; y en el día de la adversidad considera, Dios hizo tanto lo uno como lo otro, a fin de que el hombre nada halle después de él.” (Eclesiastés 7:14) Romanos

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