Los antípodas y los paradigmas

Los antípodas y los paradigmas

El texto de los antípodas, entrega a los lectores la posibilidad de adentrarse al encuentro de dos mundos, los cuales resultan bastante similares en cuanto a la forma y estructuración de la sociedad se refiere. No obstante, poseen una disyuntiva crucial con respecto a los individuos, pues aparentemente, estos seres del mundo recién conocido no tendrían conciencia sobre sí mismos. Por otra parte, es producto de esta condición lo que provoca que estos tengan una tecnología muy avanzada.

A este nuevo mundo, llegan del ya conocido, varios científicos y filósofos reconocidos, quienes actúan de diferente forma ante la disyuntiva mencionada: los primeros, al encantarse con el gran avance tecnológico, comienzan a relacionarse con los nuevos seres para aprender más sobre esta materia, en cambio, los filósofos, caen en una gran incertidumbre acerca de la incapacidad de estos seres de percibirse a sí mismos.

Esto provoca una subdivisión crucial para el desarrollo de la historia: en busca de una respuesta a esta incertidumbre, los paradigmas de investigación de los filósofos se contraponen en, unos esmerarse en buscar la verdad por medio del análisis de las percepciones de estos individuos y, otros, en ir en busca de alguna realidad significativa que les permita saber cuál es la percepción que tienen sobre sí mismos.

Es de esta manera en cómo se desarrolla la historia; un grupo de filósofos esmerándose ciegamente en busca de la verdad y otros tomando caminos desviados dentro de una respuesta de carácter significativo.

Pero, es precisamente este apartamiento dentro de un mismo grupo lo que supone una gran pérdida, pues la contraposición de los paradigmas al momento de ejecutar diversas investigaciones, trae un gran problema en cuanto al complemento que supondrían ambas posturas. Si evaluamos un poco la situación, el enfoque que tenían los filósofos ''moderados'' hubiese incorporado un elemento que hubiera provocado una apertura en los límites que se autopusieron tan férreamente los ''duros'', en su afán de encontrar una verdad empírica.

Si bien, en ocasiones, una búsqueda de una realidad significativa puede provocar dogmatismos, en este caso tan delicado, como lo es la auto-conciencia humana, la búsqueda realizada por éstos hubiese resultado crucial para poder comenzar a comprender qué sucedía con los seres en cuestión y así poder determinar el gran punto de inflexión que diferenciaba a ambas razas. Luego, después de lograr entender aquella diferencia, sería precisa la intromisión de los objetivistas para lograr guiar la investigación hacia una ciencia más empírica acorde con la búsqueda de la realidad.

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