Manzano

La actitud de las personas influye en su entorno que les rodea, es por esto que nuestras actitudes y percepciones hacia nuestros alumnos influyen notablemente en su desempeño escolar.

La actitud de las personas y sus percepciones influye en él y su aprendizaje pero las actitudes que tenemos como maestros impactan en sus aprendizajes ya sea de manera negativa o positivamente.

Cuando trabajas de manera positiva o afectiva influenciamos y estimulamos a nuestros alumnos potencializan sus habilidades y se esfuerzan en hacer sus actividades, esto también ayuda a una mejor convivencia en el aula.

Nosotros como maestros nos alegramos al ver que nuestros alumnos aprenden lo que esperamos y nos incentivamos en buscar estrategias y técnicas de trabajo, y esto hace que nuestros alumnos se motiven, sean participativos, creativos, colaborativos, se entregan en sus actividades, respetan las reglas de convivencia con sus compañeros, hay un ambiente de convivencia y existe una comunicación favorable.

Pero cuando no cambiamos la percepción negativa de nuestro trabajo y lo hacemos toxico, tendremos en los niños una falta de valores tienen poca motivación, participación no hay creatividad son poco colaborativos, no ponen empeño en sus actividades hay poco respeto entre sus compañeros, hay una convivencia tirante y una falta de comunicación un poco favorable.

Pero si cambiamos la actitud y percepción tendremos un ambiente escolar nutrido y esto nos ayudara para que nuestros alumnos tengan una actitud y percepción positiva se tiene que sentir parte del entorno escolar y se sienta cómodo tanto con sus compañeros y con su maestro.

Al igual para que el alumno sienta que su aprendizaje es muy significativo él tiene que tener la impresión de que sus tareas son importantes, interesante que crezcan sus habilidades y cuáles son sus recursos para completar sus tareas teniendo claro que sus tareas son importantes e interesantes y su importancia dentro de las actividades.

Es importante tomar en cuenta de las actitudes y las percepciones que tengamos en el salón son la parte importante para su aprendizaje, así el alumno se siente perteneciente a un lugar y su comportamiento es de mayor responsabilidad manteniendo así su actitud es positiva y más participativa y propositiva a la hora de las actividades.

Cuando estamos consciente de que nuestras actitudes y percepciones son positivas, el alumno se siente contento y su rendimiento escolar mejora, pero cuando sentimos una actitud y percepción negativa hacia un alumno baja su rendimiento pero si cambiamos esta percepción y vemos lo mejor en él, su cambio es excelente para que ellos cambien su forma de convivencia e interacción con sus compañeros.

Es importante que nosotros como maestros tomemos en cuenta que nuestras actitudes y percepciones les afectan a nuestros alumnos aunque sean de manera involuntaria tenemos que tomar

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