La abuela Mechita: Un retrato cómico de la familia, el gas y los enredos

¿LISTOS PAL’ BODORRIO?

De: Gustavo Ruvalcaba

DIANA (30 AÑOS, MAMÁ DE PACO Y SUSY)

DOÑA MECHE (60 AÑOS, MAMÁ DE DIANA, ABUELA DE PACO Y SUSY)

PACO (7 AÑOS, HIJO DE DIANA)

SUSY (10 AÑOS, HIJA DE DIANA)

LUCRECIA (40 AÑOS, VECINA 1)

AGRIPINA (35 AÑOS, VECINA 2)

DON ROBERTO (65 AÑOS, SEÑOR DEL GAS)

(Living amueblado, sillones, mesita de centro, lámpara, etc., DOÑA MECHE sentada en el sillón del centro jugando con un celular, pasan PACO y SUSY corriendo y peleando, entra DIANA hablando por teléfono)

DIANA: Aja, sí ya me dijiste eso…

(MECHE se hace la dormida al verla)

DIANA: Tienes que estar aquí a las 4 o no vamos a llegar a tiempo amor… sí, mi mamá ya arreglo a los niños en lo que yo fui al salón… ya estamos listos, bueno, nos vemos en un rato… por favor llega a tiempo (cuelga). ¡Mamá!

MECHE: ¡Ay, Ladrones, me quieren quitar mis cosas!

DIANA: ¡Mamá, soy yo!

MECHE: Ay sí es cierto Dianita hijita, eres tú… uy ¿Por qué tan arregla? ¿A dónde vas?

DIANA: A la boda de Anita mamá, ¡ya te lo dije como cinco veces! No puede ser que se te olvide

MECHE: ¿Ya se va a casar? Qué bueno, tan feíta que está…

(Entran PACO y SUSY corriendo)

SUSY: (grito largo) ¡Mamá!

PACO: (repite muchas veces) ¡Mamá!

DIANA: ¡¿Qué, qué tienen?!

SUSY: Paco le rompió la cabeza a mi muñeca

PACO: No es cierto no seas mentirosa, si ya la arregle mira, como eres chillona

SUSY: Pero se le va a caer otra vez, ¡mamá dile algo!

DIANA: Susy, hijita, si solo es cuestión de apretársela bien, ya no llores… ¿Y tú? ¡¿Por qué todavía no estás listo?!

SUSY: ¡Porqué está bien menso y no se sabe arreglar el solo! Mira mami yo me hice mis chonguitos solita

PACO: (imitándola) yo me hice mis chonguitos, te quedaron bien feos

DIANA: ¡Mamá se supone que los ibas a arreglar!

(MECHE se hace la dormida otra vez)         

PACO: Yo sé cómo despertarla mami… (Haciendo voz de hombre) ¡EL GAAAAAAAAAS!

MECHE: Papucho, ¡¿ya llegaste?! Ay… hijita es que no me dio tiempo, tuve que sacar toda mi ropa para buscar algo decente para la boda

DIANA: ¡Mamá tú no vas a ir!

MECHE: ¿Qué?

DIANA: Ni siquiera te cae bien Anita

MECHE: ¡¿Qué hice para ganarme el rechazo de mi familia Dios santo?! Porqué me pagan así tantos años de sacrificio, me está bajando la presión, no puedo moverme ¡me está dando una embolia hija!

DIANA: ¡Mamá ya basta!, la invitación solo es para cuatro.

MECHE: ¿Pues qué más quieres? Aquí nos completamos rete bien los cuatro y mira que si no quieres llevarlos a ellos tengo dos amigas que siempre están de ánimo para la fiestas ahorita les hablo perame…

DIANA: Somos, Susy, Paquito, Francisco mi esposo y yo…

MECHE: Ya veo… que ingenua fui… ah pero claro si ocupan que les arreglen a los mocosos aquí está su taruguita ¿verdad?, que acá entre nos hijita no le echaste muchas ganas cuando los estuvieron haciendo…

DIANA: ¡Mamá!... Niños su papá ya no tarda en llegar por nosotros, bueno por lo menos tú ya te bañaste Susy

SUSY: ¿Tenía que bañarme antes de ponerme el vestido mami?

DIANA: Dios mío… ¡mamá! Ayúdame con Susy en el baño de arriba, yo voy a bañar a Paco aquí abajo. No queda mucho tiempo y todavía no envuelvo el regalo (mira su reloj) ¡ya son las tres y media!

MECHE: ¡La novela!

DIANA: Ah no, ¡tienes que ayudarme a peinar a Susy!

MECHE: ¿Y si no quiero?

DIANA: Te confisco tu celular

MECHE: Ándale hijita, vámonos para arriba a bañarte y peinarte bien (salen SUSY y MECHE)

DIANA: Ven Paquito

PACO: ¡Amá yo ya me sé bañar solo!

DIANA: No es cierto, siempre usas demasiado shampoo y además dejas un tiradero de agua en todo el baño...

PACO: Ay mami, es que a veces ya estoy en la regadera y ya no me aguanto las ganas y cuando quiero salirme al baño ya no sé si está escurriéndose el agua o la pi…

DIANA: ¡Está bien! Hijito, ya te hemos dicho que eso se hace antes de entrar a bañarse, vente ya vamos.

(Salen de escena)

LUCRECIA: (En off) ¡Vecinaaaaa! (entra a la casa viendo a todos lados) ¡Pues estaba abierto y yo le pase!

(LUCRECIA se pasea por la sala y encuentra la invitación en la mesa)

LUCRECIA: Boda de Ana y Juan… está condenada ya se va a casar, no es posible, y yo aquí con cinco gatos nomás…

DIANA: ¿Quién anda ahí? Lucrecia ¿Qué paso? ¿Qué se te ofrece?

LUCRECIA: ¡Dianita, pues estuve toque y toque y nadie salió a abrirme! Oye pero que guapa, ¿A dónde vas?

DIANA: A la boda de Anita, ¿Tú no vas a ir?

LUCRECIA: ¡Como ves, que no me llego mi invitación! No, si el servicio de correos está pésimo, por eso ya todo se hace “onlains” por el face

DIANA: Pero Anita vino a entregármela aquí a la casa

LUCRECIA: No me digas…

DIANA: Bueno, a lo mejor se le olvido que vives aquí en frente amiga.

LUCRECIA: Sí bueno, igual no podía ir ando bien ocupada, que se me enferma el Misifú y me la paso cuidándolo toda la noche, limpiándole sus ojitos que se le llenan toditos de lagañas y luego me pega chico sustote porqué de repente hace ruidos de moribundo, nomás escucho que le hace (imita ruidos de gato) pero ya me asomo y nomás son bolas de pelo que se le atoran…

DIANA: Bueno Lucrecia, mejor no lo dejes solo mucho rato porqué se puede poner peor

LUCRECIA: ¡Ay Dianita, ni lo mande Dios! Oye ¿qué es esto? Mira que chula invitación, ojalá yo hubiera recibido la mía…

DIANA: Lucre mira, igual y si llegas sin invitación no pasa nada, Anita es nuestra amiga de toda la vida…

LUCRECIA: Pues ni tanto… a lo mejor se enojó por qué no la invite al cumple años del Misifú. Oye pero tú aquí tienes para cuatro invitados, amiga, ¡yo con gusto cancelo mis planes y voy contigo!

DIANA: Ay Lucrecia pero ya tengo quien me va a acompañar

AGRIPINA: (entrando) No me dijeron que había reunión hoy amiguitas…

DIANA: Pásale Agripina…

AGRIPINA: Gracias por la invitación, pero solo vine a aclarar las cosas, estoy muy ocupada con los labores del hogar y me doy cuenta que mis amigas se juntan sin mi

LUCRECIA: Ay Agri, no, para nada, si nada más estábamos platicando tantito

AGRIPINA: Pues la plática ha de estar muy buena, ¡ya llevas más de 10 minutos aquí oye!

DIANA: ¡¿Pues qué hora es ya?! Ay no vamos a llegar a tiempo a la ceremonia

AGRIPINA: ¿Ceremonia de qué?

LUCRECIA: De nada Agri, de nada… (Susurrando) no le digas, se va a querer colar

DIANA: ¡Nadie se va a colar! A la boda de Anita, Agripina, por lo que veo a ti tampoco te invitaron como a Lucrecia

AGRIPINA: Uy y ni quiero ir… ese hombre que se va a casar, fue mío

DIANA: ¿De verdad Agri?

AGRIPINA: Sí, que me lo roba esa… claro, se puso lista, ahorro pal botox, se puso nalga y así pues como no emboba a cualquier hombre, tan tarugos que son…

DIANA: Bueno ya, discúlpenme muchachas, hoy no pueden quedarse a platicar. Lucrecia, ¿a qué venías?

LUCRECIA: ¿Yo? Ay, este…

(Llega Paco cubierto con espuma en la cabeza y ojos y con una bata de baño)

PACO: ¡Mamá! ¡Ayúdame!

DIANA: ¡Ay Paquito! Te dije ya me tiraste todo el shampoo…

(Salen DIANA y PACO)

LUCRECIA: No pues yo voltee por coincidencia a la ventana que da a la calle y vi que llego está muy arreglada, ¿Cómo va a ser que no nos avisó manita?

AGRIPINA: Uy, nada más porqué está si se ve “de clase” ahí la andan invitado a todos lados y ni por caridad quiere llevar a una

LUCRECIA: Ya sé ni va a estar bueno el bodorrio ese de seguro…

AGRIPINA: Sí... ni hablar, aquí se rompió una taza  y cada chango a su mecate

LUCRECIA: Sí…

(Ambas se miran estáticas por un momento)

AGRIPINA: Lucre, hasta acá se escuchan los gritos del pobre Misifú que necesita que vayas a atenderlo

LUCRECIA: No, si lo dejé bien sedado con sus pastillas, para que duerma un rato… ¿tú no dejaste los frijoles en la estufa?

(Comienzan a pelear por la invitación)

LUCRECIA: ¡Suéltala!

AGRIPINA: ¡No, tú suéltala!

(Entra SUSY)

SUSY: Oigan señoras, eso no es de ustedes…

LUCRECIA Y AGRIPINA: ¿SEÑORAS?

...