La PNP Y El MP En El NCPP

MINISTERIO PÚBLICO Y POLICIA NACIONAL DEL PERU EN EL NUEVO MODELO PROCESAL PENAL

La relación entre el Ministerio Público y la Policía constituye un aspecto fundamental en el nuevo modelo procesal penal, ello bajo los parámetros ineludibles que nuestro ordenamiento constitucional establece.

La coordinación entre ambas instituciones en un factor crítico para la implementación exitosa del nuevo sistema y el cumplimiento de las funciones básicas sobre todo de los Fiscales en el nuevo proceso penal; no obstante ello el panorama que se revela a tres años de la vigencia gradual de este nuevo sistema en parte del territorio nacional, parece ser deficiente, lo que a su vez genera problemas en la consolidación de la dinámica del nuevo proceso.

Las causas de esta situación son variadas y complejas; sin embargo, trataremos de enfatizar algunos problemas específicos que requieren ser confrontados sucesivamente; resultando interesante destacar que este problema presenta dimensiones vinculadas tanto a las funciones procesales del Ministerio Público como a cuestiones de carácter institucional, lo que en definitiva conlleva al impacto de este problema, en el asentamiento del nuevo modelo procesal penal en nuestro país.

La Policía tradicionalmente no ha sido objeto de preocupación por parte de los reformistas, que han centrado su atención tanto en el Ministerio Público como en el Poder Judicial, además de ser una institución a veces antipática para cierto sector de la sociedad, difícil de entender para quienes no tienen una relación cercana con el mundo policial. Esta falta de adecuado conocimiento explica la existencia de la brecha entre el mundo policial y civil, hecho que peor aún encontró su fortaleza durante los periodos de gobiernos no democráticos como ha sucedido en especial en el Perú.

Por ello consideramos que la transición hacia un nuevo sistema procesal, en el cual la relación entre la Policía y el Ministerio Público ha tenido que ser regulada normativamente en un nuevo Código Procesal Penal, ha generado problemas de coordinación entre ambas instituciones. Así, efectivamente uno de los aspectos más problemáticos, ha sido el significado de “director y conductor de la investigación” del Ministerio Público sobre la Policía Nacional, para los efectos de la investigación preliminar; de tal forma que la Policía ha argumentado que esta dirección entra en conflicto con el comando institucional y por otra parte, que ellos, no son una institución que se encuentre bajo la dependencia del Ministerio Público. Del otro lado del escenario, muchos Fiscales entienden que tal dirección, les da un poder total sobre el trabajo policial, sin tener en cuenta la vasta experiencia con la que cuentan algunos investigadores policiales o incluso equivocadamente creen que ello los autoriza a sustituir el trabajo de los mismos, so pretexto de asumir la investigación criminal como una función propia.

Todos estos problemas han tenido una inicial y algo prolongada incomprensión y falta de comunicación entres ambas instituciones y se han traducido en el funcionamiento concreto del nuevo sistema, y esto es así ya que en los programas de capacitación del

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