LAS BACRIM EN SANTA MARTA

Situación en la Ciudad de Santa Marta u otras ciudades de Colombia invadidas por” las Bacrim (Bandas Criminales)”: Surgimiento, caos y un combate de nunca acabar.

Desde que se inició el desmantelamiento del movimiento paramilitar Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) a fines del 2003, el conflicto armado en Colombia ha experimentado cambios importantes. Junto con la desmovilización de casi 32.000 miembros de las AUC; se han visto el surgimiento de nuevos grupos de bandas criminales tales como Águilas Negras y Organización Nueva Generación (ONG).

Ciertas características tienden a identificar a los distintos grupos. La Organización Nueva Generación (ONG) de Nariño parece haber heredado una estructura más militar de su predecesor, el Bloque Libertadores del Sur (BLS) de las AUC; el Bloque Cacique Arhuaco de la Sierra Nevada de Santa Marta también está controlando territorio con métodos militares. El grupo dirigido por “Codazzi” en el Magdalena y algunos miembros de la Contrainsurgencia Wayúu, liderada por “Pablo” en la Guajira, parecen haber eludido la desmovilización y conservan la estructura de bloques que tenían bajo el Bloque Norte (BN) de las AUC. Los grupos menos cohesionados no tienen una cadena de mando clara, como sucede con las Águilas Negras en Norte de Santander. Son frecuentes las luchas entre facciones, que solían caracterizar al Bloque Catatumbo de las AUC en Norte de Santander 57. Los grupos urbanos utilizan estructuras menos compactas para conformar redes económicas ilícitas y cuadrillas de sicarios en Cúcuta, Medellín y Barranquilla. Las Águilas Negras parecen estar operando en la costa atlántica como grupos criminales urbanos, por lo menos iguales de peligrosos que sus predecesores de las AUC. Según defensores de los derechos humanos, existen pruebas de comunicaciones entre ellos, incluida una reunión entre “Salomón”, con su base en Barranquilla, y las Águilas Negras del Magdalena. Se cree que el presunto comandante “Negro Rojas” de las Águilas Negras de Santa Marta está asociado con los comandantes “5-5” y “5-7”. Sin embargo, las fuerzas de seguridad de la región creen que las Águilas Negras son grupos armados que operan con independencia, y que utilizan el nombre genéricamente para inculcar temor entre la población.

En este momento es prioridad de la Policía Nacional acabar con estas bandas delincuenciales por orden expresa del presidente de la Republica; estas se han convertido en un problema social, ya que delinquen extorsionando, asesinando traficando con drogas, trata de blancas, desapariciones forzadas, secuestros, atracos, despojos de casas y fincas, contrabando de gasolina, etc., lo que ha llevado a que se viva en una constante zozobra.

Una ardua investigación en la que participaron la Policía Fiscal y Aduanera, miembros del CTI de la Fiscalía, con el apoyo del servicio de inteligencia del Ejército Nacional,

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