LENGUAJE Y COMUNICACION
marielba15174 de Abril de 2013
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INTRODUCCIÓN
Tomando en consideración la correcta interpretación en los argumentos jurídicos, nosotros los alumnos hemos tenido la oportunidad de poder hacer algunas investigaciones sobre la prosodia para fines de poder interpretar correctamente nuestro lenguaje como futuros hombres derecho, egresados de la casa de estudios como es la Universidad Tecnológica presento ante su digno despacho el presente trabajo que contiene temas referentes A LA PROSODIA DENTRO DE LA GRAMÁTICA.
De modo que desde el inicio de la existencia del hombre ,ha sentido la necesidad de comunicarse, de expresar sus sentimientos, de cultivar su imaginación y lo ha hecho por medio de un don que lo diferencia del resto de los seres vivos: LA PALABRA. Pero la palabra puede utilizarse de distintas maneras como la escritura para lo cual existen reglas y parámetros gramaticales
I. LA PROSODIA.-
Hablamos de Gramática como el estudio de los elementos de la lengua y sus combinaciones. Entendemos por gramática de la oralidad, el estudio delsonido que pretende ser lingüístico: la organización del hilo fónico a través de un conjunto de mecanismos de naturaleza prosódica o suprasegmental. Sin estos mecanismos sería muy difícil hacer de ese continuo fónico algo inteligible. Cuando se hacen análisis gramaticales se parte, generalmente, de la escritura y de todo aquello que podemos ver, dejándose de lado la manera como se organiza el sonido, para que sea perceptible la estructura profunda de la lengua. Debido a esta razón creo necesario dedicarle algún espacio a este conjunto de elementos prosódicos básicos, que pudiéramos considerar como los principios elementales de la organización de la lengua hablada.
Estos elementos supra-segméntales, los que están más allá del segmento, lejos de constituir un adorno, son precisamente los que organizan el hilo de sonido que percibimos Si el sonido no estuviera agrupado de manera significativa, no habría comunicación lingüística; se oirían gritos o murmullos, a lo sumo. El oyente recibe, cuando se comunica lingüísticamente, segmentos sonoros relativos a las unidades de información que le envía el hablante. Con el sonido, va una serie de informaciones de naturaleza prosódica, no solamente con información referencial sino también con información dialectal, sociolingüística e inclusive, emotiva.
Si bien hay consenso sobre el hecho de que la prosodia está más allá de las unidades segméntales, no lo hay en cuanto a cuáles de los mecanismos forman parte de ella. En realidad, parece más un problema de nomenclatura que de otra índole.
Al percibir el habla, tenemos una melodía conformada por las variaciones de frecuencia del fundamental pero al mismo tiempo sentimos ritmo, pausas, intensidad y otros elementos fónicos. Para algunos autores, la prosodia o entonación se compone de todos estos elementos (Quilis, 1993; Obediente, 1998). Para otros, la entonación está conformada por todos esos elementos que "suenan" con el fundamental y es sólo uno de los elementos de la prosodia.
II. SUSTANCIA DE LA PROSODIA
Los parámetros físicos que conforman la prosodia constituyen a su vez, su sustancia. En la terminología de Hjelmslev, la sustancia es la materia o el sentido, moldeados luego por la forma con miras a la significación. Ahora bien, ¿cuál el alcance de la prosodia y cuál su sustancia?
Quilis (1981) considera que la reducción de la prosodia a la entonación, o sea a la curva melódica del habla, implica también su reducción a la sustancia de la expresión; mientras que su extensión al conjunto de elementos prosódicos implica la consideración de la forma de la entonación y por consiguiente, también su definición como un signo lingüístico. Según este autor, hay una cara de la prosodia que es solamente expresiva, con la que podemos manifestar enojo, alegría, etc. Pero hay otra cara que implica un nivel de señalización más abstracto y eleva la prosodia a la categoría de signo lingüístico, como veremos más adelante en este capítulo (cf. también Obediente 1998; 208-209). Aún aquellos fenómenos de índole emotiva dejan de ser instintivos y se integran en la lengua de forma esquematizada Así dice este autor: "La forma, o estructura de la entonación, viene dada por ladescripción lingüística, que debe establecer el número de elementos que integran ese nivel y examinar sus relaciones y sus funciones. La sustancia es un continuo en el que hay que delimitar las unidades de entonación para obtener elementos discretos y establecer así sus patrones melódicos y la naturaleza de sus elementos"
Ahora bien, ¿cuál sería la sustancia de la prosodia? Aquellos parámetros físicos que la conforman: la frecuencia fundamental, o entonación, la duración y la intensidad. Todos ellos contribuyen a la percepción de la prosodia de modo que aún cuando el fundamental descienda levemente, una elevación en la intensidad se percibe como un tono levemente ascendente .Pertenecientes a la sustancia de la prosodia serían también otros elementos derivados de la vibración de las pulsiones laríngeas: la pausa, el acento y la sílaba. La sílaba es la unidad rítmica pulsional alrededor de un núcleo silábico. El acento es la prominencia acústica de una sílaba
Las pausas, por su parte, son las interrupciones o detenciones de la información que hacemos cuando hablamos o leemos en voz alta. Delimitan losgrupos fónicos, o sea aquellas porciones del discurso comprendidas entre dos pausas. Los grupos fónicos no coinciden necesariamente con los grupos prosódicos, que, además de estar delimitados por pausas, pueden estarlo por las inflexiones del fundamental. Estos grupos prosódicos se denominan también unidades entonativas o unidades de entonación.
La prosodia constituye, entonces, la infraestructura rítmica de la lengua hablada, su organización en el tiempo, y contribuye a facilitarle al hablante la retención de ciertos segmentos en la memoria. Podemos ver, que la prosodia está formada por una serie de parámetros que el hablante no percibe discriminadamente, sino como un todo. Ese todo le confiere también una totalidad de significados, que se perciben como un conjunto, pero que podemos discriminar en el análisis.
III. FORMA DE LA PROSODIA
Hasta ahora hemos visto, muy someramente, algunos de los elementos que constituyen la sustancia de la prosodia. Pero no hemos hablado todavía de cómo todo ello contribuye a darle sentido al habla, es decir lo que hace de esos parámetros elementos lingüísticos, es decir, al formar parte del sistemade la lengua y adquieren un valor simbólico.
La forma de la prosodia sería, en este orden de ideas, todo aquello que otorga al sonido valor lingüístico, contrastivo y por ende confiere un sentido que el hablante percibe. Estos contrastes son sistemáticos, como lo son también otros contrastes en la gramática. Si sabemos que la prosodia forma parte del sistema, podemos también hablar de las funciones que cumple:
En primer lugar tiene una función cohesiva o integradora, ya que divide el hilo fónico en parcelas, de modo que el oyente pueda percibirlo como un oleaje. En vez de estar expuesto a todo un mar de información, ésta se le presenta como olas sucesivas, en unidades empaquetadas prosódicamente. Si oyera una cadena ininterrumpida e in modulada, comprendería muy poco porque lo primero que se necesita es ordenar ese enorme conjunto fónico en unidades menores: en unidades de entonación. La entonación integra las palabras en unidades gramaticales Quilis por su parte, considera que el enunciado es decir, la palabra pronunciada con una cierta forma de entonación "está conformado y señalado doblemente: por un lado, por su forma gramatical; por otro, por la entonación. La entonación es, por lo tanto, el recurso más común y el más elemental del enunciado: puede haber enunciados sin forma gramatical, pero sin entonación, no"
Resulta casi intuitivo decir que hay un vínculo entre prosodia y sintaxis. Hay una correspondencia entre el ritmo de una lengua, los grupos sintácticos y los grupos de sentido, como veremos enseguida. Para Halliday, por ejemplo, el grupo tonal representa un segmento significativo del discurso, por ser la manera cómo el hablante lo va organizando, a medida que avanza lo que va .En otras palabras, las unidades de información, las de entonación y las de sentido están estrechamente vinculadas y vienen siendo, para el usuario de la lengua - si bien no lo son para el analista- prácticamente lo mismo.
De alguna manera todo lo anterior se logra a través del empaquetamiento de unidades fónicas o de entonación. También hay otros mecanismos, de contraste, que producen diferencias de sentido. Esto se da cuando la parte final de la frecuencia fundamental, el entonema es descendente o ascendente, lo que depende de la disminución o el aumento de la vibración de las cuerdas vocales. La entonación ascendente representa un enunciado con sentido incompleto, no acabado; mientras que la entonación descendente confiere un sentido completo a lo dicho. Esto parece ser una tendencia universal. La entonación descendente es la entonación no marcada que indica, como dijimos, el término de la comunicación, mientras que la ascendente es la entonación marcada; se puede ver que no está terminada en el caso de la pregunta, donde la respuesta del interlocutor terminará la emisión, dado que pregunta y respuesta forman una díada inseparable. En otro nivel, estas diferencias se convierten de fonológicas en gramaticales, en el sentido de que se interpreta, en español, la entonación ascendente como interrogativa y la descendente en declarativa. No entraremos en mayores detalles en este sentido, solamente queremos
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