Higiene Neonatal

Higiene del Recién Nacido.

Su primer Baño:

El baño es parte del cuidado del bebé y de su higiene pero, a la vez, el contacto de las manos con el cuerpo proporciona al bebé estimulación táctil que ayuda a establecer conexiones neuronales participando de forma importante en el desarrollo y la maduración neuronal del niño. Además, es un momento de contacto íntimo entre los padres y el recién nacido, un momento para jugar con los niños y niñas, limpiarlos con suavidad y estimularlos.

Y aunque no existe una pauta fija de cómo poder realizar este procedimiento, sino recomendaciones basadas en las experiencias, cultura, costumbres y clima de cada lugar, se debe tener algunas precauciones a considerar antes de disfrutar junto a su bebe:

• El primer baño se debe preparar con anticipación a fin de prevenir accidentes. Es de gran utilidad que antes de desvestir al niño e introducirlo en la bañera, se deje todo lo necesario; Shampoo, jabón neutro, toalla (de preferencia con gorrito), un pañal limpio y una muda nueva a mano, evitando salir de la habitación.

• Se sugiere incentivar que ambos padres participen de este momento, impidiendo todo objeto de distracción (televisores, celulares, etc.), sin desatender al niño y procurando no dejarlo NUNCA solo.

• El baño se debe efectuar en una bañera plástica pequeña, colocada en un lugar tranquilo, seguro y cómodo, libre de corrientes de aire y a una temperatura ambiente adecuada (24°C).

• El agua no debe estar ni muy fría ni muy caliente (36°C). Su temperatura se controla con el antebrazo o el codo de |los padres. No se recomienda utilizar la mano del adulto, ya que resiste temperaturas extremas que son inadecuadas para el lactante.

El baño del recién nacido(a) debe iniciarse tres a cinco días después que haya eliminado el cordón umbilical y esté seca la zona de desprendimiento.

A la hora del baño, es importante crear una intimidad con el bebe, hablarle y sobre todo sujetarlo bien con las manos hasta que se muestre confiado en la bañera.

Pasos a seguir:

Antes de realizar el baño de inmersión, se deberá lavarla la cabecita del bebe cuando él aún esta vestido. Aplicar Shampoo neutro, enjuagar y secar.

1. Llene la bañera con 5 u 8 cm de agua, empezando con el agua fría y siguiendo con el agua caliente. Probar la temperatura (como se mencionó anteriormente) hasta lograr la adecuada: tibia.

2. Desnude al bebe y levántelo para introducirlo en la bañera, sosteniendo su cabeza y sus hombros con una mano y sus piernas con la otra. (Importante: La forma de introducir al bebe en el agua debe ser lenta y paulatina, para así no provocar estrés y dar tiempo a que se adecue al cambio).

3. Una vez en la bañera, tomar al bebe por debajo de la axila, a fin de producir seguridad en él.

4. Lavar su cuerpo suavemente, comenzando por la cara y oídos. Seguir por el cuello, tórax, extremidades superiores, abdomen y espalda (para lo cual, deberá sentar al bebe en la bañera). Finalmente, terminar en las extremidades inferiores y genitales.

5. Para sacar al bebe de la bañera, alzar la cabeza y los hombros de él con una mano y pasar la mano libre debajo de sus nalgas. Levantarlo y envolverlo en una toalla (resguardando la cabeza del bebe, ya que es por esa zona donde pierden

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