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Intensidades De Labranza


Enviado por   •  11 de Enero de 2014  •  4.084 Palabras (17 Páginas)  •  266 Visitas

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Evaluación de diferentes intensidades de labranza y fertilización orgánica en cultivo de maíz (Zea mays) en Querétaro.

Objetivos

• Evaluación de labranza de conservación en una parcela de maíz con cuatro años continuos bajo labranza cero.

• Determinar qué tipo de abono orgánico retiene más humedad.

Objetivos específicos

• Determinar la densidad de población existente bajo diferentes tratamientos de intensidades de labranza.

• Comparación de humedad del suelo bajo diferentes intensidades de labranza y fertilización orgánica en el cultivo de maíz, así como la altura de planta.

Introducción

La agricultura convencional o moderna es un sistema de manejo agrícola que se basa en el uso intensivo de insumos y maquinaria, está forma de producir ha demostrado al pasar del tiempo, su agresividad sobre los agroecosistemas y la alta destrucción del ambiente debido al abuso con los agroquímicos (fertilizantes químicos, herbicidas, insecticidas, fungicidas, fitorreguladores, nematicidas entre otros) los cuales se acumulan en los mantos freáticos, suelos, agua, atmósfera, representando una amenaza para la vida, por su alto grado de toxicidad (Fundación Produce Nayarit, 2013).

La degradación de los suelos debido a los procesos de erosión y compactación, es posiblemente el principal problema ambiental causado por la agricultura convencional, otras actividades como la quema de rastrojos y el laboreo intensivo del suelo, producen emisiones contaminantes a la atmósfera lo cual reducen la capacidad de almacenamiento de nutrientes en el suelo (CONAF, 2003).

En los últimos años, la labranza de conservación se ha promovido como una alternativa viable para revertir la degradación de los recursos naturales, causada por la erosión del suelo, principalmente. Esta práctica, por sus características de conservación de suelo y agua, tienen amplias posibilidades de ser implementada en gran parte de la superficie agrícola de México. La clave del éxito de esta tecnología, consiste en dejar suficientes residuos (rastrojo) sobre la superficie del suelo, ya que del grado de cobertura que se tenga dependerá la dimensión del proceso erosivo; además al descomponerse los residuos del cultivo estos aumentan el contenido de materia orgánica y aportan nutrimentos al suelo (Tiscareño-Lopez, et al., 1999).

Este tipo de labranza es un concepto en el uso y manejo de los suelos, el cual permite sembrar cualquier tipo de grano sin remover o labrar el suelo. En él se reemplazan herramientas tradicionales de trabajo como el arado, rastras, cinceles y cultivadoras por sembradoras capaces de cortar rastrojos y raíces, remover una línea de siembra para dejar la semilla adecuadamente ubicada en el suelo.

Su característica principal es que el suelo se disturba al mínimo posible; de esta manera, los residuos vegetales no se incorporan al mismo, dejándolos sobre la superficie, los cuales cubrirán al suelo como un mantillo, en razón de que el movimiento del suelo es minimizado, este conservará su estructura natural, permitiendo que el espacio poroso y su continuidad, se mantengan intactos. Además, el mantillo reducirá la insolación y disminuirá el impacto de las gotas de lluvia, así como la evaporación y el encostramiento (Lal, 1999).

En la Agricultura de Conservación se utilizan los abonos orgánicos, con fines agricolas como el estiércol, las compostas y residuos de cultivos, así como la lombricomposta ya que el suelo no sólo es el sostén de las plantas, sino que es la fuente de nutrición de las mismas y es ahí donde se llevan a cabo las transformaciones de los elementos nutritivos a través de la biodegradación y mineralización de la materia orgánica. El nitrógeno (N) es uno de los elementos más importantes en la nutrición de las plantas, no sólo por su función dentro de ellas y la cantidad demandada, sino por su costo económico, ya que a pesar de su abundancia en la naturaleza las plantas lo absorben y aprovechan mayormente en forma de nitratos y amonio (Salisbury y Ross, 1994; Gallegos-Vázquez et al, 2000).

Marco Teórico

En México, el maíz (Zea mays ssp. ) forma parte de nuestra alimentación diaria, es el cultivo de mayor presencia en el país, constituye un insumo para la ganadería y para la obtención de numerosos productos industriales, por lo que desde el punto de vista alimentario, económico, político y social, es el cultivo agrícola más importante (SIAP 2008), además México es su centro de origen y aquí se concentra la mayor diversidad de maíz (CONABIO, 2008).

Ante el pronóstico de que el cambio climático afectará negativamente las cosechas, el sustento y el modo de vida de los agricultores de escasos recursos, el uso de prácticas agricolas productivas es de vital importancia. En México, recientemente (2007), se puso en marcha un proyecto basado en la Agricultura de Conservación (AC), cuyo objetivo es generar y difundir investigación estratégica y adaptativa sobre las prácticas de la AC, que podría ayudar a detonar una revolución en la agricultura y mejorar la seguridad alimentaria (SAGRAPA, 2007).

El sector primario en Querétaro genera 2 239,744 toneladas de productos, donde la producción de maíz forrajero es la que tiene una mayor participación a nivel nacional al aportar 6.8%. Uno de los municipios más importantes en cuanto al subsector agrícola es: San Juan del Río, con 21.7% de la producción de maíz en grano (Sirce, 2008).

Para el productor mexicano, la práctica de más de 5 siglos de agricultura tradicional es un concepto y una forma de vida productiva que está completamente arraigada, por lo tanto se hace preocupante esta situación, no sólo el pequeño productor actúa de esta forma ante la propuesta de sistemas de producción sustentable, la mayoría de los técnicos de campo, funcionarios del sector Agropecuario, Instituciones Educativas y Proveedores de Insumos o Maquinaria Agrícola responden con resistencia y temor, generando comentarios sobre la Agricultura de Conservación como por ejemplo: Cero Labranza es igual a Cero Cosecha, Labranza de Conservación es igual a suelos sucios por la “basura” (rastrojo) que se deja como cobertura, siembra directa es igual a trabajo de flojos a quienes no les gusta trabajar sus suelos, labranza mínima es igual a problemas de muchas

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