La Psicología De Los Objetos Cotidianos

La Psicología de los Objetos Cotidianos

“Los seres humanos no siempre se portan con torpeza. Los seres humanos no siempre se equivocan. Pero sí lo hacen cuando las cosas que utilizan están mal concebidas y diseñadas”.

¿Por qué en muchas ocasiones es más fácil entender cómo funciona un aparato complejo como lo es un computador, y no entendemos cómo funcionan muchas cosas sencillas que nos rodean, como lo son puertas e interruptores?

“La psicología de los objetos Cotidianos” es un libro escrito por Donald A. Norman, profesor de ciencia cognitiva de la universidad de California, quien hace crítica a los objetos cotidianos que hacen que en muchas ocasiones nos sintamos “torpes” por no utilizarlos bien, cuando en realidad estos errores cometidos a diario son debido a un mal diseño.

Norman plantea en su libro, que el cerebro humano “está exquisitamente adaptado para interpretar el mundo”; entiende las cosas con recibir una mínima pista; con esta tesis se puede deducir que un objeto bien diseñado es aquel que es fácil de interpretar y comprender, debido a sus pistas visibles acerca de su funcionamiento; mientras que los objetos mal diseñados son aquellos que no transmiten su función, dificultando así su utilización.

Cuando halamos una puerta en vez de empujar, o tropezamos con aquellas que deberían deslizarse, es porque no están transmitiendo claramente su funcionamiento. Aquí se ve reflejado la carencia de uno de los principios básicos del diseño: la visibilidad.

Un objeto bien diseñado no debe necesitar ni de símbolos ni de letreros, si no que su solo diseño debe indicar el mensaje. Si una puerta debe empujarse, el diseñador debe aportar señales que lo demuestren; por ejemplo debería tener una placa vertical por el lado en que se debe realizar la acción y nada en el otro, o que las bisagras sean visibles porque de ese modo mostrara de donde se sostiene la puerta, lo que transmite que es del otro lado donde se debe empujar.

Otro caso que puede inducir a error, es cuando las nuevas funciones no se relacionan con las de nombre “análogo”, de las cuales los usuarios ya están familiarizados. Como se tiende a tener símbolos estándar para ciertas funciones, cuando estos cambian, no va a ser fácil para el usuario entenderlo inmediatamente.

La falta de visibilidad en los objetos provoca que estos sean difíciles de manejar; sin embargo el exceso de visibilidad hace que los objetos se vuelvan intimidantes, al transmitir inseguridad o temor de dañar las cosas por no saber manejarlas correctamente.

Cuando los objetos contienen varias funciones, el usuario debe recurrir al manual de instrucciones que muchas veces es demasiado complejo y como contiene tanta información no toda esta queda en la memoria, lo que produce que parte de estas funciones pasen a segundo plano, por ende se subutilizan los aparatos.

Un ejemplo ilustrado por el autor, es el de una lavadora-secadora, que aunque tenía en cuenta todos los tipos de tejidos sintéticos y naturales, contenía tantos mandos que las personas se limitaban a memorizar solo algunos de ellos.

Contamos con miles de objetos cotidianos, cada uno conformado por varias piezas, y con métodos de funcionamiento y aprendizaje únicos. Esa es la razón por la cual es tan importante su diseño pues en parte el usuario aprende a utilizarlos gracias a la información que transmite el aspecto de los objetos, a la que Donald Norman denomina La Psicología de los Objetos Cotidianos.

Los objetos cada vez se vuelven más complejos; las interfaces se vuelven muy complejas para cosas sencillas por que se van añadiendo nuevos elementos sin eliminar los antiguos; por otro lado, si el número de actos posibles es superior al número de mandos, puede llegar a producirse dificultades. Por ejemplo es más sencillo usar un automóvil con 100 mandos cada uno con una función específica, que un celular con solo 15, pero para realizar una función hay que utilizar varios de ellos, puesto que ningún mando tiene una función concreta.

Por eso la visibilidad en el diseño de un objeto es tan importante; recuerda al usuario respecto a lo que se puede hacer, y permite

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