Guia Elaboracion De Tesis

Guía para la elaboración de un protocolo de tesis

Cristina Romo Gil

Para preparar un proyecto de tesis es necesario responder con claridad las siguientes preguntas, lo cual no significa que se incluyan como tales en el documento que dé cuenta de lo que se hará.

1) POR QUÉ

2) QUÉ

3) QUÉ LOGRARÉ CON HACERLO. PARA QUÉ

4) CON QUÉ

5) CÓMO

Por qué

Corresponde a la justificación. Se trata de encontrar las razones que hacen necesaria la realización del estudio, indagación, investigación, descripción, análisis, comparación, producción. Es el planteamiento del problema o asunto que se resolverá con llevarlo a cabo.

Para fundamentar un proyecto de tesis es necesario revisar la literatura disponible que se relacione directa o indirectamente con el objeto de estudio. Se trata de poner un marco que ubique el asunto a tratar y de dar cuenta del estado que guarda el estudio o tratamiento que se le ha dado al tema. En términos técnicos, es necesario llevar a cabo un estudio del estado de la cuestión.

Con bastante frecuencia, la razón para hacer un trabajo de tesis responde solamente a los gustos, inclinaciones o a las ganas de abordar un tema que parece fácil o único o novedosísimo; sin embargo, no se ha hecho una indagación para averiguar si ese tema da de sí para justificar el esfuerzo.

En términos generales, podemos decir que el trabajo mayor que hay que darle a un proyecto de tesis está en este planteamiento. Si está claro el marco del asunto, será muy fácil resolver los demás puntos.

Es el momento de identificar las áreas de interés personales, de descubrir aquellos temas que me pueden, realmente, motivar a llegar al final; aquéllas en las que ya me he interesado antes y he ido recopilando información, de lo que he leído y sé que puedo seguir procesando información.

Es la oportunidad de encontrar el enfoque de los que puedo hacer; de plantear los alcances y limites del trabajo.

Resumiendo: la justificación es simple y llanamente el planteamiento del problema.

Qué

Es el objeto de estudio, el tema o el aspecto preciso del tema; la oportunidad de decir lo que se hará. Es una definición que nos permitirá fijar objetivos, escoger instrumentos metodológicos, seleccionar los planteamientos teóricos que nos ayuden a hacer la investigación. Abrir la expectativa sobre el texto final.

Se trata de hacerle preguntas al objeto y seleccionar las que permitan construirlo como tal, para, de ahí, formular los objetivos.

Es plantear el trabajo a partir de un verbo que defina una acción precisa que delineará todo el trabajo:

analizar, describir, comparar, plantear, denunciar, exponer, producir, ...

¿De dónde sacar un buen tema de tesis?

La mejor manera de planteárselo es leyendo y revisando lo que se ha hecho. Tenemos el CDC a disposición.

Es necesario pensar en temas amplios, para luego irlos cerrando. A la inversa es prácticamente imposible.

Los buenos temas de tesis son los que se plantean como objeto de investigación, no los que se piensan como manuales de operación y de producción. Son aquellos que se formulan como sistematización de información dispersa o los que producirán un conocimiento nuevo, aunque sea modesto.

Por supuesto que la elección del tema tiene que ver con los intereses personales, con los gustos, pero eso, no siempre da buenos temas de trabajo recepcional. Al tiempo que se piensa en el tema se ha de pensar en lo que se puede hacer en términos metodológicos.

Qué se logrará con hacerlo

En términos prácticos es el objetivo general, que a su vez se puede traducir en objetivos particulares.

Con frecuencia se confunde el objetivo con el objeto y se repite el mismo enunciado que se puso como objeto. Por ejemplo: “Hacer un análisis de los noticieros radiofónicos de Guadalajara” o “Hacer una comparación entre los noticieros”. La pregunta obligada cuando me presentan este tipo de objetivos en el proyecto es: “¿Qué vas a lograr con hacer ese análisis o esa comparación?”

Es necesario plantear objetivos de los cuales se podrá dar cuenta en las conclusiones. Es decir, si se lograron o no se lograron. Si ahora sabemos algo que al principio no se sabía; si el hecho de haber analizado algo nos permite tomar decisiones; si la comparación realizada nos da un conocimiento más sistematizado de algo.

La pregunta que nos ayuda a plantear buenos objetivos es la que responde a la intencionalidad. ¿Para qué? Para qué quiero lograr esos objetivos, qué se modifica, qué se puede hacer, después de tener ese resultado.

El objetivo debe plantearse en términos verificables; de lo contrario no habrá relación entre el planteamiento del objeto

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