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Gerencia Y Liderazgo

elien1 de Junio de 2013

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INDICE

Introducción

Objetivos

Agua potable

5

Usos interiores del agua potable

5

Retretes de bajo consumo

6

Regaderas. Llaves de lavados y fregaderos

7

Lavadoras

7

Detección de fugas intradomiciliarias

7

Usos exteriores a la casa del agua potable

8

Reuso del agua

9

Técnicas de uso eficiente del agua potable

9

Comunicación y educación

9

Fugas de agua de la red

10

Medición

10

Sistemas tarifarios

11

Reglamentación

12

Conclusiones

13

Bibliografía

14

INTRODUCCIÓN

El agua es un recurso imprescindible para el desarrollo de la vida, solo el 0,003 % del volumen total del planeta es agua dulce disponible para el hombre; la contaminación, el mal uso, los costos de captación, trasporte y potabilización lo convierten en un recurso limitado que debe preservarse. En una ciudad promedio se gasta el 71 % del agua potable en las casas, el 12 % en las industrias, el 15 % en el comercio y el 2 % en servicios, mientras el consumo promedio de una persona es de 150 l/día.

La legislación a nivel mundial está reglamentando su utilización para poder conservarlo. Medidas como reuso, tratamiento, regulación, educación, concientización, mantenimiento de redes de trasporte, medición y sistemas tarifarios acordes, logrará su disponibilidad por mucho tiempo. La edificación actual y futura no escapa a esta realidad y es un factor indispensable para la minimización del uso del agua y su futura conservación.

El agua, tanto en cantidad como en calidad, es un elemento fundamental en el mantenimiento del equilibrio de los diferentes ecosistemas terrestres existentes, siendo preciso considerar estas relaciones al proyectar y desarrollar gran parte de las actividades humanas con el fin de conservar el ambiente y hacer un uso sostenible de los recursos hídricos. Una parte muy importante de la población mundial no tiene acceso en la actualidad a agua potable. No es el caso de los países de la Unión Europea, donde la mayor parte de la población sí la tiene. Para ello, se han invertido grandes cantidades de dinero en la creación de infraestructuras para, primero retener y obtener el agua y, en segundo lugar, su potabilización previamente a su distribución (UP, 2004).

Se estima que el volumen total de agua presente en la corteza terrestre y en la atmósfera es de 1.350.106 Km3. La gran mayoría de esta agua, el 97 %, se encuentra en las cuencas oceánicas, por lo que no es directamente accesible para el consumo humano. El 3 % restante se considera agua dulce, aunque también inicialmente inaccesible ya que está, en su mayoría, helada en las zonas polares y en los glaciares o en acuíferos profundos poco accesibles, lo que deja, tan solo, un 0,003 % del volumen total de agua sobre la corteza terrestre directamente accesible para el ser humano (UP, 2004).

En las sociedades desarrolladas actuales, una cantidad muy importante del consumo del agua potable se destina a fines que no requieren una calidad tan exigente como la estipulada para el consumo humano. Estos usos son el riego de parques y jardines, la limpieza y usos industriales. Este hecho pone de manifiesto una evidente ineficiencia en el uso de recursos, dedicándose grandes inversiones en infraestructuras para potabilizar el agua que después no van a tener ese uso.

Los principales problemas de abastecimiento de agua potable a los centro urbanos son el agotamiento de las fuentes locales, la contaminación de las mismas, los altos costos de captación y conducción del agua, y los conflictos generados por los intereses de diferentes usuarios sobre las fuentes. Paradójicamente, ante esta difícil situación, en las ciudades ocurren grandes porcentajes de fugas, se utilizan tecnologías derrochadoras de agua, no se rehúsa este recurso, los sistemas de facturación y cobranza son deficientes, las tarifas por el servicio frecuentemente no cubren los costos del suministro y existe poca conciencia ciudadana (Cortés, 1991).

OBJETIVOS

• Mencionar los principales usos del agua potable en las residencias.

• Describir algunas medidas de ahorro de agua potable en la edificación.

AGUA POTABLE

El agua potable es aquella incapaz de transmitir enfermedades, libre de toxicidad, de concentraciones excesivas sustancias minerales y orgánicas; agradable a los sentidos y apta para el consumo humano (Díaz, 2003).

Generalmente es un recurso escaso y susceptible de contaminación por las aguas negras procedentes de los inodoros cargadas con materias fecales; y las aguas grises provenientes de cocinas y lavamanos con grandes cantidades de detergentes, restos de alimentos y materia orgánica (Kestler, 2004). En las casas los usos del agua pueden clasificarse en interiores y exteriores. Los domicilios que tienen jardines pueden llegar a utilizar el 50 % del agua potable en cada tipo de uso (Cortés, 1991).

La reutilización, la depuración mediante cadenas tróficas y el retorno al ambiente en óptimas condiciones son los principios que rigen la gestión del agua en la bioconstrucción (Kestler, 2004).

El consumo de agua en las viviendas es un factor de gran importancia ambiental. En primer lugar se debe utilizar algún sistema de ahorro de agua en la cisterna del inodoro, sistemas de reducción de caudal de agua en la grifería de los aparatos sanitarios de ducha, lavado y fregadero, tener grifería monomando que incorpore algún sistema de ahorro de consumo de agua y la utilización de grifería termostática, que permite seleccionar la temperatura adecuada de consumo sin necesidad de manipular la grifería.

Se recomienda utilizar algún sistema de detección de fugas de agua en las tuberías enterradas u ocultas permitiendo controlar desde el primer momento el problema y poder dar solución más rápidamente. También es indicado aislar térmicamente las tuberías de agua fría y caliente, sobre todo en instalaciones colectivas y cuando estas pasan por espacios ventilados o descubiertos, pues se evitan muchas pérdidas de calor en las tuberías de agua caliente.

Asimismo se ha de considerar la instalación de captadores solares para la producción de agua caliente sanitaria con sistemas auxiliares convencionales de apoyo.

Otra medida a tener en cuenta a la hora de planificar un edificio es diseñar instalaciones de saneamiento diferenciadas para aguas limpias y aguas negras, de esta manera podrán aprovecharse las aguas limpias de lluvia, por ejemplo para riego, y se debe considerar la posibilidad de proveer a la vivienda de instalaciones de recogida y aprovechamiento de las aguas grises provenientes de lavadoras, lavados o bañeras para el llenado de las cisternas de los inodoros. En este caso se ha de disponer de un buen sistema de tratamiento de agua almacenada que garantice las calidades higiénicas para su reutilización (Alfonso, 2003).

USOS INTERIORES DEL AGUA POTABLE

Los dispositivos domésticos para el uso eficiente del agua potable tienen un papel primordial para el ahorro de agua, en una casa puede utilizarse hasta 35 % del consumo interior en los excusados, 30 % en las regaderas, 20 % en las lavadoras de ropa, entre 3 - 10 % en las llaves de fregaderos y lavados, y 5 % en las lavadoras de trastos.

El consumo promedio de agua potable de una persona es de 150 l/día (Cortés, 1991; Reyes et al, 2002).

RETRETES DE BAJO CONSUMO

Los inodoros tradicionales utilizan de 16 a 20 l por descarga, lo que significa un consumo promedio de 80 l diarios por habitante; los de bajo consumo que funcionan con 6 l por descarga pueden reducirlo a 30 l diarios por habitante.

La búsqueda por ahorrar agua en estos dispositivos ha llegado a la utilización de tanques presurizados que funcionan conectando la línea de alimentación al tanque que está cerrado herméticamente (SIT, 1991), con lo cual la carga de presión dentro del mismo puede ser igual a la diferencia de nivel de la superficie libre del agua en el tinaco y la del tanque del excusado, o a la presión de la red de abastecimiento, lo que mejora la eficiencia del retrete y reduce la cantidad de agua a niveles inferiores a los 6 l por descarga (Cortés, 1991).

El agua de las duchas, bañeras y lavamanos se puede reutilizar para el tanque del inodoro, donde las aguas grises son almacenadas en un depósito acumulador y por medio de tubería de PVC el agua es conducida para la alimentación del tanque del inodoro.

En la reutilización de aguas grises se necesita una mayor seguridad en su manipulación, por lo que se recomienda la depuración físico – químicade las aguas procedentes de duchas, lavamanos y bañeras, la colocación de una malla fina que sirva como tamiz para no permitir el ingreso de sólidos y la aplicación de cloro que desinfecte el agua del depósito ya que está se encuentra contaminada (Kestrel, 2004).

El agua consumida por duchas, bañeras y lavadoras es canalizada hasta el depósito de aguas grises, situado en el lugar más idóneo de la casa, como una bodega o por falta de espacio podría ir enterrado en el jardín. Cuando se acciona el dispositivo de descarga de los tanques de los inodoros y se descarga ésta, la bomba que lleva incorporada el depósito acumulador impulsa las aguas grises para volver a cargar los tanques de los inodoros (Kestrel, 2004).

Existen tipos de excusados que llegan al extremo de no utilizar agua, como los biológicos y los incineradores

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